Se vienen cinco semanas claves en las que se va a definir el futuro de Chubut

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19 SEP 2015 - 22:16 | Actualizado

En 35 días, los chubutenses van a elegir al próximo gobernador. Lejos del clima electoral que se vivía a esta altura en las PASO de agosto pasado, los comicios generales se acercan con paso cansino, como si los principales candidatos todavía se estuvieran guardando las energías para los últimos días.

El gobernador Martín Buzzi sigue a paso firme su recorrida por todos los rincones de la provincia. Apenas interrumpida por algunos viajes por reuniones a Buenos Aires, el mandatario camina casi los siete días de la semana llevando su propuesta.

Es verdad que algunos programas oficiales, como “Casa Abierta” o “Invertir Igualdad”, son ideales para mantener un cara a cara con la gente, pero siempre ha sucedido con los candidatos que ocupan cargos públicos que terminan mezclando sus actividades de gestión con la campaña electoral.

En el terreno

El contacto permanente con la gente siempre ha sido una clave para “evangelizar” al electorado. Buzzi, que no ha dejado de aprender todos los días un poco desde que asumió, derribando las críticas de los que lo defenestraban por su falta de experiencia y hasta le auguraban una salida anticipada del Gobierno, le encontró la vuelta al tema. Se sienta, escucha a la gente y, en muchos casos, aporta soluciones coyunturales. Porque para las de largo plazo debe renovar la confianza de la gente el 25 de octubre.

Esta semana, Buzzi se paseó por Comodoro y Rawson junto a Karina Rabolini, la esposa de Daniel Scioli, que repartió elogios para el gobernador chubutense a diestra y siniestra y volvió a dejar en claro que más allá del exiguo caudal electoral que puede aportar Chubut al mapa global de la Argentina, al candidato presidencial del Frente para la Victoria lo une con Buzzi una relación especial.

Rabolini no vino a Chubut de pasada: estuvo tres días y luego se fue a Neuquén, y un día después a Santa Fe. Hoy no sólo es el bastón familiar de Scioli sino también una colaboradora central en la conquista del voto en todo el territorio.

Alineados es mejor

“Junto a Scioli vamos a profundizar las políticas impulsadas por Néstor y Cristina para garantizar la igualdad y la dignidad de nuestra gente”, devolvió Buzzi. Fue en una reunión en Trelew con la mayoría de los sindicatos de Chubut.

Buzzi comenzó a fortalecer en su discurso algo que será más notable aún en estas próximas cinco semanas: la necesidad de alinear políticamente a Nación, Provincia y municipios como argumento electoral. Sobran los ejemplos de desacoples en ese sentido que terminaron haciendo pagar costos innecesarios a la gente, provocados casi siempre por los intereses políticos de los gobernantes de turno. Y en este caso, nadie ha sido inocente.

En el camino a octubre, Buzzi sostiene que “la obra colectiva está por encima de los intereses personales” y que junto a Scioli “somos parte de un proyecto político que defiende cada puesto de trabajo y la apertura de nuevas inversiones privadas en Chubut y en el país”.

“Está muy bien que todos tiremos para adelante y proyectemos, pero también que seamos capaces de sumar todo lo que se viene haciendo, para que el futuro sea distinto y cada vez más profundo”, remarcó.

Buzzi se entusiasma con las encuestas que, según su entorno, ya lo dan arriba. Por ahora, nadie filtró un solo número que pueda confirmar esa aseveración pero en el Gobierno aseguran que el crecimiento se sostiene en la zona sur, en donde se impondrá con mayor amplitud que el 9 de agosto.

Riesgos

El camino de Buzzi hacia las elecciones generales, igualmente, no será un lecho de rosas. Las ventajas que suelen tener los que gobiernan a la hora de la campaña electoral también pueden ser un problema si algunas situaciones conflictivas son mal manejadas y terminan causando daño en la estrategia electoral.

El frente económico sigue siendo uno de los que mayor atención le demanda al gobernador.

Esta semana lo mandó a su ministro de Economía a cerrar la colocación de deuda que estaba demorada desde mayo pasado, que le permitirá conseguir fondos para amortiguar cualquier cimbronazo que pueda haber hasta diciembre.

No por nada, desde la oposición cargaron las tintas en las últimas semanas sobre el tema económico. Saben que la gente vota muchas veces con el bolsillo y sembrar dudas puede hacer cosechar réditos.

