El duro testimonio de un víctima de violencia de género en Esquel: "Estoy muy feliz de estar viva"
Lo dijo luego de aceptar una suspensión del juicio a prueba contra su expareja, Juan Pablo Ávarez. El imputado reconoció el hecho, aceptó ser declarado penalmente responsable y fue condenado a la pena de seis meses de prisión de ejecución condicional con reglas de conducta.
Tras un juicio abreviado por un hecho calificado como "lesiones leves agravadas por el vínculo y por ser cometidas contra una mujer mediando violencia de género", la Justicia de Esquel condenó a Juan Pablo Álvarez a la pena de seis meses de prisión de ejecución condicional con reglas de conducta. Álvarez reconoció su responsabilidad frente a la víctima y frente al juez Martín Zacchino. Por lo que el magistrado homologó el acuerdo, declarando penalmente responsable al imputado.
La fiscal María Bottini expuso los detalles del hecho y los términos del acuerdo alcanzado con el defensor particular Juan Zapata. Antes de dar la palabra al imputado, el juez le consultó a la víctima si quería decir algo. Con entereza, la joven sostuvo que "esto cierra una etapa muy difícil para mí, muy oscura, que creo que no voy a volver a vivir nunca más”. Luego continuó haciendo referencia a quienes la acompañaron: “Quiero agradecer a todas las personas que me ayudaron y me apoyaron. Desde ese patrullero que me rescató en la calle Yrigoyen y me llevó al Hospital; a todo el personal del Hospital; a la Comisaría de la Mujer, a Verónica Masciarelli que fue la primera que me vio golpeada y que hoy está presente y puede ver mi evolución y puede ver cómo yo salí adelante. A Julia Mateos, a María (Bottini), a todo el equipo”.
Pero también agradeció especialmente a una joven, expareja de Álvarez, que la acompañó y que se ofreció como testigo para contar sus propias vivencias. Finalmente, emocionada, agradeció a sus padres por haberle dado fuerzas y sostuvo “realmente estoy muy feliz de estar viva”.
El imputado reconoció el hecho tal como está descripto en la acusación fiscal, aceptó ser declarado penalmente responsable y condenado a la pena de seis meses de prisión de ejecución condicional con reglas de conducta. Se comprometió a dar continuidad al tratamiento psicológico y no podrá acercarse ni tomar contacto por cualquier vía con la víctima.
(Fuente: Ministerio Público Fiscal)
Tras un juicio abreviado por un hecho calificado como "lesiones leves agravadas por el vínculo y por ser cometidas contra una mujer mediando violencia de género", la Justicia de Esquel condenó a Juan Pablo Álvarez a la pena de seis meses de prisión de ejecución condicional con reglas de conducta. Álvarez reconoció su responsabilidad frente a la víctima y frente al juez Martín Zacchino. Por lo que el magistrado homologó el acuerdo, declarando penalmente responsable al imputado.
La fiscal María Bottini expuso los detalles del hecho y los términos del acuerdo alcanzado con el defensor particular Juan Zapata. Antes de dar la palabra al imputado, el juez le consultó a la víctima si quería decir algo. Con entereza, la joven sostuvo que "esto cierra una etapa muy difícil para mí, muy oscura, que creo que no voy a volver a vivir nunca más”. Luego continuó haciendo referencia a quienes la acompañaron: “Quiero agradecer a todas las personas que me ayudaron y me apoyaron. Desde ese patrullero que me rescató en la calle Yrigoyen y me llevó al Hospital; a todo el personal del Hospital; a la Comisaría de la Mujer, a Verónica Masciarelli que fue la primera que me vio golpeada y que hoy está presente y puede ver mi evolución y puede ver cómo yo salí adelante. A Julia Mateos, a María (Bottini), a todo el equipo”.
Pero también agradeció especialmente a una joven, expareja de Álvarez, que la acompañó y que se ofreció como testigo para contar sus propias vivencias. Finalmente, emocionada, agradeció a sus padres por haberle dado fuerzas y sostuvo “realmente estoy muy feliz de estar viva”.
El imputado reconoció el hecho tal como está descripto en la acusación fiscal, aceptó ser declarado penalmente responsable y condenado a la pena de seis meses de prisión de ejecución condicional con reglas de conducta. Se comprometió a dar continuidad al tratamiento psicológico y no podrá acercarse ni tomar contacto por cualquier vía con la víctima.
(Fuente: Ministerio Público Fiscal)