"El fuego prendido con la decisión de Jerusalén quemará la región y el mundo. No puede haber una paz regional y global si no se encuentra una solución a la cuestión de Palestina", sentenció Erdogan en la apertura de una cumbre de líderes de países musulmanes para debatir una respuesta común a esta crisis.
Erdogan hizo esta advertencia en la apertura de la cumbre extraordinaria de la Organización por la Cooperación Islámica (OCI) convocada en Estambul para buscar una respuesta conjunta a la decisión de Estados Unidos.
"No podemos quedarnos mirando una situación de la que depende nuestro futuro. Esta decisión es también un golpe a nuestra civilización", alertó.
Desde que el mandatario norteamericano Donald Trump anunció hace una semana que Washington trasladaría su embajada en Israel desde Tel Aviv a Jerusalén, reconociéndola como capital, Erdogan mantuvo un duro tono contra Estados Unidos, al que acusó de colaborar en un baño de sangre con esa decisión.
Además, hoy, el presidente turco acusó nuevamente a Israel de ser un Estado terrorista que maltrata a los palestinos y criticó que Washington "premie a un país como ese", citó la agencia de noticias EFE.
"Estados Unidos se mantiene al lado de quienes hacen imposible la paz, no de aquellos que la desean. De esta forma, animan a los extremistas", denunció el dirigente islamista.
Además, advirtió a Estados Unidos que pese a todo su poder militar, "sólo se es fuerte si se tiene la razón".
Contra la "opresión de los soldados israelíes"
Erdogan condenó la "opresión de los soldados israelíes" sobre Palestina y afirmó que "la obligación de los musulmanes es defender Jerusalén bajo todas las condiciones".
El jefe del Estado turco pidió el reconocimiento del Estado palestino.
"Los países europeos tienen que dejar de someterse a la retórica de Israel de no reconocer a Palestina" y advirtió de que, tras la decisión estadounidense, esa es la única manera de lograr la paz.
En su calidad de presidente de turno de la OCI, Erdogan reclamó a Estados Unidos que dé marcha atrás.
"Con esa decisión, Estados Unidos dejó de ser un pacificador", dijo Erdogan, quien pidió que el resto del mundo asuma ese rol.
"El fuego prendido con la decisión de Jerusalén quemará la región y el mundo. No puede haber una paz regional y global si no se encuentra una solución a la cuestión de Palestina", sentenció Erdogan en la apertura de una cumbre de líderes de países musulmanes para debatir una respuesta común a esta crisis.
Erdogan hizo esta advertencia en la apertura de la cumbre extraordinaria de la Organización por la Cooperación Islámica (OCI) convocada en Estambul para buscar una respuesta conjunta a la decisión de Estados Unidos.
"No podemos quedarnos mirando una situación de la que depende nuestro futuro. Esta decisión es también un golpe a nuestra civilización", alertó.
Desde que el mandatario norteamericano Donald Trump anunció hace una semana que Washington trasladaría su embajada en Israel desde Tel Aviv a Jerusalén, reconociéndola como capital, Erdogan mantuvo un duro tono contra Estados Unidos, al que acusó de colaborar en un baño de sangre con esa decisión.
Además, hoy, el presidente turco acusó nuevamente a Israel de ser un Estado terrorista que maltrata a los palestinos y criticó que Washington "premie a un país como ese", citó la agencia de noticias EFE.
"Estados Unidos se mantiene al lado de quienes hacen imposible la paz, no de aquellos que la desean. De esta forma, animan a los extremistas", denunció el dirigente islamista.
Además, advirtió a Estados Unidos que pese a todo su poder militar, "sólo se es fuerte si se tiene la razón".
Contra la "opresión de los soldados israelíes"
Erdogan condenó la "opresión de los soldados israelíes" sobre Palestina y afirmó que "la obligación de los musulmanes es defender Jerusalén bajo todas las condiciones".
El jefe del Estado turco pidió el reconocimiento del Estado palestino.
"Los países europeos tienen que dejar de someterse a la retórica de Israel de no reconocer a Palestina" y advirtió de que, tras la decisión estadounidense, esa es la única manera de lograr la paz.
En su calidad de presidente de turno de la OCI, Erdogan reclamó a Estados Unidos que dé marcha atrás.
"Con esa decisión, Estados Unidos dejó de ser un pacificador", dijo Erdogan, quien pidió que el resto del mundo asuma ese rol.