En dos de estos registros se escuchan las voces de los pilotos que observan los objetos, y que destacanlo rápido que se mueven.
Estas filmaciones habían sido difundidas por una compañía privada el año pasado, pero este lunesfueron oficialmente confirmadaspor elPentágono. Lo hicieron “para clarificar cualquier malentendido del público sobre si esas imágenes que estaban circulando son reales o si había o no más detalles en esos videos”, dijo la portavoz del Departamento de Defensa Sue Gough.
“Después de una cuidadosa investigación, el Pentágono determinó que la difusión autorizada de estos videos no clasificados no revela ninguna capacidad sensible” y “no afecta a ninguna investigación posterior de incursiones militares del espacio aéreo por fenómenos aéreos no identificados”.
Los videos habían sido revelados entre diciembre de 2017 y marzo de 2018 porThe Stars Academy of Arts & Sciences, una compañía fundada por el ex músico TomDeLonge, que se dedica a estudiar este tipo de fenómenos.
David Fravor, uno de los pilotos que había registrado este objeto en 2017, dijo a la CNN que “mientras nos acercábamos, se movía aceleradamente hacia el sur, luego desapareció en menos de dos segundos”. Agregó que “fue extremadamente abrupto, como una pelota de ping pong, rebotando en una pared”.
El Pentágono se había dedicado a explorar este tipo de fenómenos en un programa clasificado que comenzó en 2007, pero que fue finalizado en 2012 porque destinaron los fondos a otras áreas. Luis Elizondo, el ex director de ese programa, dijo a la CNN en 2017 que“hay evidencias convincentes de que quizás no estemos solos”.
“Esas aeronaves –nosotros lo llamaremos aeronaves—tienen características que no se registran en ningún inventario deEstados Unidosni enningún otro inventario del mundo, que nosotros sepamos”, agregó el experto, que renunció en protesta por el retiro de fondos de su programa.
Lo que sucede en los videos
EnGimbal,el primer registro, se escucha a uno de los tripulantes decir “¡Mi dios! Están todos volando contra el viento. Mira esa cosa, está rotando”, sobre el objeto que se avistó en 2015.
En el segundo, llamadoGo Fast, también de 2015, se aprecia un objeto que vuela por sobre el agua, donde se escucha al equipo decir“¡Woah, lo tengo! ¿Qué demonios es eso? ¡Míralo volar!”.
Y en el último, tituladoFLIR1, se observa un objeto ovalado que acelera y se aleja de la vista de los sensores.
En 2019, la armada norteamericana reconoció que las grabaciones son reales y que aún se mantienen clasificados como casos “no identificados” por el Pentágono.
En dos de estos registros se escuchan las voces de los pilotos que observan los objetos, y que destacanlo rápido que se mueven.
Estas filmaciones habían sido difundidas por una compañía privada el año pasado, pero este lunesfueron oficialmente confirmadaspor elPentágono. Lo hicieron “para clarificar cualquier malentendido del público sobre si esas imágenes que estaban circulando son reales o si había o no más detalles en esos videos”, dijo la portavoz del Departamento de Defensa Sue Gough.
“Después de una cuidadosa investigación, el Pentágono determinó que la difusión autorizada de estos videos no clasificados no revela ninguna capacidad sensible” y “no afecta a ninguna investigación posterior de incursiones militares del espacio aéreo por fenómenos aéreos no identificados”.
Los videos habían sido revelados entre diciembre de 2017 y marzo de 2018 porThe Stars Academy of Arts & Sciences, una compañía fundada por el ex músico TomDeLonge, que se dedica a estudiar este tipo de fenómenos.
David Fravor, uno de los pilotos que había registrado este objeto en 2017, dijo a la CNN que “mientras nos acercábamos, se movía aceleradamente hacia el sur, luego desapareció en menos de dos segundos”. Agregó que “fue extremadamente abrupto, como una pelota de ping pong, rebotando en una pared”.
El Pentágono se había dedicado a explorar este tipo de fenómenos en un programa clasificado que comenzó en 2007, pero que fue finalizado en 2012 porque destinaron los fondos a otras áreas. Luis Elizondo, el ex director de ese programa, dijo a la CNN en 2017 que“hay evidencias convincentes de que quizás no estemos solos”.
“Esas aeronaves –nosotros lo llamaremos aeronaves—tienen características que no se registran en ningún inventario deEstados Unidosni enningún otro inventario del mundo, que nosotros sepamos”, agregó el experto, que renunció en protesta por el retiro de fondos de su programa.
Lo que sucede en los videos
EnGimbal,el primer registro, se escucha a uno de los tripulantes decir “¡Mi dios! Están todos volando contra el viento. Mira esa cosa, está rotando”, sobre el objeto que se avistó en 2015.
En el segundo, llamadoGo Fast, también de 2015, se aprecia un objeto que vuela por sobre el agua, donde se escucha al equipo decir“¡Woah, lo tengo! ¿Qué demonios es eso? ¡Míralo volar!”.
Y en el último, tituladoFLIR1, se observa un objeto ovalado que acelera y se aleja de la vista de los sensores.
En 2019, la armada norteamericana reconoció que las grabaciones son reales y que aún se mantienen clasificados como casos “no identificados” por el Pentágono.