Buzzi asegura que tiene todo controlado y que, inclusive, dará respuestas concretas a reclamos gremiales por ahora incipientes pero que podrían crecer si no se arregla el tema, como las demandas de la UOCRA por la caída del empleo en la zona del Valle.

Volvió Das Neves

La salida de escena de Mario Das Neves por cuestiones de salud dejó un vacío difícil de llenar. No hay en Chubut Somos Todos una figura que pueda tomar la posta en la campaña. Al menos, en cuanto al contacto con la gente.

Su regreso, el viernes pasado, más la cumbre de dirigentes de toda la provincia que lideró ayer en Trelew, le inyectó a todos el ánimo que muchos candidatos y militantes parecían haber perdido. Si hay un motivador nato, ese es Das Neves.

El líder de Chubut Somos Todos volvió con la difícil misión de conservar el caudal electoral que le dio un exiguo triunfo ante Buzzi el 9 de agosto, y sumar más votos para sí y sus candidatos en lugares en donde no se ganó por el margen que ellos esperaban en las PASO.

“Estoy bien y voy a estar mejor para gobernar Chubut por cuatro años”, fueron las palabras que escucharon los dirigentes que se reunieron ayer en un quincho de la zona sur de Trelew.

Aún a media máquina, Das Neves es el mayor animal político que haya dado la provincia en los últimos veinte años. Volvió, reunió a la tropa y les insufló la energía que hay que tener para caminar en el último tramo de una campaña electoral.

“Nosotros vamos a seguir sumando chubutenses a este proyecto pero sin hacer pactos espurios. Nosotros no tenemos de qué avergonzarnos, no somos quienes han deshonrado la política con incapacidad y después mienten para ocultarlo”, disparó el exgobernador.

“A cinco semanas de las elecciones les pido que el mensaje que lleven a los chubutenses sea clarísimo: qué vamos a hacer en su comunidad y cómo vamos a hacerlo, sin vueltas.” Das Neves sabe mejor que nadie qué quiere la gente y cómo convencerlos de que él es la mejor opción.

Fue así varias veces en los últimos doce años. Aunque esta vez parece más difícil. Pero volvió al ruedo para intentarlo.

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19 SEP 2015 - 22:16

En 35 días, los chubutenses van a elegir al próximo gobernador. Lejos del clima electoral que se vivía a esta altura en las PASO de agosto pasado, los comicios generales se acercan con paso cansino, como si los principales candidatos todavía se estuvieran guardando las energías para los últimos días.

El gobernador Martín Buzzi sigue a paso firme su recorrida por todos los rincones de la provincia. Apenas interrumpida por algunos viajes por reuniones a Buenos Aires, el mandatario camina casi los siete días de la semana llevando su propuesta.

Es verdad que algunos programas oficiales, como “Casa Abierta” o “Invertir Igualdad”, son ideales para mantener un cara a cara con la gente, pero siempre ha sucedido con los candidatos que ocupan cargos públicos que terminan mezclando sus actividades de gestión con la campaña electoral.

En el terreno

El contacto permanente con la gente siempre ha sido una clave para “evangelizar” al electorado. Buzzi, que no ha dejado de aprender todos los días un poco desde que asumió, derribando las críticas de los que lo defenestraban por su falta de experiencia y hasta le auguraban una salida anticipada del Gobierno, le encontró la vuelta al tema. Se sienta, escucha a la gente y, en muchos casos, aporta soluciones coyunturales. Porque para las de largo plazo debe renovar la confianza de la gente el 25 de octubre.

Esta semana, Buzzi se paseó por Comodoro y Rawson junto a Karina Rabolini, la esposa de Daniel Scioli, que repartió elogios para el gobernador chubutense a diestra y siniestra y volvió a dejar en claro que más allá del exiguo caudal electoral que puede aportar Chubut al mapa global de la Argentina, al candidato presidencial del Frente para la Victoria lo une con Buzzi una relación especial.

Rabolini no vino a Chubut de pasada: estuvo tres días y luego se fue a Neuquén, y un día después a Santa Fe. Hoy no sólo es el bastón familiar de Scioli sino también una colaboradora central en la conquista del voto en todo el territorio.

