A Nahuelmilla le tiraron agua helada, le pegaron con una pala y filmaron 4 horas de torturas

Es el caso que conmueve a Comodoro y terminó con la muerte de un joven de 17 años. Los cuatro hermanos Ibáñez estarán cuatro meses en prisión preventiva. “Nunca vi algo así”, se impresionó el juez.

18 ABR 2018 - 21:43 | Actualizado

El juez Alejandro Soñis les dictó cuatro meses de prisión preventiva, a los cuatro hermanos Ibañez, Marcelo (35), Ángel (33), Sebastián (26) y Kevin (19) en averiguación del homicidio del adolescente Alan Nahuelmilla de 17 años y la brutal agresión a otro joven identificado con las iniciales J.G., días atrás en Comodoro Rivadavia.

La medida, en consonancia con lo solicitado por la fiscal Camila Banfi, fue fundamentada en el latente peligro de entorpecimiento de la investigación y el peligro de fuga. El juez estableció igual plazo para concluir la investigación. Para la próxima semana se espera poder concretar la rueda de reconocimiento.

Ante la petición de la fiscal, el juez Soñis expresó como agravante la privación ilegal de la libertad que perpetraron los cuatro hombres contra las víctimas, menores de edad. “Sometieron a las víctimas por un actuar violento, despiadado y salvaje si se quiere, con una violencia inusitada que nunca antes vi durante los siete años que trabajo en esta jurisdicción, sometieron vivos a los jóvenes a toda clase de tormentos y lesiones, produciendo lesiones graves y la muerte de un menor de edad”, expresó.

Detalles

Por su parte, la fiscal Banfi detalló que “siendo las 23 horas del sábado 14 de abril de este año, los hermanos Marcelo, Sebastián, Kevin y Ángel Ibáñez, junto a una quinta persona aún no identificada, interceptaron en la calle Los Duraznos de la zona de Quintas del barrio Máximo Abásolo a los jóvenes Alan Nahuelmilla y J.G de 19 años, con el fin de obligarlos a entregar un televisor que presuntamente le habrían sustraído a Marcelo Ibáñez”.

Explicó que Marcelo Ibáñez llevaba un arma de fuego calibre 45, y se bajó de un vehículo Chevrolet S10 blanco, mientras que Sebastián, Kevin y Ángel hicieron lo propio de un vehículo cinco puertas de color oscuro, todos armados y procedieron a emboscar a las víctimas para luego de maniatarlas y atarlas con una soga, arrastrarlos con la camioneta trasladándolos hasta el patio de la casa de Marcelo Ibáñez en la calle Los Duraznos del mismo barrio.

Castigos físicos

Una vez en el lugar los sometieron a diversas clases de castigos físicos “golpes, patadas en diversas partes del cuerpo, golpes en la cabeza con una pala, provocándoles cortes, los desnudaron y les tiraron agua fría con bidones de 20 litros, a J.G le cortaron la oreja en reiteradas oportunidades con un alicate. Les pusieron sogas al cuello para ahorcarlos, tiraban tiros al aire, y a su vez los amenazan con matarlos si no decían dónde estaba el televisor”.

A su vez Marcelo Ibáñez llamaba telefónicamente pidiendo más municiones con el fin de poder darles muerte a los jóvenes, mientras filmaron toda la agresión, “todo eso en un lapso de 4 horas”, describió.

Banfi dijo que “luego de ese tiempo, siendo cerca de las 3 del 15 de abril, los imputados se retiraron del lugar junto a Alan, a quien por los restos hemáticos hallados en el lugar, lo trasladaron hasta los predios ubicados en Los Duraznos y Miroglio donde viven Sebastián, Kevin y Ángel para luego arrastrarlo en un vehículo por tres cuadras hasta el domicilio de sus tíos y allí lo abandonaron”.

Al regresar al lugar, los imputados que aún mantenían cautivo a J.G, continuaron con los golpes, hasta que aproximadamente a las 8 lo entregaron, previo a intimidarlo para que no denuncie, realizando disparos al aire. Así J.G. escapó hasta su domicilio donde fue trasladado al Hospital regional para curar sus heridas, siendo estas de carácter grave.

Por su parte, los familiares de Nahuelmilla, lo encontraron en la calle cercana, lo trasladaron al Hospital donde ingresó con riesgo vital falleciendo a las 17.30 por traumatismo grave de cráneo y hemorragia cerebral a causa de los golpes recibidos.

Cabe consignar que el Ministerio Público Fiscal calificó provisoriamente la privación ilegítima de la libertad agravada por haber sido cometida contra un menor, por las lesiones graves causadas a una de las víctimas por la pluralidad de partícipes y por la muerte de una de las víctimas, todos ellos en carácter de coautor.

