Murió una mujer de Trevelin internada y suman 11 las víctimas por el brote de hantavirus

El lunes pasado había sido internada por tener síntomas compatibles con la enfermedad. Susana Briones era la madre de Jéssica Luengo, una joven empleada del municipio de Trevelin que había fallecido también por el virus que circula en la Cordillera el pasado 9 de enero.

Una historia trágica. Susana Briones y su hija Jéssica Luengo fallecieron por el virus del hanta.
19 ENE 2019 - 20:49 | Actualizado

Una mujer de 49 años oriunda de Trevelin se convirtió en la víctima número 11 del brote de hantavirus desatado en Chubut en diciembre pasado. Según confirmó el Ministerio de Salud de la provincia, la mujer fallecida permanecía internada en la Unidad de Terapia Intensiva del Hospital Zonal Equel, positiva para Hanta Virus.

Se trata de Susana Briones, que el lunes pasado había sido internada “en observación” por tener síntomas compatibles con hantavirus. Susana era la madre de Jessica Luengo, una joven empleada del municipio de Trevelin -trabajaba de maestro mayor de obras-, que había fallecido por hanta el pasado 9 de enero, el mismo día que murieron otras dos personas más por el brote epidemiológico generado en la localidad de Epuyén.

Briones, que había estado en contacto con su hija, fue derivada al Hospital de Esquel el martes pasado, donde permanecía internada en Terapia Intensiva hasta que se produjo su deceso este viernes por la noche.

Parte oficial

Según reportó el Ministerio de Salud de Chubut en su parte de este sábado, desde el inicio de la contingencia epidemiológica, el 3 de diciembre de 2018, ya se se registraron 29 casos confirmados (27 en Esquel, uno en Bariloche y otro en Chile) ya suman 11 los fallecidos.

Mientras que todavía hay tres personas que siguen internadas en Esquel, dos de ellas en terapia.

Pizzi y el aislamiento

El ministro de Salud de la Provincia, Adrián Pizzi, reconoció un “cauteloso optimismo” por la no aparición de casos nuevos, sospechosos o en observación en Epuyén. “Esto nos hace pensar que de seguir así, en poco tiempo, el escenario sería muy bueno y las medidas que se han aplicado son las que realmente corresponden desde lo científico y lo epidemiológico”, expresó el funcionario.

“De alguna manera, de los casos positivos que hemos tenido, han salido de este aislamiento respiratorio. Eran personas que se encontraban en esta condición por lo que tenemos la certeza de que las cadenas de transmisión se han cortado en estas personas y que estas no han contagiado a otras. Por lo cual estamos de alguna manera, buscándole la vuelta para que lo que habíamos pensado desarrollar como estrategia que cortara las cadenas de transmisión del brote, resulta efectiva”. Y aclaró que este análisis no implicaba “esperar” más casos positivos sin descartar que se produjeran nuevos episodios.

“Esperamos que dentro del aislamiento respiratorio selectivo se profundice la búsqueda del virus” y confirmó el envío de 96 muestras de sangre para ser sometidas a nuevos estudios en el Instituto Malbrán.

“Buscamos adelantarnos hasta diez o doce días del inicio de los síntomas. Teniendo en cuenta el período de incubación de la enfermedad que es de veintiún días promedio; con ésta técnica nos adelantaríamos y hablaríamos de personas que son sanas pero que eventualmente alguno puede tener el virus. Eso se determinará en el transcurso de los próximos días”, sostuvo Pizzi.

Aclaró que el aislamiento no termina porque se repetirían estudios en cinco días para volver a “vigilar” la evolución. “Hay que esperar que las pruebas se positivicen. No es que las personas tienen que estar treinta días adentro de su casa sino que va en función del contacto. Entonces son treinta días posteriores al contacto, Algunos salieron del aislamiento y otras en las próximas dos semanas estarían afuera del mismo”.

Sostuvo que los vecinos de Epuyén han “aceptado” los métodos sanitarios dispuestos por Salud y que la intervención de la Justicia y la Policía ha permitido alcanzar los objetivos previstos. “Los vecinos están aceptando. Cada núcleo familiar o cada persona recibió una notificación judicial de que el cumplimiento es obligatorio y debe hacerlo. En eso, hay un acatamiento del cien por cien planteado también desde el acompañamiento con un gran trabajo de los municipios, el ministerio de Familia”. Destacó que existen casos de asistencia total en los que se requiere el pago de servicios, la asistencia con alimentos e insumos y hasta elementos de higiene personal. “Manifestamos –dijo Pizzi- nuestro agradecimiento a las personas que se encuentran en esta situación compleja con un gran impacto sicológico sobre la familia, porque muchas perdieron seres queridos. Se entendió ante qué estamos y sentimos un profundo agradecimiento a estas personas. El sistema sanitario ha estado a pleno en la atención de las personas positivas y que han desarrollado la enfermedad”.

Aclaró que el acompañamiento policial se hace aunque reconoció “pruritos” dentro de los mismos equipos de Salud. “Policía se ha sumado a la mesa de contingencia y ha trabajado; acompañando la notificaciones. Es una medida que era necesaria, no nos quedaban muchas alternativas”. Del mismo modo, el ministro de Salud reconoció la necesidad de contar con un mayor recurso humano ante la sobredemanda sanitaria. “Planteamos a las autoridades nacionales inclusive, la necesidad de un mayor recurso humano. Requerimos dos terapistas y dos clínicos hasta la finalización del brote”. Finalmente pidió respetar los “tiempos epidemiológicos” y que la ciudadanía de la Cordillera en general pueda lentamente recuperar su vida social habitual.

