Según el diario cruceño El Deber, la hermana del exmandatario estuvo internada días antes en el área de preterapia del hospital General San Juan de Dios con pronóstico reservado como consecuencia del coronavirus agravado por una enfermedad de base.
El 9 de agosto, fue admitida en la sala de Medicina Covid-19, luego de que sus familiares hicieran todos los esfuerzos para conseguir una cama en terapia intensiva, informó el diario local La Patria.
Finalmente, el estado de salud de quien fuera considerada la primera dama de Bolivia durante la gestión de Evo Morales se complicó y falleció a los 70 años.
"Por qué tanto odio, racismo y persecución política que me impiden ver, por última vez, a mi única hermana; para mí, Esther, fue mi madre; la historia juzgará", tuiteó el expresidente, refugiado en la Argentina.
"Mi sentimiento de solidaridad para su familia; la salud, la vida o la tristeza de la partida, son cosas que están más allá de la política", afirmó más tarde la presidenta de facto, Jeanine Áñez, también a través de Twitter.
Con 99.146 casos y 4.003 decesos -según el último balance oficial, divulgado anoche-, Bolivia tiene 337 muertos por millón de habitantes, una de las cifras más elevadas.
El sistema sanitario se encuentra al borde de la saturación en todo el país y ya hay faltantes de medicamentos y unidades de terapia intensiva (UTI) o intermedia, oxígeno y equipos de bioseguridad, además de la necesidad de mejorar las condiciones de trabajo para los profesionales de la salud.
La emergencia sanitaria ocurre además en medio de una crisis política y social atizada por las sucesivas postergaciones de los comicios presidenciales, que pasaron de mayo a septiembre y ahora finalmente tiene como fecha máxima por ley el 18 de octubre.
Según el diario cruceño El Deber, la hermana del exmandatario estuvo internada días antes en el área de preterapia del hospital General San Juan de Dios con pronóstico reservado como consecuencia del coronavirus agravado por una enfermedad de base.
El 9 de agosto, fue admitida en la sala de Medicina Covid-19, luego de que sus familiares hicieran todos los esfuerzos para conseguir una cama en terapia intensiva, informó el diario local La Patria.
Finalmente, el estado de salud de quien fuera considerada la primera dama de Bolivia durante la gestión de Evo Morales se complicó y falleció a los 70 años.
"Por qué tanto odio, racismo y persecución política que me impiden ver, por última vez, a mi única hermana; para mí, Esther, fue mi madre; la historia juzgará", tuiteó el expresidente, refugiado en la Argentina.
"Mi sentimiento de solidaridad para su familia; la salud, la vida o la tristeza de la partida, son cosas que están más allá de la política", afirmó más tarde la presidenta de facto, Jeanine Áñez, también a través de Twitter.
Con 99.146 casos y 4.003 decesos -según el último balance oficial, divulgado anoche-, Bolivia tiene 337 muertos por millón de habitantes, una de las cifras más elevadas.
El sistema sanitario se encuentra al borde de la saturación en todo el país y ya hay faltantes de medicamentos y unidades de terapia intensiva (UTI) o intermedia, oxígeno y equipos de bioseguridad, además de la necesidad de mejorar las condiciones de trabajo para los profesionales de la salud.
La emergencia sanitaria ocurre además en medio de una crisis política y social atizada por las sucesivas postergaciones de los comicios presidenciales, que pasaron de mayo a septiembre y ahora finalmente tiene como fecha máxima por ley el 18 de octubre.