"No sé por qué será pero en la Davis juego mejor que en cualquier lado. Siento que a veces se me hace más fácil. Ojalá que pueda seguir manteniendo esta racha", afirmó el "Yacaré", que hoy sumó su undécimo triunfo en single sobre catorce presentaciones y amplió a diez encuentros su racha invicta.
Mayer, de 29 años y 114 en el actual ranking ATP, se emocionó por el logro en un partido decisivo que tuvo que afrontar tras la baja de Juan Martín Del Potro.
"Es algo muy particular para mí. Es un año difícil por todas las lesiones que tuve, pero hoy salí con toda la confianza que me dio el equipo. Estoy muy agradecido", aseguró.
El correntino rechazó el calificativo de "héroe" por su victoria ante Evans y destacó el valor de lo realizado por el equipo. "No, héroe no, acá el héroe es el equipo porque jugamos todos. Cada uno que le toca entrar trata de hacer lo mejor, a mí simplemente me tocó jugar un partido para ganar la serie", minimizó.
"No me considero un héroe, solo hice mi trabajo. Si Del Potro no vencía a (Andy) Murray no podíamos haber ganado nunca acá, eso lo tenemos muy claro", confesó el "Yacaré", de 29 años.
El correntino, con un record de 10 triunfos consecutivos en singles en Copa Davis (el sábado perdió la marca que ostentaba en dobles), admitió que cuando representa a la Argentina suele sacar a relucir su mejor versión, en un año en el cual no lo acompañaron los resultados en el circuito.
"La Davis es especial para mi, siempre rindo un poco más. Después de un año que no fue bueno por el tema de mi lesión en el hombro, haber vivido esto es increíble, agradezco haber sido convocado a pesar de que no atravesaba un buen momento", añadió Mayer.
Respecto de su partido ante Evans, que comenzó complicado tras haber perdido el primer set y luego se allanó en los siguientes, reveló que fue muy importante mantener su plan de juego aún en los momentos adversos.
"Salí a pegarle fuerte a la pelota, lo más fuerte posible. Cuando erraba desde el banco mis compañeros me decían que insista, y seguí hasta que me dio resultados y lo superé a partir del segundo set", comentó Mayer.
El "Yacaré" no dejaba de recibir elogios, siempre acompañado por su esposa Milagros, quien le dará su primer hijo en enero próximo y suele acompañarlo en cada serie.
"Me hace bien tenerla a mi lado, en los momentos duros y en estos que nos toca festejar algo que merecíamos", destacó Mayer, quien fue artífice este año en el triunfo sobre Polonia (3-2) en Gdansk y no estuvo en la victoria ante Italia (3-1) en Pesaro.
"No sé por qué será pero en la Davis juego mejor que en cualquier lado. Siento que a veces se me hace más fácil. Ojalá que pueda seguir manteniendo esta racha", afirmó el "Yacaré", que hoy sumó su undécimo triunfo en single sobre catorce presentaciones y amplió a diez encuentros su racha invicta.
Mayer, de 29 años y 114 en el actual ranking ATP, se emocionó por el logro en un partido decisivo que tuvo que afrontar tras la baja de Juan Martín Del Potro.
"Es algo muy particular para mí. Es un año difícil por todas las lesiones que tuve, pero hoy salí con toda la confianza que me dio el equipo. Estoy muy agradecido", aseguró.
El correntino rechazó el calificativo de "héroe" por su victoria ante Evans y destacó el valor de lo realizado por el equipo. "No, héroe no, acá el héroe es el equipo porque jugamos todos. Cada uno que le toca entrar trata de hacer lo mejor, a mí simplemente me tocó jugar un partido para ganar la serie", minimizó.
"No me considero un héroe, solo hice mi trabajo. Si Del Potro no vencía a (Andy) Murray no podíamos haber ganado nunca acá, eso lo tenemos muy claro", confesó el "Yacaré", de 29 años.
El correntino, con un record de 10 triunfos consecutivos en singles en Copa Davis (el sábado perdió la marca que ostentaba en dobles), admitió que cuando representa a la Argentina suele sacar a relucir su mejor versión, en un año en el cual no lo acompañaron los resultados en el circuito.
"La Davis es especial para mi, siempre rindo un poco más. Después de un año que no fue bueno por el tema de mi lesión en el hombro, haber vivido esto es increíble, agradezco haber sido convocado a pesar de que no atravesaba un buen momento", añadió Mayer.
Respecto de su partido ante Evans, que comenzó complicado tras haber perdido el primer set y luego se allanó en los siguientes, reveló que fue muy importante mantener su plan de juego aún en los momentos adversos.
"Salí a pegarle fuerte a la pelota, lo más fuerte posible. Cuando erraba desde el banco mis compañeros me decían que insista, y seguí hasta que me dio resultados y lo superé a partir del segundo set", comentó Mayer.
El "Yacaré" no dejaba de recibir elogios, siempre acompañado por su esposa Milagros, quien le dará su primer hijo en enero próximo y suele acompañarlo en cada serie.
"Me hace bien tenerla a mi lado, en los momentos duros y en estos que nos toca festejar algo que merecíamos", destacó Mayer, quien fue artífice este año en el triunfo sobre Polonia (3-2) en Gdansk y no estuvo en la victoria ante Italia (3-1) en Pesaro.