"Es una tontería. Covid-19 no sabe que estamos a una altitud de crucero. Es estúpido, es todo teatro",se justificó Adam Jenne (38), el protagonista del insólito hecho en el aeropuerto de Fort Lauderdale, al canal de televisión NBC 2.
De acuerdo con The New York Post, Jenne dijo no fue la primera vez que convertía una"tanga rojas" en un tapabocas arriba de un avión. "Cada vuelo me he encontrado con diferentes reacciones de la tripulación. Algunos con un aprecio salvaje y otros confortativos".
United Airlines justificó la decisión de no dejar viajar al pasajero. “El cliente claramente no cumplió con el mandato federal de máscaras y apreciamos que nuestro equipo haya abordado el problema en tierra antes del despegue, evitando posibles interrupciones en el aire. La ropa interior se secuestró como evidecia”, informó la aerolínea.
Según la Administración Federal de Aviación (FAA, en inglés), que investiga los incidentes con pasajeros díscolos en los aviones, hasta el 14 de diciembre este año las aerolíneas hicieron 5.664 denuncias. De esas denuncias, 4.072 tiene que ver con el uso de barbijos a bordo y la FAA comenzó a investigar 1.030.
Las cifras muestran una enorme escalada en esos incidentes y en 2020, el año que comenzó la pandemia y las restricciones de viajes, la FAA investigó 183 denuncias y en 2019, un año "común", 146.
"Es una tontería. Covid-19 no sabe que estamos a una altitud de crucero. Es estúpido, es todo teatro",se justificó Adam Jenne (38), el protagonista del insólito hecho en el aeropuerto de Fort Lauderdale, al canal de televisión NBC 2.
De acuerdo con The New York Post, Jenne dijo no fue la primera vez que convertía una"tanga rojas" en un tapabocas arriba de un avión. "Cada vuelo me he encontrado con diferentes reacciones de la tripulación. Algunos con un aprecio salvaje y otros confortativos".
United Airlines justificó la decisión de no dejar viajar al pasajero. “El cliente claramente no cumplió con el mandato federal de máscaras y apreciamos que nuestro equipo haya abordado el problema en tierra antes del despegue, evitando posibles interrupciones en el aire. La ropa interior se secuestró como evidecia”, informó la aerolínea.
Según la Administración Federal de Aviación (FAA, en inglés), que investiga los incidentes con pasajeros díscolos en los aviones, hasta el 14 de diciembre este año las aerolíneas hicieron 5.664 denuncias. De esas denuncias, 4.072 tiene que ver con el uso de barbijos a bordo y la FAA comenzó a investigar 1.030.
Las cifras muestran una enorme escalada en esos incidentes y en 2020, el año que comenzó la pandemia y las restricciones de viajes, la FAA investigó 183 denuncias y en 2019, un año "común", 146.