Indignación por la matanza de ovejas en el Valle a causa de perros sueltos
Productores denunciaron que perros ingresaron a su establecimiento en dos oportunidades desde el domingo. Mataron varias ovejas y un carnero reproductor de gran valor. Los afectados discuten si conviene matar a los canes sueltos.
Una familia de productores de la zona de Drofa Dulog se acercó ayer a la redacción de Jornada para denunciar cuantiosas pérdidas en su establecimiento productivo, a raíz del ingreso de perros que durante la última semana mataron alrededor de 20 animales, entre ellos un reproductor ovino de gran valor.
Indignación
Los hijos del dueño de la chacra 107 contaron que el último fin de semana algunos perros ingresaron a la propiedad y mataron entre 4 y 5 ovejas, además de lastimar a otros lanares que se encontraban en el lugar.
Ante la reiteración de episodios de este tipo y sabiendo que al acercarse la temporada invernal se hace más frecuente este tipo de ataques, los productores decidieron encerrar los animales en un corral. Pero este miércoles a la mañana, al llegar al lugar se encontraron con que los perros habían atacado a las ovejas encerradas produciendo un grave perjuicio, ya que no sólo la matanza sería de alrededor de 15 animales sino que mataron a uno de los dos carneros que sirve de reproductor e hirieron a otro.
Los jóvenes aseguraron que si bien han denunciado en varias oportunidades este tipo de hechos, no encuentran eco de parte de las autoridades y se preguntan “quién va a pagar este desastre, no es solo la muerte de las ovejas, también los perros mataron a un carnero de gran valor y nos dejan sin la producción del próximo año, ya que estamos justo en época de iniciar tareas reproductivas para sacar animales para la próximo temporada”.
Señalaron que no hay controles y que es normal ver familias que se asientan en el sector rural con tres, cuatro y hasta seis perros. “Los dejan sueltos y esos perros andan después haciendo daño. Son perros con dueño, pero en la mayoría de los casos sin patentar ni vacunar”.
Una de las afectadas señaló que “las autoridades tienen que definir si quieren un Valle productivo o no. No se puede hacer producción si después está lleno de perros haciendo daño, y además hay una cuestión de sanidad, porque esos mismos animales cruzan por las chacras donde hay plantaciones de verduras”.
Bala sí, bala no
En el ámbito rural, se mantiene la discusión si es conveniente o no salir en grupos armados a matar perros vagabundos que ponen en riesgo la producción ganadera.
Algunos afirman que es riesgoso en virtud de la seguridad física de otros humanos. Pero también se mantiene el viejo dicho: “Muerto el perro se acabó la rabia”. Esto también involucra a los dueños irresponsables.
Una familia de productores de la zona de Drofa Dulog se acercó ayer a la redacción de Jornada para denunciar cuantiosas pérdidas en su establecimiento productivo, a raíz del ingreso de perros que durante la última semana mataron alrededor de 20 animales, entre ellos un reproductor ovino de gran valor.
Indignación
Los hijos del dueño de la chacra 107 contaron que el último fin de semana algunos perros ingresaron a la propiedad y mataron entre 4 y 5 ovejas, además de lastimar a otros lanares que se encontraban en el lugar.
Ante la reiteración de episodios de este tipo y sabiendo que al acercarse la temporada invernal se hace más frecuente este tipo de ataques, los productores decidieron encerrar los animales en un corral. Pero este miércoles a la mañana, al llegar al lugar se encontraron con que los perros habían atacado a las ovejas encerradas produciendo un grave perjuicio, ya que no sólo la matanza sería de alrededor de 15 animales sino que mataron a uno de los dos carneros que sirve de reproductor e hirieron a otro.
Los jóvenes aseguraron que si bien han denunciado en varias oportunidades este tipo de hechos, no encuentran eco de parte de las autoridades y se preguntan “quién va a pagar este desastre, no es solo la muerte de las ovejas, también los perros mataron a un carnero de gran valor y nos dejan sin la producción del próximo año, ya que estamos justo en época de iniciar tareas reproductivas para sacar animales para la próximo temporada”.
Señalaron que no hay controles y que es normal ver familias que se asientan en el sector rural con tres, cuatro y hasta seis perros. “Los dejan sueltos y esos perros andan después haciendo daño. Son perros con dueño, pero en la mayoría de los casos sin patentar ni vacunar”.
Una de las afectadas señaló que “las autoridades tienen que definir si quieren un Valle productivo o no. No se puede hacer producción si después está lleno de perros haciendo daño, y además hay una cuestión de sanidad, porque esos mismos animales cruzan por las chacras donde hay plantaciones de verduras”.
Bala sí, bala no
En el ámbito rural, se mantiene la discusión si es conveniente o no salir en grupos armados a matar perros vagabundos que ponen en riesgo la producción ganadera.
Algunos afirman que es riesgoso en virtud de la seguridad física de otros humanos. Pero también se mantiene el viejo dicho: “Muerto el perro se acabó la rabia”. Esto también involucra a los dueños irresponsables.