El agente que tenía en custodia al ciudadano argentino domiciliado en Trelew Juan Pablo Torroija, que el pasado mes de julio presuntamente se “colgó” en una celda de la Policía Municipal de Girona, en Catalunya, España, y el cabo que estaba de jefe de turno la noche de los hechos, declararán a finales de mes ante al juez como imputados por un delito de “homicidio imprudente”, informó el diario español ABC.
Una vez que la titular del Juzgado de Instrucción número 4 les tome declaración como imputados, como solicitó el abogado de la acusación particular, Benet Salellas, la magistrada actuante deberá decidir si archiva el caso o continúa el procedimiento con más diligencias.
Torroija, de 41 años, fue detenido el pasado 11 de julio por la Policía Municipal de Girona acusado de un robo y presumiblemente se ahorcó después en su celda.
La víctima vivió muchos años en Trelew y era hijo de Omar Torroija, un reconocido empresario local, dueño de la firma Torca.
Tras estudiar toda la documentación, la jueza de instrucción decidió archivar el caso, pero la acusación particular recurrió a la Audiencia y ésta ordenó reabrirlo al considerar que habrían desatendido “la guardia y custodia” del detenido.
Después que la sección tercera de la Audiencia de Girona ordenara reabrir este caso, la titular del Juzgado de Instrucción número 4 tomó declaración el pasado 21 de enero como testigos a la forense que realizó la autopsia, a los dos agentes que le detuvieron y que lo tenían bajo su custodia, y al cabo que estaba de jefe de turno.
La forense explicó que la víctima, que falleció tres días después de presumiblemente colgarse con su propia camisa en la puerta de la celda, murió por “ahorcamiento incompleto” y que esta situación es reversible si hay una actuación inmediata en unos minutos.
El abogado de la familia Torroija considera que hubo una “total dejadez” por parte de los agentes, informó el diario ABC.
El agente que tenía en custodia al ciudadano argentino domiciliado en Trelew Juan Pablo Torroija, que el pasado mes de julio presuntamente se “colgó” en una celda de la Policía Municipal de Girona, en Catalunya, España, y el cabo que estaba de jefe de turno la noche de los hechos, declararán a finales de mes ante al juez como imputados por un delito de “homicidio imprudente”, informó el diario español ABC.
Una vez que la titular del Juzgado de Instrucción número 4 les tome declaración como imputados, como solicitó el abogado de la acusación particular, Benet Salellas, la magistrada actuante deberá decidir si archiva el caso o continúa el procedimiento con más diligencias.
Torroija, de 41 años, fue detenido el pasado 11 de julio por la Policía Municipal de Girona acusado de un robo y presumiblemente se ahorcó después en su celda.
La víctima vivió muchos años en Trelew y era hijo de Omar Torroija, un reconocido empresario local, dueño de la firma Torca.
Tras estudiar toda la documentación, la jueza de instrucción decidió archivar el caso, pero la acusación particular recurrió a la Audiencia y ésta ordenó reabrirlo al considerar que habrían desatendido “la guardia y custodia” del detenido.
Después que la sección tercera de la Audiencia de Girona ordenara reabrir este caso, la titular del Juzgado de Instrucción número 4 tomó declaración el pasado 21 de enero como testigos a la forense que realizó la autopsia, a los dos agentes que le detuvieron y que lo tenían bajo su custodia, y al cabo que estaba de jefe de turno.
La forense explicó que la víctima, que falleció tres días después de presumiblemente colgarse con su propia camisa en la puerta de la celda, murió por “ahorcamiento incompleto” y que esta situación es reversible si hay una actuación inmediata en unos minutos.
El abogado de la familia Torroija considera que hubo una “total dejadez” por parte de los agentes, informó el diario ABC.