Lana: un producto escaso y cada vez más refinado

Es una de las fibras menos consumidas en el mundo, aunque muy requerida en sectores económicos de alto poder adquisitivo. Su demanda a futuro dependerá en gran parte de las buenas prácticas ambientales y laborales. El desafío es apuntar a las exigencias de los mercados emergentes.

Diferenciación. La lana se ha transformado en un producto premium
21 AGO 2017 - 20:27 | Actualizado

Un informe difundido por el INTA sobre el escenario actual del consumo de fibra de lana a nivel mundial indica que si bien “en la actualidad sólo ocupa el 1,2% en el conjunto de todas las fibras textiles en uso”, la producción bajó “y no ha podido siquiera sostener y acompañar la demanda vinculada al crecimiento vegetativo de los sectores de alto poder adquisitivo de los países desarrollados, quienes representan a la casi totalidad de la demanda”.
De acuerdo a ese informe, “al inicio del siglo pasado en el uso textil sólo existían las fibras naturales, algodón y lana, que se repartían la participación en 80% y 20% respectivamente. Luego fueron surgiendo fibras artificiales de polímeros naturales como el rayón y acetato entre otras y en la década del 70 comenzó a imponerse una fuerte sustitución de fibras naturales por sintéticas, derivadas del petróleo y estas tendencia se mantuvo hasta el presente donde las fibras naturales solo representan menos del 35% del total siendo la participación de la lana dentro de ellas sumamente escasa”.
Se defiende

Hoy la fibra de lana se defiende ocupando un espacio cada vez menos representativo, y ha pasado de ser un “comodity” a un “especiality”, es decir una  fibra usada en prendas de vestir de alto valor comercial.
Las lanas con diámetros medios están compitiendo fuertemente con fibras de menor valor en el textil de interiores y revestimientos y las más gruesas ocupando un nicho de mercado conquistado y seguro como es la fabricación de alfombras de pura lana virgen que tienen claras ventajas cualitativas frente a sus competidoras.
A nivel global, la producción mundial de lana tuvo un leve incremento en la última zafra y la perspectivas a corto plazo es mantenerse en esos valores.
Argentina se coloca en el tercer lugar como proveedor de lanas para indumentaria, por su producción de lanas finas, más del 60% de lana merino, considerado una ventaja competitiva frente a otros países productores.
La Patagonia en particular tiene otras ventajas asociadas como el estatus sanitario de sus majadas, la cría en ambientes naturales, la pureza racial de sus majadas, su cultura y experiencia en la producción ovina y su adaptación productiva a nuevas demandas de los consumidores de productos con lana, tales como: la lana orgánica, sustentabilidad medio ambiental y el bienestar animal.  Sin embargo nuestro consumo, existencias y exportaciones no han tenido un incremento importante en las últimas zafras.
Los destinos finales más importantes de las exportaciones fueron el 25,3 % China, 23,3% Alemania, 8,7% Italia, República Checa 7,8% con un composición de: 34,7% en estado sucio, 5,5% de lana lavada, 52,5% de lanas peinadas y 7,3% de subproductos.
Chubut, sobre todas

Chubut es la provincia con mayor producción de fibra de lana, totalizando un 34% del total país. El impacto de la producción de lana en la economía regional de la Patagonia en muy fuerte, más del 60% de la lana que se produce localmente es patagónica, es la de mayor valor y calidad del mercado y además en Trelew, se ha establecido el parque industrial lanero con posibilidad de procesar el 100% de la lana argentina. En magnitud es unos de los clúster de empresas del rubro más importantes del mundo fuera de China.
La cadena de la lana tiene una importancia muy significativa en la matriz económica y productiva regional de la Patagonia, motoriza a la gran mayoría de los pueblos del interior y sostiene un número importante de empleos directos e indirectos.
El informe indica que “los consumidores de productos de lana en el mundo son sectores de alto poder adquisitivo a nivel mundial (sector ABC1) de los países centrales o desarrollados. Sociedades también identificadas culturalmente con la lana y productos de lana, como Alemania, Inglaterra, Italia, Francia y China entre otras”.
Diferenciación

“Son consumidores que buscan y mantienen su diferenciación social a través del consumo de artículos de lujo. Es una demanda potencial muy alta sustentada por el crecimiento económico de sus países, como lo es China y que a la vez se potencia por  escasez de la oferta”.
También sostiene que “los gustos y preferencias de estos consumidores más allá de asegurarse una prenda de vestir con máxima calidad de confección y diseño, demandan también nuevos atributos que no dependen solo de la calidad intrínseca de la fibra o de la confección sino que, son atributos sensoriales tales como: Lanas producidas con cuidado con el medio ambiente (Salud ambiental); Lanas producidas con cuidado y bienestar animal (Lana Orgánica, Salud animal); Lanas producidas con comercio y condiciones laborales justas. (Responsabilidad Social Empresaria)”
Desafíos

Según los técnicos del INTA  el escenario actual es un espacio de desafío y oportunidad para la producción lanera. “El desafío es poder diseñar y asegurar hacia el mediano plazo una política sectorial e integral permanente, con una producción que incluya estos nuevos atributos requeridos por el consumidor final, promoviendo el agregado de valor doméstico con el aprovechamiento de todos los productos secundarios, analizando y mejorando los costos asociados a la logística,  promoviendo e impulsando el desarrollo de prácticas comerciales asociativas y explorando nuevos nichos de mercados y consolidando la provisión y satisfacción hacia las  demandas de mercados emergentes”.#

