Ambas organizaciones presentaron un sitio web interactivo que documenta las muertes de civiles en esa ciudad norteña, pese a que la coalición continúa "negándolo" y tan solo se responsabiliza de menos del 10% -un total de 159 muertes de inocentes-.
Tras casi dos años de pesquisas sobre el terreno, la web "Retórica frente a realidad: Cómo 'la campaña aérea más precisa de la historia convirtió Al Raqqa en la ciudad más destruida de los tiempos modernos" es, aseguran, un proyecto de investigación "sin precedentes" y el más completo sobre muertes de civiles en un conflicto moderno.
Airwars es una ONG que monitorea la guerra aérea internacional lanzada en 2014 contra el EI y sus víctimas civiles.
AI y Airwars -que documentan bombardeos internacionales en Irak y en Siria- resaltaron que el proyecto "proporciona un recuento gráfico de más de 1.600 vidas perdidas como resultado directo de miles de ataques aéreos estadounidenses, británicos y franceses y decenas de miles con artillería pesada de Estados Unidos".
Ambas organizaciones instaron a la coalición a "poner fin a casi dos años de negación" con respecto a la "gigante cifra de muertes y destrucción" acometida en esa ciudad siria "un bombardeo cada seis minutos", según aseguró AI en su página web.
"Muchos de los bombardeos aéreos no fueron precisos y decenas de miles de ataques con artillería pesada fueron indiscriminados, así que no es una sorpresa que hayan matado y herido a tantos cientos de civiles", lamentó Donatella Rovera, asesora de respuestas en situaciones de crisis de AI, citada por la agencia de noticias EFE.
Para Rovera, los francotiradores y minas convirtieron la ciudad en "una ratonera".
El director de Airwars, Chris Woods, pidió a la coalición que "investigue a fondo qué salió mal en Al Raqqa y aprenda de las lecciones para evitar infligir ese tremendo sufrimiento a civiles en futuras operaciones militares".
AI y Airwars realizaron cuatro visitas a esa ciudad siria desde el inicio del conflicto y pasaron unos dos meses investigando sobre el terreno más de 200 lugares que habían sido atacados, entrevistaron a 400 testigos y supervivientes y revisaron 2 millones de fotografías.
Muchos de los casos equivalen a violaciones de la ley humanitaria internacional, según AI, que instó a la coalición -especialmente a Estados Unidos, Reino Unido y Francia- a ser transparente sobre sus tácticas, medios, métodos de ataque y objetivos, y pidió que tomen precauciones en la planificación y ejecución de sus ataques.
Ambas organizaciones presentaron un sitio web interactivo que documenta las muertes de civiles en esa ciudad norteña, pese a que la coalición continúa "negándolo" y tan solo se responsabiliza de menos del 10% -un total de 159 muertes de inocentes-.
Tras casi dos años de pesquisas sobre el terreno, la web "Retórica frente a realidad: Cómo 'la campaña aérea más precisa de la historia convirtió Al Raqqa en la ciudad más destruida de los tiempos modernos" es, aseguran, un proyecto de investigación "sin precedentes" y el más completo sobre muertes de civiles en un conflicto moderno.
Airwars es una ONG que monitorea la guerra aérea internacional lanzada en 2014 contra el EI y sus víctimas civiles.
AI y Airwars -que documentan bombardeos internacionales en Irak y en Siria- resaltaron que el proyecto "proporciona un recuento gráfico de más de 1.600 vidas perdidas como resultado directo de miles de ataques aéreos estadounidenses, británicos y franceses y decenas de miles con artillería pesada de Estados Unidos".
Ambas organizaciones instaron a la coalición a "poner fin a casi dos años de negación" con respecto a la "gigante cifra de muertes y destrucción" acometida en esa ciudad siria "un bombardeo cada seis minutos", según aseguró AI en su página web.
"Muchos de los bombardeos aéreos no fueron precisos y decenas de miles de ataques con artillería pesada fueron indiscriminados, así que no es una sorpresa que hayan matado y herido a tantos cientos de civiles", lamentó Donatella Rovera, asesora de respuestas en situaciones de crisis de AI, citada por la agencia de noticias EFE.
Para Rovera, los francotiradores y minas convirtieron la ciudad en "una ratonera".
El director de Airwars, Chris Woods, pidió a la coalición que "investigue a fondo qué salió mal en Al Raqqa y aprenda de las lecciones para evitar infligir ese tremendo sufrimiento a civiles en futuras operaciones militares".
AI y Airwars realizaron cuatro visitas a esa ciudad siria desde el inicio del conflicto y pasaron unos dos meses investigando sobre el terreno más de 200 lugares que habían sido atacados, entrevistaron a 400 testigos y supervivientes y revisaron 2 millones de fotografías.
Muchos de los casos equivalen a violaciones de la ley humanitaria internacional, según AI, que instó a la coalición -especialmente a Estados Unidos, Reino Unido y Francia- a ser transparente sobre sus tácticas, medios, métodos de ataque y objetivos, y pidió que tomen precauciones en la planificación y ejecución de sus ataques.