Los días de Michael Schumacher en Chubut
El multicampeón mundial celebra hoy 50 años en un estricto hermetismo sobre su salud. Hace más de dos décadas, cuando había obtenido dos títulos con Benetton y empezaba su carrera en Ferrari, visitó Punta Tombo y Península Valdés.
La Fórmula 1 y Ferrari recordaron desde las primeras horas de este jueves los 50 años de Michael Schumacher, y la fundación que se creó tras su accidente de esquí lanzó una aplicación en la que recuerda la carrera deportiva del piloto alemán y además permite realizar un tour en el museo de Colonia (Alemania), donde se exhiben autos, equipos de competición y trofeos del heptacampeón mundial.
Convaleciente desde hace cinco años y sin que conozcan detalles de su real estado de salud tras ser recluido en su residencia privada de Suiza, donde un equipo médico lo asiste de manera casi permanente, además de la presencia de su familia.
Schumacher es aún hoy el piloto más importante en la historia de la Fórmula 1, ya que es el único que ha obtenido 7 campeonatos como piloto, y además posee un récord de 91 victorias, superando en esa estadística a los quíntuples campeones Juan Manuel Fangio y Lewis Hamilton, este último aún en actividad.
El alemán era ya una figura consagrada en el deporte motor cuando en los primeros días del mes de abril de 1.996 llegó a Chubut junto a Corina Betsch, quien por entonces era la novia del teutón y luego se convirtió en la esposa y madre de sus dos hijos: Mick y Gina-María.
El viaje fue con fines de descanso para la pareja y se produjo a posteriori del GP de Brasil y días antes del GP de Argentina, fechas de la F1 en las que Schumacher correría ya como piloto de Ferrari, tras dos temporadas exitosas con el equipo Benetton Renault.
Las crónicas de Jornada por aquellos años daban cuenta del arribo de Schumacher en un vuelo particular junto a Corina y a Flo, un perro que la pareja había adoptado tras encontrarlo abandonado en San Pablo.
En el aeropuerto de Trelew el piloto fue recibido por el guía de turismo Andrés Roberts, quien este jueves en diálogo con FM Tiempo recordó el carácter afable y sencillo del deportista, pese a ser ya consagrado.
“Nunca supe quién me eligió, alguien de la Embajada seguramente, para trabajar con él, porque era una situación bastante complicada, no es habitual” indicó Roberts y recordó que apenas arribado al aeropuerto fue abordado por la prensa local, quien lo consultó sobre sus expectativas a pocos días de aquel Gran Premio de Argentina de F1.
El guía de turismo indicó que le pidió a los cronistas ser breves y solo requerir por pocos minutos, “a lo que él me pregunta que porque aceptaba solamente en este lugar un horario y terminar la entrevista; entonces le dije que conocía a los suegros de todos, empezaron a reírse y ahí se rompió el hielo”.
“Era una persona muy sencilla, muy tranquila y una de las cosas que más recuerdo era que como guía tenía más problemas para poder trabajar con un perrito que había encontrado en Brasil, que lo traía en el avión, porque a las reservas y hoteles no se podía acceder con un perro, era bastante complicado, ahora es más fácil”.
Apenas llegado a Trelew, la comitiva viajó a Punta Tombo, donde fue reconocido por un grupo de turistas alemanes, quienes rápidamente lo requirieron para autógrafos y fotos.
“A él le interesaba todo lo que era naturaleza, espacios abiertos, inversiones que podía hacer la gente. Me explicaba que pese a los riesgos que tenía en las carreras, el estado alemán le sacaba casi un 50% en impuestos, por eso estaba viviendo en Mónaco” recordó Andrés Roberts, quien atesora como recuerdo un momento en el cual, en plena Península Valdés, el alemán le pidió que lo dejara manejar, “así que yo era el copiloto de Schumacher”.
Del testimonio que aportó Michael Schumacher en Trelew, allá por el 1 de abril de 1.996, se destaca su análisis de las primeras carreras con Ferrari. “A pesar de los problemas que significa afrontar una temporada en una nueva escudería como en este caso Ferrari, luego de la competencia del domingo en Brasil hemos quedado conformes, teniendo en cuenta que solamente se han corrido dos competencias en la presente temporada y este fin de semana con algunos cambios a realizar espero demostrar en el circuito de Buenos Aires que somos competitivos con el equipo de Maranello”.
Aquel fin de semana el piloto alemán abandonaría la competencia con el alerón de su auto roto y la victoria sería para el británico Damon Hill, a la postre campeón de la temporada. Sin embargo, en su recorrido de diez temporadas en Ferrari, el alemán conseguiría cinco campeonatos mundiales y el equipo italiano seis copas de constructores.
