Montenegro expresó que esta nueva conducción “refleja un proceso de fortalecimiento, de incorporación de sindicatos y organizaciones vecinales, barriales, políticas y sociales”. Expresó que esta asunción se da en un contexto marcado por un año de lucha muy profunda en conjunto de los gremios. A Montenegro los acompañan como secretaria adjunta Gladis Díaz, representante de ATE y ATECh, y Alejandro González de SUTAP.
“Desde el año pasado con la conformación de la Mesa de Unidad Sindical se marcó en la provincia la fortaleza de la lucha y la resistencia. Quedan cosas por resolver pero eso fue un buen mensaje de que se pueden dejar algunas diferencias de lado que podemos tener con diferentes organizaciones y poner por delante la defensa de los trabajadores y nuestros derechos”. Para el gremialista, eso significó que “en muchos casos, las organizaciones pudimos arrancarle al Gobierno paritarias que en principio no quería dar, porque algunas situaciones pudimos modificarlas y otras quedaron pendientes”.
“Lo más importante de esto es entender el contexto en que estamos asumiendo, que tiene que ver con fortalecer nuestra organización para afrontar lo que viene, porque nosotros tenemos muy claro que nuestro enemigo es el neoliberalismo y que para eso tenemos que fortalecer a las organizaciones”, concluyó en este sentido.
Montenegro expresó que esta nueva conducción “refleja un proceso de fortalecimiento, de incorporación de sindicatos y organizaciones vecinales, barriales, políticas y sociales”. Expresó que esta asunción se da en un contexto marcado por un año de lucha muy profunda en conjunto de los gremios. A Montenegro los acompañan como secretaria adjunta Gladis Díaz, representante de ATE y ATECh, y Alejandro González de SUTAP.
“Desde el año pasado con la conformación de la Mesa de Unidad Sindical se marcó en la provincia la fortaleza de la lucha y la resistencia. Quedan cosas por resolver pero eso fue un buen mensaje de que se pueden dejar algunas diferencias de lado que podemos tener con diferentes organizaciones y poner por delante la defensa de los trabajadores y nuestros derechos”. Para el gremialista, eso significó que “en muchos casos, las organizaciones pudimos arrancarle al Gobierno paritarias que en principio no quería dar, porque algunas situaciones pudimos modificarlas y otras quedaron pendientes”.
“Lo más importante de esto es entender el contexto en que estamos asumiendo, que tiene que ver con fortalecer nuestra organización para afrontar lo que viene, porque nosotros tenemos muy claro que nuestro enemigo es el neoliberalismo y que para eso tenemos que fortalecer a las organizaciones”, concluyó en este sentido.