Enterate de las noticias de POLICIALES a través de nuestro newsletter

Anotate para recibir las noticias más importantes de esta sección.

Te podés dar de baja en cualquier momento con un solo clic.
18 ABR 2018 - 21:43

El juez Alejandro Soñis les dictó cuatro meses de prisión preventiva, a los cuatro hermanos Ibañez, Marcelo (35), Ángel (33), Sebastián (26) y Kevin (19) en averiguación del homicidio del adolescente Alan Nahuelmilla de 17 años y la brutal agresión a otro joven identificado con las iniciales J.G., días atrás en Comodoro Rivadavia.

La medida, en consonancia con lo solicitado por la fiscal Camila Banfi, fue fundamentada en el latente peligro de entorpecimiento de la investigación y el peligro de fuga. El juez estableció igual plazo para concluir la investigación. Para la próxima semana se espera poder concretar la rueda de reconocimiento.

Ante la petición de la fiscal, el juez Soñis expresó como agravante la privación ilegal de la libertad que perpetraron los cuatro hombres contra las víctimas, menores de edad. “Sometieron a las víctimas por un actuar violento, despiadado y salvaje si se quiere, con una violencia inusitada que nunca antes vi durante los siete años que trabajo en esta jurisdicción, sometieron vivos a los jóvenes a toda clase de tormentos y lesiones, produciendo lesiones graves y la muerte de un menor de edad”, expresó.

Detalles

Por su parte, la fiscal Banfi detalló que “siendo las 23 horas del sábado 14 de abril de este año, los hermanos Marcelo, Sebastián, Kevin y Ángel Ibáñez, junto a una quinta persona aún no identificada, interceptaron en la calle Los Duraznos de la zona de Quintas del barrio Máximo Abásolo a los jóvenes Alan Nahuelmilla y J.G de 19 años, con el fin de obligarlos a entregar un televisor que presuntamente le habrían sustraído a Marcelo Ibáñez”.

Explicó que Marcelo Ibáñez llevaba un arma de fuego calibre 45, y se bajó de un vehículo Chevrolet S10 blanco, mientras que Sebastián, Kevin y Ángel hicieron lo propio de un vehículo cinco puertas de color oscuro, todos armados y procedieron a emboscar a las víctimas para luego de maniatarlas y atarlas con una soga, arrastrarlos con la camioneta trasladándolos hasta el patio de la casa de Marcelo Ibáñez en la calle Los Duraznos del mismo barrio.

Castigos físicos

Una vez en el lugar los sometieron a diversas clases de castigos físicos “golpes, patadas en diversas partes del cuerpo, golpes en la cabeza con una pala, provocándoles cortes, los desnudaron y les tiraron agua fría con bidones de 20 litros, a J.G le cortaron la oreja en reiteradas oportunidades con un alicate. Les pusieron sogas al cuello para ahorcarlos, tiraban tiros al aire, y a su vez los amenazan con matarlos si no decían dónde estaba el televisor”.

A su vez Marcelo Ibáñez llamaba telefónicamente pidiendo más municiones con el fin de poder darles muerte a los jóvenes, mientras filmaron toda la agresión, “todo eso en un lapso de 4 horas”, describió.

Banfi dijo que “luego de ese tiempo, siendo cerca de las 3 del 15 de abril, los imputados se retiraron del lugar junto a Alan, a quien por los restos hemáticos hallados en el lugar, lo trasladaron hasta los predios ubicados en Los Duraznos y Miroglio donde viven Sebastián, Kevin y Ángel para luego arrastrarlo en un vehículo por tres cuadras hasta el domicilio de sus tíos y allí lo abandonaron”.

Al regresar al lugar, los imputados que aún mantenían cautivo a J.G, continuaron con los golpes, hasta que aproximadamente a las 8 lo entregaron, previo a intimidarlo para que no denuncie, realizando disparos al aire. Así J.G. escapó hasta su domicilio donde fue trasladado al Hospital regional para curar sus heridas, siendo estas de carácter grave.

Por su parte, los familiares de Nahuelmilla, lo encontraron en la calle cercana, lo trasladaron al Hospital donde ingresó con riesgo vital falleciendo a las 17.30 por traumatismo grave de cráneo y hemorragia cerebral a causa de los golpes recibidos.

Cabe consignar que el Ministerio Público Fiscal calificó provisoriamente la privación ilegítima de la libertad agravada por haber sido cometida contra un menor, por las lesiones graves causadas a una de las víctimas por la pluralidad de partícipes y por la muerte de una de las víctimas, todos ellos en carácter de coautor.


NOTICIAS RELACIONADAS