La Fórmula 1 y Ferrari recordaron desde las primeras horas de este jueves los 50 años de Michael Schumacher, y la fundación que se creó tras su accidente de esquí lanzó una aplicación en la que recuerda la carrera deportiva del piloto alemán y además permite realizar un tour en el museo de Colonia (Alemania), donde se exhiben autos, equipos de competición y trofeos del heptacampeón mundial.
Convaleciente desde hace cinco años y sin que conozcan detalles de su real estado de salud tras ser recluido en su residencia privada de Suiza, donde un equipo médico lo asiste de manera casi permanente, además de la presencia de su familia.
Schumacher es aún hoy el piloto más importante en la historia de la Fórmula 1, ya que es el único que ha obtenido 7 campeonatos como piloto, y además posee un récord de 91 victorias, superando en esa estadística a los quíntuples campeones Juan Manuel Fangio y Lewis Hamilton, este último aún en actividad.
El alemán era ya una figura consagrada en el deporte motor cuando en los primeros días del mes de abril de 1.996 llegó a Chubut junto a Corina Betsch, quien por entonces era la novia del teutón y luego se convirtió en la esposa y madre de sus dos hijos: Mick y Gina-María.
El viaje fue con fines de descanso para la pareja y se produjo a posteriori del GP de Brasil y días antes del GP de Argentina, fechas de la F1 en las que Schumacher correría ya como piloto de Ferrari, tras dos temporadas exitosas con el equipo Benetton Renault.
Las crónicas de Jornada por aquellos años daban cuenta del arribo de Schumacher en un vuelo particular junto a Corina y a Flo, un perro que la pareja había adoptado tras encontrarlo abandonado en San Pablo.
En el aeropuerto de Trelew el piloto fue recibido por el guía de turismo Andrés Roberts, quien este jueves en diálogo con FM Tiempo recordó el carácter afable y sencillo del deportista, pese a ser ya consagrado.
“Nunca supe quién me eligió, alguien de la Embajada seguramente, para trabajar con él, porque era una situación bastante complicada, no es habitual” indicó Roberts y recordó que apenas arribado al aeropuerto fue abordado por la prensa local, quien lo consultó sobre sus expectativas a pocos días de aquel Gran Premio de Argentina de F1.
El guía de turismo indicó que le pidió a los cronistas ser breves y solo requerir por pocos minutos, “a lo que él me pregunta que porque aceptaba solamente en este lugar un horario y terminar la entrevista; entonces le dije que conocía a los suegros de todos, empezaron a reírse y ahí se rompió el hielo”.
“Era una persona muy sencilla, muy tranquila y una de las cosas que más recuerdo era que como guía tenía más problemas para poder trabajar con un perrito que había encontrado en Brasil, que lo traía en el avión, porque a las reservas y hoteles no se podía acceder con un perro, era bastante complicado, ahora es más fácil”.
Apenas llegado a Trelew, la comitiva viajó a Punta Tombo, donde fue reconocido por un grupo de turistas alemanes, quienes rápidamente lo requirieron para autógrafos y fotos.
“A él le interesaba todo lo que era naturaleza, espacios abiertos, inversiones que podía hacer la gente. Me explicaba que pese a los riesgos que tenía en las carreras, el estado alemán le sacaba casi un 50% en impuestos, por eso estaba viviendo en Mónaco” recordó Andrés Roberts, quien atesora como recuerdo un momento en el cual, en plena Península Valdés, el alemán le pidió que lo dejara manejar, “así que yo era el copiloto de Schumacher”.
Del testimonio que aportó Michael Schumacher en Trelew, allá por el 1 de abril de 1.996, se destaca su análisis de las primeras carreras con Ferrari. “A pesar de los problemas que significa afrontar una temporada en una nueva escudería como en este caso Ferrari, luego de la competencia del domingo en Brasil hemos quedado conformes, teniendo en cuenta que solamente se han corrido dos competencias en la presente temporada y este fin de semana con algunos cambios a realizar espero demostrar en el circuito de Buenos Aires que somos competitivos con el equipo de Maranello”.
Aquel fin de semana el piloto alemán abandonaría la competencia con el alerón de su auto roto y la victoria sería para el británico Damon Hill, a la postre campeón de la temporada. Sin embargo, en su recorrido de diez temporadas en Ferrari, el alemán conseguiría cinco campeonatos mundiales y el equipo italiano seis copas de constructores.