Alineados es mejor

“Junto a Scioli vamos a profundizar las políticas impulsadas por Néstor y Cristina para garantizar la igualdad y la dignidad de nuestra gente”, devolvió Buzzi. Fue en una reunión en Trelew con la mayoría de los sindicatos de Chubut.

Buzzi comenzó a fortalecer en su discurso algo que será más notable aún en estas próximas cinco semanas: la necesidad de alinear políticamente a Nación, Provincia y municipios como argumento electoral. Sobran los ejemplos de desacoples en ese sentido que terminaron haciendo pagar costos innecesarios a la gente, provocados casi siempre por los intereses políticos de los gobernantes de turno. Y en este caso, nadie ha sido inocente.

En el camino a octubre, Buzzi sostiene que “la obra colectiva está por encima de los intereses personales” y que junto a Scioli “somos parte de un proyecto político que defiende cada puesto de trabajo y la apertura de nuevas inversiones privadas en Chubut y en el país”.

“Está muy bien que todos tiremos para adelante y proyectemos, pero también que seamos capaces de sumar todo lo que se viene haciendo, para que el futuro sea distinto y cada vez más profundo”, remarcó.

Buzzi se entusiasma con las encuestas que, según su entorno, ya lo dan arriba. Por ahora, nadie filtró un solo número que pueda confirmar esa aseveración pero en el Gobierno aseguran que el crecimiento se sostiene en la zona sur, en donde se impondrá con mayor amplitud que el 9 de agosto.

Riesgos

El camino de Buzzi hacia las elecciones generales, igualmente, no será un lecho de rosas. Las ventajas que suelen tener los que gobiernan a la hora de la campaña electoral también pueden ser un problema si algunas situaciones conflictivas son mal manejadas y terminan causando daño en la estrategia electoral.

El frente económico sigue siendo uno de los que mayor atención le demanda al gobernador.

Esta semana lo mandó a su ministro de Economía a cerrar la colocación de deuda que estaba demorada desde mayo pasado, que le permitirá conseguir fondos para amortiguar cualquier cimbronazo que pueda haber hasta diciembre.

No por nada, desde la oposición cargaron las tintas en las últimas semanas sobre el tema económico. Saben que la gente vota muchas veces con el bolsillo y sembrar dudas puede hacer cosechar réditos.

Buzzi asegura que tiene todo controlado y que, inclusive, dará respuestas concretas a reclamos gremiales por ahora incipientes pero que podrían crecer si no se arregla el tema, como las demandas de la UOCRA por la caída del empleo en la zona del Valle.

Volvió Das Neves

La salida de escena de Mario Das Neves por cuestiones de salud dejó un vacío difícil de llenar. No hay en Chubut Somos Todos una figura que pueda tomar la posta en la campaña. Al menos, en cuanto al contacto con la gente.

Su regreso, el viernes pasado, más la cumbre de dirigentes de toda la provincia que lideró ayer en Trelew, le inyectó a todos el ánimo que muchos candidatos y militantes parecían haber perdido. Si hay un motivador nato, ese es Das Neves.

El líder de Chubut Somos Todos volvió con la difícil misión de conservar el caudal electoral que le dio un exiguo triunfo ante Buzzi el 9 de agosto, y sumar más votos para sí y sus candidatos en lugares en donde no se ganó por el margen que ellos esperaban en las PASO.

“Estoy bien y voy a estar mejor para gobernar Chubut por cuatro años”, fueron las palabras que escucharon los dirigentes que se reunieron ayer en un quincho de la zona sur de Trelew.

Aún a media máquina, Das Neves es el mayor animal político que haya dado la provincia en los últimos veinte años. Volvió, reunió a la tropa y les insufló la energía que hay que tener para caminar en el último tramo de una campaña electoral.

“Nosotros vamos a seguir sumando chubutenses a este proyecto pero sin hacer pactos espurios. Nosotros no tenemos de qué avergonzarnos, no somos quienes han deshonrado la política con incapacidad y después mienten para ocultarlo”, disparó el exgobernador.

“A cinco semanas de las elecciones les pido que el mensaje que lleven a los chubutenses sea clarísimo: qué vamos a hacer en su comunidad y cómo vamos a hacerlo, sin vueltas.” Das Neves sabe mejor que nadie qué quiere la gente y cómo convencerlos de que él es la mejor opción.

Fue así varias veces en los últimos doce años. Aunque esta vez parece más difícil. Pero volvió al ruedo para intentarlo.


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