El rubio atacante celebrado como el mejor del Mundial de Sudáfrica 2010 vistiendo la "celeste", convirtió dos veces de zurda, una con un remate que se transformó en golazo desde afuera del área para el 3-1 al conjunto montevideano.
Forlán quería ponerle un final a su carrera en el equipo de sus amores y ya empezó a hacerlo, porque ese deseo viene de lejos en el tiempo, ya que de muy joven viajó a la Argentina para seguir su carrera en Independiente y de ahí partió a Europa.
La vuelta a Sudamérica fue para vestir nuevamente una camiseta roja, pero no precisamente la del equipo de Avellaneda sino la del brasileño Inter, de Porto Alegre.
Por eso este sabor especial en la previa del campeonato uruguayo que comenzará el próximo fin de semana con este debut dominical en el que marcó dos tantos luego que Luis Aguiar había abierto el marcador para el triunfador equipo dirigido por Pablo Bengoechea y antes del final descontara Andrés Colombino para Wanderers.
El rubio atacante celebrado como el mejor del Mundial de Sudáfrica 2010 vistiendo la "celeste", convirtió dos veces de zurda, una con un remate que se transformó en golazo desde afuera del área para el 3-1 al conjunto montevideano.
Forlán quería ponerle un final a su carrera en el equipo de sus amores y ya empezó a hacerlo, porque ese deseo viene de lejos en el tiempo, ya que de muy joven viajó a la Argentina para seguir su carrera en Independiente y de ahí partió a Europa.
La vuelta a Sudamérica fue para vestir nuevamente una camiseta roja, pero no precisamente la del equipo de Avellaneda sino la del brasileño Inter, de Porto Alegre.
Por eso este sabor especial en la previa del campeonato uruguayo que comenzará el próximo fin de semana con este debut dominical en el que marcó dos tantos luego que Luis Aguiar había abierto el marcador para el triunfador equipo dirigido por Pablo Bengoechea y antes del final descontara Andrés Colombino para Wanderers.