El joven empresario de Trelew Pablo Mamet asumirá en las próximas horas como nuevo subsecretario de Regulación y Control en reemplazo de Eduardo Arzani, en un área que depende del ministro de la Producción, Hernán Alonso.
El desembarco de Mamet en el Gabinete era casi cantado, aunque faltaba definirse su lugar. En los últimos meses se mostró muy cerca del gobernador, además de tener una amistad de muchos años con el secretario privado del mandatario, Gonzalo Carpintero.
Mientras que la salida de Arzani causó alguna sorpresa, sobre todo tratándose de un técnico que acompañó a Das Neves en distintos lugares durante las últimas dos gobernaciones de Mario Das Neves, e inclusive sumándose en su momento a la intendencia de otro dasnevista, Máximo Pérez Catán, en Trelew.
Claro que el haber de Arzani también cuenta un paso por la gestión de Martín Buzzi: en 2014 fue titular de la Casa del Chubut y renunció envuelto en una polémica, cuando un secretario del entonces gobernador, Diego Siciliano, lo presionó por haberle prestado a Das Neves la sede de la provincia en la Ciudad de Buenos Aires.
El joven empresario de Trelew Pablo Mamet asumirá en las próximas horas como nuevo subsecretario de Regulación y Control en reemplazo de Eduardo Arzani, en un área que depende del ministro de la Producción, Hernán Alonso.
El desembarco de Mamet en el Gabinete era casi cantado, aunque faltaba definirse su lugar. En los últimos meses se mostró muy cerca del gobernador, además de tener una amistad de muchos años con el secretario privado del mandatario, Gonzalo Carpintero.
Mientras que la salida de Arzani causó alguna sorpresa, sobre todo tratándose de un técnico que acompañó a Das Neves en distintos lugares durante las últimas dos gobernaciones de Mario Das Neves, e inclusive sumándose en su momento a la intendencia de otro dasnevista, Máximo Pérez Catán, en Trelew.
Claro que el haber de Arzani también cuenta un paso por la gestión de Martín Buzzi: en 2014 fue titular de la Casa del Chubut y renunció envuelto en una polémica, cuando un secretario del entonces gobernador, Diego Siciliano, lo presionó por haberle prestado a Das Neves la sede de la provincia en la Ciudad de Buenos Aires.