“Caramelo” como lo llaman su compañeros fue seleccionado por la “Academia” durante un partido organizado por Huracán en su complejo; donde se destacó el talentoso enganche de sólo 14 años por su “buen juego en los pies y visión de campo”.
Prueba
Luego estuvo una semana en el predio de Racing y ahora con la notificación de que ha sido confirmado se lleva su talento al predio Tita Mattiusi.
Admirador de Neymar
Admirador de los regates de Neymar, Stieva se define como un “jugador tranquilo, que disfruta más de una asistencia que un gol” y no se olvida de sus orígenes: “Huracán para mí es todo. Si no fuera por el club no habría llegado a donde estoy ahora”.
Esta intención del “Globo” de transformarse en un club modelo de la Patagonia, poniendo énfasis en la formación de jugadores es la tendencia que se verá cada vez más marcada en esta nueva etapa. Con el crecimiento institucional, apostando fuerte a las inferiores.
Como el caso de “Caramelo”, un apodo que sorprendió hasta la madre; porque desde la simplicidad que impone el fútbol, a sus compañeros le resultaba difícil su nombre y muchas veces lo confundían con un conocido edulcorante.
La esperanza
Quizás en no mucho tiempo este valor surgido de las inferiores de Huracán de Trelew, comience a “endulzar” la vida de los hinchas de uno de los grandes de Avellaneda, y pueda desplegar toda su hablidad.
“Caramelo” como lo llaman su compañeros fue seleccionado por la “Academia” durante un partido organizado por Huracán en su complejo; donde se destacó el talentoso enganche de sólo 14 años por su “buen juego en los pies y visión de campo”.
Prueba
Luego estuvo una semana en el predio de Racing y ahora con la notificación de que ha sido confirmado se lleva su talento al predio Tita Mattiusi.
Admirador de Neymar
Admirador de los regates de Neymar, Stieva se define como un “jugador tranquilo, que disfruta más de una asistencia que un gol” y no se olvida de sus orígenes: “Huracán para mí es todo. Si no fuera por el club no habría llegado a donde estoy ahora”.
Esta intención del “Globo” de transformarse en un club modelo de la Patagonia, poniendo énfasis en la formación de jugadores es la tendencia que se verá cada vez más marcada en esta nueva etapa. Con el crecimiento institucional, apostando fuerte a las inferiores.
Como el caso de “Caramelo”, un apodo que sorprendió hasta la madre; porque desde la simplicidad que impone el fútbol, a sus compañeros le resultaba difícil su nombre y muchas veces lo confundían con un conocido edulcorante.
La esperanza
Quizás en no mucho tiempo este valor surgido de las inferiores de Huracán de Trelew, comience a “endulzar” la vida de los hinchas de uno de los grandes de Avellaneda, y pueda desplegar toda su hablidad.