Igualdad en la diversidad

Columna de AMJA Chubut, Asociación de Mujeres Jueces de Argentina.

21 JUL 2018 - 21:12 | Actualizado

Por Patricia Reyes (*)  / Jueza Penal

Solo el 26 % de los cargos más alto del poder judicial son ocupados por mujeres (**).
La representación femenina en las cortes y superiores tribunales de justicia de todas las provincias aún es un anhelo a cumplir. Así, de veinticuatro, seis están integradas únicamente por varones: Chubut, Corrientes, Formosa, La Rioja, Mendoza y Santiago del Estero. La corte de la provincia de San Juan fue la última en incorporar una mujer, al designar la primera Ministra mujer en el mes de mayo de 2018.
Deviene propicio en estos días en nuestra provincia y propongo reflexionar, acerca de la necesidad de cubrir sin dilación las vacantes en el Superior Tribunal del Poder Judicial de Chubut.
Considero que estas vacantes son potenciales espacios femeninos, a cubrirse con postulantes a designarse entre las capaces, experimentadas y valiosas profesionales de la provincia. La importancia de esta elección radica: en mantener la paridad de género, la igualdad en la participación de las mujeres en la toma de decisiones dentro de la estructura del Poder Judicial, el cumplimiento de la Ley de la Promoción de la Igualdad de la Mujer y las políticas sobre el tema que se imponen en este tiempo y que además, deberían ser abrazadas por los Poderes del Estado Provincial.
Entre las personas que administran justicia, jueces y juezas en propiedad, siempre ha existido una amplia brecha laboral: las mujeres continúan conformando la mayoría en las áreas inferiores en cuanto a categoría, remuneración y prestigio se refiere. Conforme se avanza a escalafones superiores, la integración de mujeres desciende en porcentajes, vale de ejemplo que en la Corte Suprema de Justicia de la Nación hay una sola ministra y en el Superior Tribunal de Justicia de nuestra provincia nunca fue nombrada una mujer.
Surge entonces que la participación de la mujer en el Poder Judicial refleja una discriminación horizontal y vertical, porque a pesar del discurso de “igualdad” se disimula la indiscutible realidad de los tribunales. Existe una igualdad legal en base al ordenamiento jurídico y la última reforma legislativa provincial, pendiente aún para lograr la igualdad real. Así también la Ley V Nº 155 prevé el cupo femenino en el Consejo de la Magistratura de Chubut. Con más precisión  la ley V N° 152 (año 2016) en relación a la integración del Superior Tribunal de Justicia, en su art. 4 anuncia “que la inclusión de nuevos miembros permita reflejar las diversidades de género, especialidad y procedencia regional en el marco del ideal de representación provincial”, lo que aún no pudo concretarse.
En casi todos los fueros de las primeras instancias y las Cámaras de la Provincia se refleja la integración con Juezas. A esta función llegaron por concurso y mérito propio, pero nunca al Alto Cuerpo Judicial al que no se accede por concurso.  Este proceso de selección colisiona con la erradicación de las desigualdades en la elección entre abogados y abogadas para integrar e ingresar al Superior Tribunal de Justicia.
En la actualidad como consecuencia del proceso de reforma y fortalecimiento institucional del Poder Judicial en el ámbito nacional y por la presión que ejercieron organizaciones no gubernamentales especializadas en el tema de justicia y democracia, como también Colegios de Abogados, partidos políticos entre otros, se operó una semi - democratización en la elección de los magistrados de los más altos tribunales, entre ellos la Corte Nacional. Esto tuvo como efecto el nombramiento de una única integrante la Dra. Elena Highton de Nolasco, vicepresidenta de la CSJN.-
Se encuentra vigente en nuestra legislación la “Convención sobre la eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer” que exige a Argentina como Estado parte y a las provincias, obligaciones tales como, entre otras: Adaptar todos las medidas adecuadas, incluso de carácter legislativo, para modificar o derogar leyes, reglamentos, usos y prácticas que constituyan discriminación contra la mujer; Tomar todas las medidas apropiadas para eliminar la discriminación contra la mujer practicada por cualesquiera personas, organizaciones o empresas, como en la vida política y pública del país.
En consonancia con lo expuesto, como abogada, jueza, docente y sobre todo mujer, alzo la voz para decir que la concreción de cobertura de los cargos del STJ de Chubut sería un caro reconocimiento a la dignidad, igualdad de oportunidades y libertad laboral, del que gozamos todas las mujeres profesionales a la par de los hombres. Tengo la convicción de que el acceso a justicia podría ser más justo, equitativo y eficaz  por el impacto que causaría la presencia igualitaria de la mirada femenina, ampliándose definitivamente la perspectiva de género como política judicial.
Coincidiendo con las palabras de la Dra. Susana Medina,  expresidente de la IAWJ, actual presidenta de la Asociación de Mujeres Jueces de Argentina (AMJA) y las comparto aquí “Más mujeres en los puestos de poder es más justicia para la gente”, y nos exhorto como magistradas “a derribar muros y construir puentes”.#
* La Dra. Patricia Reyes es Jueza Penal Puerto Madryn y delegada AMJA Chubut
** Información de la OM de CSJN (Oficina de la Mujer Corte Suprema de Justicia de la Nación)– Extracto de la investigación “Cortes Supremas Provinciales: entre la familia y la política”.

