La obra protagonizada por Miguel Ángel Solá y Paula Cancio, fue estrenada en Buenos Aires en 1995 y se mantuvo en cartel hasta fines de 1999, incluidas dos giras nacionales y tres temporadas marplatenses. En España estuvo cuatro años y medio en cartel. Y este año recorre el país, siendo la oportunidad del público madrynense de ver la obra, este jueves 09 de junio desde las 21.30 horas en el Cine Teatro Auditorium.
Miguel Ángel Solá, destacó el éxito de esta nueva puesta en escena de “El Diario de Adán y Eva”, y en diálogo con FM Tiempo, afirmó que “hemos tenido la suerte de llevarla por muchos lugares del mundo, y ha sido una muy buena representante del Teatro Argentino”, dijo al remarcar que la obra ha sido presentada en diversos escenarios con más de 3.600 funciones.
La historia gira en torno a la emisión despedida de un ciclo radiofónico de los años 50, adaptado e interpretado por una intelectual española (Eloísa), y un versátil actor uruguayo (Dalmacio). El amor atraviesa de manera visceral a los protagonistas de la obra, la pareja que conforman Solá y Cancio.
“No es una obra que se pueda contar, hay que vivirla. La gente ríe y llora al mismo tiempo, siempre está con una sonrisa en la cara, y llora de emoción. Es muy raro encontrarse con textos que puedan ser compartidos por diferentes generaciones, porque es una obra de teatro que va de los 14 a los 95 años”, sostiene el actor, al asegurar que el espectador sigue ligado a la obra aún cuando sale de la sala, porque en su opinión no se trata de un espectáculo pasatista, sino que te atraviesa y logra que “la gente se reconcilie consigo misma”.
Encantado
Solá asegura que es imposible cansarse de hacer esta obra, como de beber agua, respirar o amar, y expresa que “el encanto de esta obra reside en que es muy buen teatro, muy bien actuado y van a conocer una actriz extraordinaria. Es un teatro que reivindica la condición de la mujer inteligente, capaz, que se abre paso en un mundo muy difícil, que es noticia cuando la matan en general, y no suele ser noticia cuando tiene capacidad y coraje, que son los que tienen los personajes que interpreta Paula en esta obra”.
“Entras en otro mundo, transcurre una hora y media y parece que hubiesen pasado veinte minutos de tu vida nada más, el espectáculo es bello, inteligente, gracioso, emocional, que te invita a sentir, que es una caricia al corazón, y no querés que termine, para el actor y para quien está en la platea, llega el final, y nos agarra una especie de congoja, y eso es lo que pasa en la obra”, afirma Solá acerca de su relación con el personaje y la obra.
La obra protagonizada por Miguel Ángel Solá y Paula Cancio, fue estrenada en Buenos Aires en 1995 y se mantuvo en cartel hasta fines de 1999, incluidas dos giras nacionales y tres temporadas marplatenses. En España estuvo cuatro años y medio en cartel. Y este año recorre el país, siendo la oportunidad del público madrynense de ver la obra, este jueves 09 de junio desde las 21.30 horas en el Cine Teatro Auditorium.
Miguel Ángel Solá, destacó el éxito de esta nueva puesta en escena de “El Diario de Adán y Eva”, y en diálogo con FM Tiempo, afirmó que “hemos tenido la suerte de llevarla por muchos lugares del mundo, y ha sido una muy buena representante del Teatro Argentino”, dijo al remarcar que la obra ha sido presentada en diversos escenarios con más de 3.600 funciones.
La historia gira en torno a la emisión despedida de un ciclo radiofónico de los años 50, adaptado e interpretado por una intelectual española (Eloísa), y un versátil actor uruguayo (Dalmacio). El amor atraviesa de manera visceral a los protagonistas de la obra, la pareja que conforman Solá y Cancio.
“No es una obra que se pueda contar, hay que vivirla. La gente ríe y llora al mismo tiempo, siempre está con una sonrisa en la cara, y llora de emoción. Es muy raro encontrarse con textos que puedan ser compartidos por diferentes generaciones, porque es una obra de teatro que va de los 14 a los 95 años”, sostiene el actor, al asegurar que el espectador sigue ligado a la obra aún cuando sale de la sala, porque en su opinión no se trata de un espectáculo pasatista, sino que te atraviesa y logra que “la gente se reconcilie consigo misma”.
Encantado
Solá asegura que es imposible cansarse de hacer esta obra, como de beber agua, respirar o amar, y expresa que “el encanto de esta obra reside en que es muy buen teatro, muy bien actuado y van a conocer una actriz extraordinaria. Es un teatro que reivindica la condición de la mujer inteligente, capaz, que se abre paso en un mundo muy difícil, que es noticia cuando la matan en general, y no suele ser noticia cuando tiene capacidad y coraje, que son los que tienen los personajes que interpreta Paula en esta obra”.
“Entras en otro mundo, transcurre una hora y media y parece que hubiesen pasado veinte minutos de tu vida nada más, el espectáculo es bello, inteligente, gracioso, emocional, que te invita a sentir, que es una caricia al corazón, y no querés que termine, para el actor y para quien está en la platea, llega el final, y nos agarra una especie de congoja, y eso es lo que pasa en la obra”, afirma Solá acerca de su relación con el personaje y la obra.