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Una historia trágica. Susana Briones y su hija Jéssica Luengo fallecieron por el virus del hanta.
19 ENE 2019 - 20:49

Una mujer de 49 años oriunda de Trevelin se convirtió en la víctima número 11 del brote de hantavirus desatado en Chubut en diciembre pasado. Según confirmó el Ministerio de Salud de la provincia, la mujer fallecida permanecía internada en la Unidad de Terapia Intensiva del Hospital Zonal Equel, positiva para Hanta Virus.

Se trata de Susana Briones, que el lunes pasado había sido internada “en observación” por tener síntomas compatibles con hantavirus. Susana era la madre de Jessica Luengo, una joven empleada del municipio de Trevelin -trabajaba de maestro mayor de obras-, que había fallecido por hanta el pasado 9 de enero, el mismo día que murieron otras dos personas más por el brote epidemiológico generado en la localidad de Epuyén.

Briones, que había estado en contacto con su hija, fue derivada al Hospital de Esquel el martes pasado, donde permanecía internada en Terapia Intensiva hasta que se produjo su deceso este viernes por la noche.

Parte oficial

Según reportó el Ministerio de Salud de Chubut en su parte de este sábado, desde el inicio de la contingencia epidemiológica, el 3 de diciembre de 2018, ya se se registraron 29 casos confirmados (27 en Esquel, uno en Bariloche y otro en Chile) ya suman 11 los fallecidos.

Mientras que todavía hay tres personas que siguen internadas en Esquel, dos de ellas en terapia.

Pizzi y el aislamiento

El ministro de Salud de la Provincia, Adrián Pizzi, reconoció un “cauteloso optimismo” por la no aparición de casos nuevos, sospechosos o en observación en Epuyén. “Esto nos hace pensar que de seguir así, en poco tiempo, el escenario sería muy bueno y las medidas que se han aplicado son las que realmente corresponden desde lo científico y lo epidemiológico”, expresó el funcionario.

“De alguna manera, de los casos positivos que hemos tenido, han salido de este aislamiento respiratorio. Eran personas que se encontraban en esta condición por lo que tenemos la certeza de que las cadenas de transmisión se han cortado en estas personas y que estas no han contagiado a otras. Por lo cual estamos de alguna manera, buscándole la vuelta para que lo que habíamos pensado desarrollar como estrategia que cortara las cadenas de transmisión del brote, resulta efectiva”. Y aclaró que este análisis no implicaba “esperar” más casos positivos sin descartar que se produjeran nuevos episodios.

“Esperamos que dentro del aislamiento respiratorio selectivo se profundice la búsqueda del virus” y confirmó el envío de 96 muestras de sangre para ser sometidas a nuevos estudios en el Instituto Malbrán.

“Buscamos adelantarnos hasta diez o doce días del inicio de los síntomas. Teniendo en cuenta el período de incubación de la enfermedad que es de veintiún días promedio; con ésta técnica nos adelantaríamos y hablaríamos de personas que son sanas pero que eventualmente alguno puede tener el virus. Eso se determinará en el transcurso de los próximos días”, sostuvo Pizzi.

Aclaró que el aislamiento no termina porque se repetirían estudios en cinco días para volver a “vigilar” la evolución. “Hay que esperar que las pruebas se positivicen. No es que las personas tienen que estar treinta días adentro de su casa sino que va en función del contacto. Entonces son treinta días posteriores al contacto, Algunos salieron del aislamiento y otras en las próximas dos semanas estarían afuera del mismo”.

Sostuvo que los vecinos de Epuyén han “aceptado” los métodos sanitarios dispuestos por Salud y que la intervención de la Justicia y la Policía ha permitido alcanzar los objetivos previstos. “Los vecinos están aceptando. Cada núcleo familiar o cada persona recibió una notificación judicial de que el cumplimiento es obligatorio y debe hacerlo. En eso, hay un acatamiento del cien por cien planteado también desde el acompañamiento con un gran trabajo de los municipios, el ministerio de Familia”. Destacó que existen casos de asistencia total en los que se requiere el pago de servicios, la asistencia con alimentos e insumos y hasta elementos de higiene personal. “Manifestamos –dijo Pizzi- nuestro agradecimiento a las personas que se encuentran en esta situación compleja con un gran impacto sicológico sobre la familia, porque muchas perdieron seres queridos. Se entendió ante qué estamos y sentimos un profundo agradecimiento a estas personas. El sistema sanitario ha estado a pleno en la atención de las personas positivas y que han desarrollado la enfermedad”.

Aclaró que el acompañamiento policial se hace aunque reconoció “pruritos” dentro de los mismos equipos de Salud. “Policía se ha sumado a la mesa de contingencia y ha trabajado; acompañando la notificaciones. Es una medida que era necesaria, no nos quedaban muchas alternativas”. Del mismo modo, el ministro de Salud reconoció la necesidad de contar con un mayor recurso humano ante la sobredemanda sanitaria. “Planteamos a las autoridades nacionales inclusive, la necesidad de un mayor recurso humano. Requerimos dos terapistas y dos clínicos hasta la finalización del brote”. Finalmente pidió respetar los “tiempos epidemiológicos” y que la ciudadanía de la Cordillera en general pueda lentamente recuperar su vida social habitual.


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