Una mujer se encadenó para reclamar por su casa
Irene González, de 70 años, se encadenó en la puerta de su casa pidiendo que sus ocupantes se la devuelvan.
En diálogo con Jornada relató que hace dos años se instaló una familia en el inmueble de barrio Covitre, cuando ella se trasladó a Bariloche, con recomendación de un vecino a su hermano que cuidaba la vivienda, avalando que la gente que ingresaría era buena.
Relato
González contó que a su hermano le hicieron firmar recibos de pago de alquiler sin su autorización, por lo que cuando arribó a Esquel emplazó en dos meses a la familia para que abandone la casa, y cumplido el tiempo estipulado la respuesta fue que no encuentran alquiler en ningún lado, proponiéndole que viviera con ellos.
No aceptó compartir la vivienda y la mujer que habita le dijo que no tiene más nada que reclamar y que en última instancia se dirija a hablar con su abogado. Los familiares de González fueron a hablar con los ocupantes y el letrado, pero insisten en que se retire o busquen un arreglo, pagando ella los honorarios del profesional.
Vigilancia
En medio del reclamo, un nieto de la mujer fue detenido junto a otro hombre por haber puesto cadenas en el portón de acceso a la vivienda, por considerar la Justicia que se estaba ante una situación de prohibición de la libertad a personas. Hasta ayer González permanecía encadenada. Fiscalía tomó intervención para abrir una investigación del caso, y se dispuso la presencia policial en el lugar.
González aseguró tener la documentación que la acredita como dueña de la casa.
En diálogo con Jornada relató que hace dos años se instaló una familia en el inmueble de barrio Covitre, cuando ella se trasladó a Bariloche, con recomendación de un vecino a su hermano que cuidaba la vivienda, avalando que la gente que ingresaría era buena.
Relato
González contó que a su hermano le hicieron firmar recibos de pago de alquiler sin su autorización, por lo que cuando arribó a Esquel emplazó en dos meses a la familia para que abandone la casa, y cumplido el tiempo estipulado la respuesta fue que no encuentran alquiler en ningún lado, proponiéndole que viviera con ellos.
No aceptó compartir la vivienda y la mujer que habita le dijo que no tiene más nada que reclamar y que en última instancia se dirija a hablar con su abogado. Los familiares de González fueron a hablar con los ocupantes y el letrado, pero insisten en que se retire o busquen un arreglo, pagando ella los honorarios del profesional.
Vigilancia
En medio del reclamo, un nieto de la mujer fue detenido junto a otro hombre por haber puesto cadenas en el portón de acceso a la vivienda, por considerar la Justicia que se estaba ante una situación de prohibición de la libertad a personas. Hasta ayer González permanecía encadenada. Fiscalía tomó intervención para abrir una investigación del caso, y se dispuso la presencia policial en el lugar.
González aseguró tener la documentación que la acredita como dueña de la casa.