Enterate de las noticias de PROVINCIA a través de nuestro newsletter

Anotate para recibir las noticias más importantes de esta sección.

Te podés dar de baja en cualquier momento con un solo clic.

Las más leídas

21 JUL 2018 - 21:12

Por Patricia Reyes (*)  / Jueza Penal

Solo el 26 % de los cargos más alto del poder judicial son ocupados por mujeres (**).
La representación femenina en las cortes y superiores tribunales de justicia de todas las provincias aún es un anhelo a cumplir. Así, de veinticuatro, seis están integradas únicamente por varones: Chubut, Corrientes, Formosa, La Rioja, Mendoza y Santiago del Estero. La corte de la provincia de San Juan fue la última en incorporar una mujer, al designar la primera Ministra mujer en el mes de mayo de 2018.
Deviene propicio en estos días en nuestra provincia y propongo reflexionar, acerca de la necesidad de cubrir sin dilación las vacantes en el Superior Tribunal del Poder Judicial de Chubut.
Considero que estas vacantes son potenciales espacios femeninos, a cubrirse con postulantes a designarse entre las capaces, experimentadas y valiosas profesionales de la provincia. La importancia de esta elección radica: en mantener la paridad de género, la igualdad en la participación de las mujeres en la toma de decisiones dentro de la estructura del Poder Judicial, el cumplimiento de la Ley de la Promoción de la Igualdad de la Mujer y las políticas sobre el tema que se imponen en este tiempo y que además, deberían ser abrazadas por los Poderes del Estado Provincial.
Entre las personas que administran justicia, jueces y juezas en propiedad, siempre ha existido una amplia brecha laboral: las mujeres continúan conformando la mayoría en las áreas inferiores en cuanto a categoría, remuneración y prestigio se refiere. Conforme se avanza a escalafones superiores, la integración de mujeres desciende en porcentajes, vale de ejemplo que en la Corte Suprema de Justicia de la Nación hay una sola ministra y en el Superior Tribunal de Justicia de nuestra provincia nunca fue nombrada una mujer.
Surge entonces que la participación de la mujer en el Poder Judicial refleja una discriminación horizontal y vertical, porque a pesar del discurso de “igualdad” se disimula la indiscutible realidad de los tribunales. Existe una igualdad legal en base al ordenamiento jurídico y la última reforma legislativa provincial, pendiente aún para lograr la igualdad real. Así también la Ley V Nº 155 prevé el cupo femenino en el Consejo de la Magistratura de Chubut. Con más precisión  la ley V N° 152 (año 2016) en relación a la integración del Superior Tribunal de Justicia, en su art. 4 anuncia “que la inclusión de nuevos miembros permita reflejar las diversidades de género, especialidad y procedencia regional en el marco del ideal de representación provincial”, lo que aún no pudo concretarse.
En casi todos los fueros de las primeras instancias y las Cámaras de la Provincia se refleja la integración con Juezas. A esta función llegaron por concurso y mérito propio, pero nunca al Alto Cuerpo Judicial al que no se accede por concurso.  Este proceso de selección colisiona con la erradicación de las desigualdades en la elección entre abogados y abogadas para integrar e ingresar al Superior Tribunal de Justicia.
En la actualidad como consecuencia del proceso de reforma y fortalecimiento institucional del Poder Judicial en el ámbito nacional y por la presión que ejercieron organizaciones no gubernamentales especializadas en el tema de justicia y democracia, como también Colegios de Abogados, partidos políticos entre otros, se operó una semi - democratización en la elección de los magistrados de los más altos tribunales, entre ellos la Corte Nacional. Esto tuvo como efecto el nombramiento de una única integrante la Dra. Elena Highton de Nolasco, vicepresidenta de la CSJN.-
Se encuentra vigente en nuestra legislación la “Convención sobre la eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer” que exige a Argentina como Estado parte y a las provincias, obligaciones tales como, entre otras: Adaptar todos las medidas adecuadas, incluso de carácter legislativo, para modificar o derogar leyes, reglamentos, usos y prácticas que constituyan discriminación contra la mujer; Tomar todas las medidas apropiadas para eliminar la discriminación contra la mujer practicada por cualesquiera personas, organizaciones o empresas, como en la vida política y pública del país.
En consonancia con lo expuesto, como abogada, jueza, docente y sobre todo mujer, alzo la voz para decir que la concreción de cobertura de los cargos del STJ de Chubut sería un caro reconocimiento a la dignidad, igualdad de oportunidades y libertad laboral, del que gozamos todas las mujeres profesionales a la par de los hombres. Tengo la convicción de que el acceso a justicia podría ser más justo, equitativo y eficaz  por el impacto que causaría la presencia igualitaria de la mirada femenina, ampliándose definitivamente la perspectiva de género como política judicial.
Coincidiendo con las palabras de la Dra. Susana Medina,  expresidente de la IAWJ, actual presidenta de la Asociación de Mujeres Jueces de Argentina (AMJA) y las comparto aquí “Más mujeres en los puestos de poder es más justicia para la gente”, y nos exhorto como magistradas “a derribar muros y construir puentes”.#
* La Dra. Patricia Reyes es Jueza Penal Puerto Madryn y delegada AMJA Chubut
** Información de la OM de CSJN (Oficina de la Mujer Corte Suprema de Justicia de la Nación)– Extracto de la investigación “Cortes Supremas Provinciales: entre la familia y la política”.


NOTICIAS RELACIONADAS