Procesaron y embargaron a dos profesoras por la toma de una sede universitaria
El juez federal Hugo Greca procesó a las profesoras de la Universidad Nacional de Río Negro Victoria y Virginia Naffa por los delitos de "usurpación y coacción agravada" y podrían enfrentar una pena de prisión efectiva. El procesamiento incluye un embargo por $5.000.
Dos docentes de la Universidad Nacional de Río Negro fueron procesadas por la justicia federal por la toma que desde hace un mes mantienen un grupo de alumnos y profesores en el vicerrectorado y sede administrativa, en la ciudad de General Roca, informaron fuentes judiciales.
El juez federal Hugo Greca procesó a las profesoras Victoria y Virginia Naffa por los delitos de "usurpación y coacción agravada" y podrían enfrentar una pena de prisión efectiva.El procesamiento incluye un embargo por $5.000 para las docentes, que son hermanas.
Testigos relataron al magistrado que las docentes ingresaron el 12 de septiembre último junto a unos 20 estudiantes al edificio administrativo, ubicado en la calle Isidro Lobo 516 de aquella localidad del Alto Valle.
Los ocupantes, que habrían llegado desde la sede de la Universidad, en la cercana ciudad de Cipolletti, reclamaron a las autoridades mayor presupuesto para la casa de altos estudios.
Según agregaron varios testigos ante el juez,el accionar de los peticionantes tuvo características "coercitivas".
Aunque aseguraron entonces que abandonarían el espacio en 24 horas, la toma ya lleva casi un mes, no hay diálogo con los ocupantes por parte de las autoridades, y el vicerrector, Carlos Arzone, presentó una denuncia por "usurpación".
"La toma del predio fue empleada a la postre por las imputadas como violencia o amenaza en orden a obtener de las autoridades universitarias los requerimientos planteados", señaló el juez.
"El funcionamiento universitario en lo que hace a su ámbito administrativo (...) ha sido probadamente afectado", agrega el texto del procesamiento, y añade: "En cuanto a que la toma sólo era de 24 horas baste decir, casi como un eufemismo, que las pruebas afirman lo contrario".
En su descargo, las docentes encuadraron su acción dentro de la autonomía universitaria y denunciaron una "criminalización de la protesta".
El juez desestimó ese descargo. "La autonomía referida no implica sustraer la vida universitaria del orden jurídico en general", sostuvo, para agregar que "`criminalizar la protesta descansa sobre un sofisma inconsistente".
El texto judicial finaliza: "Las imputadas hicieron uso de la confianza depositada en ellas a partir de su estatus de doentes, pues sin él no parece posible haber juntado al menos veinte estudiantes en torno a ellas e ingresado al predio universitario sin más".
Dos docentes de la Universidad Nacional de Río Negro fueron procesadas por la justicia federal por la toma que desde hace un mes mantienen un grupo de alumnos y profesores en el vicerrectorado y sede administrativa, en la ciudad de General Roca, informaron fuentes judiciales.
El juez federal Hugo Greca procesó a las profesoras Victoria y Virginia Naffa por los delitos de "usurpación y coacción agravada" y podrían enfrentar una pena de prisión efectiva.El procesamiento incluye un embargo por $5.000 para las docentes, que son hermanas.
Testigos relataron al magistrado que las docentes ingresaron el 12 de septiembre último junto a unos 20 estudiantes al edificio administrativo, ubicado en la calle Isidro Lobo 516 de aquella localidad del Alto Valle.
Los ocupantes, que habrían llegado desde la sede de la Universidad, en la cercana ciudad de Cipolletti, reclamaron a las autoridades mayor presupuesto para la casa de altos estudios.
Según agregaron varios testigos ante el juez,el accionar de los peticionantes tuvo características "coercitivas".
Aunque aseguraron entonces que abandonarían el espacio en 24 horas, la toma ya lleva casi un mes, no hay diálogo con los ocupantes por parte de las autoridades, y el vicerrector, Carlos Arzone, presentó una denuncia por "usurpación".
"La toma del predio fue empleada a la postre por las imputadas como violencia o amenaza en orden a obtener de las autoridades universitarias los requerimientos planteados", señaló el juez.
"El funcionamiento universitario en lo que hace a su ámbito administrativo (...) ha sido probadamente afectado", agrega el texto del procesamiento, y añade: "En cuanto a que la toma sólo era de 24 horas baste decir, casi como un eufemismo, que las pruebas afirman lo contrario".
En su descargo, las docentes encuadraron su acción dentro de la autonomía universitaria y denunciaron una "criminalización de la protesta".
El juez desestimó ese descargo. "La autonomía referida no implica sustraer la vida universitaria del orden jurídico en general", sostuvo, para agregar que "`criminalizar la protesta descansa sobre un sofisma inconsistente".
El texto judicial finaliza: "Las imputadas hicieron uso de la confianza depositada en ellas a partir de su estatus de doentes, pues sin él no parece posible haber juntado al menos veinte estudiantes en torno a ellas e ingresado al predio universitario sin más".