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Diferenciación. La lana se ha transformado en un producto premium
21 AGO 2017 - 20:27

Un informe difundido por el INTA sobre el escenario actual del consumo de fibra de lana a nivel mundial indica que si bien “en la actualidad sólo ocupa el 1,2% en el conjunto de todas las fibras textiles en uso”, la producción bajó “y no ha podido siquiera sostener y acompañar la demanda vinculada al crecimiento vegetativo de los sectores de alto poder adquisitivo de los países desarrollados, quienes representan a la casi totalidad de la demanda”.
De acuerdo a ese informe, “al inicio del siglo pasado en el uso textil sólo existían las fibras naturales, algodón y lana, que se repartían la participación en 80% y 20% respectivamente. Luego fueron surgiendo fibras artificiales de polímeros naturales como el rayón y acetato entre otras y en la década del 70 comenzó a imponerse una fuerte sustitución de fibras naturales por sintéticas, derivadas del petróleo y estas tendencia se mantuvo hasta el presente donde las fibras naturales solo representan menos del 35% del total siendo la participación de la lana dentro de ellas sumamente escasa”.
Se defiende

Hoy la fibra de lana se defiende ocupando un espacio cada vez menos representativo, y ha pasado de ser un “comodity” a un “especiality”, es decir una  fibra usada en prendas de vestir de alto valor comercial.
Las lanas con diámetros medios están compitiendo fuertemente con fibras de menor valor en el textil de interiores y revestimientos y las más gruesas ocupando un nicho de mercado conquistado y seguro como es la fabricación de alfombras de pura lana virgen que tienen claras ventajas cualitativas frente a sus competidoras.
A nivel global, la producción mundial de lana tuvo un leve incremento en la última zafra y la perspectivas a corto plazo es mantenerse en esos valores.
Argentina se coloca en el tercer lugar como proveedor de lanas para indumentaria, por su producción de lanas finas, más del 60% de lana merino, considerado una ventaja competitiva frente a otros países productores.
La Patagonia en particular tiene otras ventajas asociadas como el estatus sanitario de sus majadas, la cría en ambientes naturales, la pureza racial de sus majadas, su cultura y experiencia en la producción ovina y su adaptación productiva a nuevas demandas de los consumidores de productos con lana, tales como: la lana orgánica, sustentabilidad medio ambiental y el bienestar animal.  Sin embargo nuestro consumo, existencias y exportaciones no han tenido un incremento importante en las últimas zafras.
Los destinos finales más importantes de las exportaciones fueron el 25,3 % China, 23,3% Alemania, 8,7% Italia, República Checa 7,8% con un composición de: 34,7% en estado sucio, 5,5% de lana lavada, 52,5% de lanas peinadas y 7,3% de subproductos.
Chubut, sobre todas

Chubut es la provincia con mayor producción de fibra de lana, totalizando un 34% del total país. El impacto de la producción de lana en la economía regional de la Patagonia en muy fuerte, más del 60% de la lana que se produce localmente es patagónica, es la de mayor valor y calidad del mercado y además en Trelew, se ha establecido el parque industrial lanero con posibilidad de procesar el 100% de la lana argentina. En magnitud es unos de los clúster de empresas del rubro más importantes del mundo fuera de China.
La cadena de la lana tiene una importancia muy significativa en la matriz económica y productiva regional de la Patagonia, motoriza a la gran mayoría de los pueblos del interior y sostiene un número importante de empleos directos e indirectos.
El informe indica que “los consumidores de productos de lana en el mundo son sectores de alto poder adquisitivo a nivel mundial (sector ABC1) de los países centrales o desarrollados. Sociedades también identificadas culturalmente con la lana y productos de lana, como Alemania, Inglaterra, Italia, Francia y China entre otras”.
Diferenciación

“Son consumidores que buscan y mantienen su diferenciación social a través del consumo de artículos de lujo. Es una demanda potencial muy alta sustentada por el crecimiento económico de sus países, como lo es China y que a la vez se potencia por  escasez de la oferta”.
También sostiene que “los gustos y preferencias de estos consumidores más allá de asegurarse una prenda de vestir con máxima calidad de confección y diseño, demandan también nuevos atributos que no dependen solo de la calidad intrínseca de la fibra o de la confección sino que, son atributos sensoriales tales como: Lanas producidas con cuidado con el medio ambiente (Salud ambiental); Lanas producidas con cuidado y bienestar animal (Lana Orgánica, Salud animal); Lanas producidas con comercio y condiciones laborales justas. (Responsabilidad Social Empresaria)”
Desafíos

Según los técnicos del INTA  el escenario actual es un espacio de desafío y oportunidad para la producción lanera. “El desafío es poder diseñar y asegurar hacia el mediano plazo una política sectorial e integral permanente, con una producción que incluya estos nuevos atributos requeridos por el consumidor final, promoviendo el agregado de valor doméstico con el aprovechamiento de todos los productos secundarios, analizando y mejorando los costos asociados a la logística,  promoviendo e impulsando el desarrollo de prácticas comerciales asociativas y explorando nuevos nichos de mercados y consolidando la provisión y satisfacción hacia las  demandas de mercados emergentes”.#


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