Cesó el alerta meteorológico en la provincia pero se mantienen las tareas preventivas
El Servicio Meteorológico Nacional anunció el cese del alerta por lluvias en la zona este de Chubut. El director de Defensa Civil de la provincia, Walter Flores, señaló que “el alerta de nieve mermó, sólo nieva en las alturas. En Esquel, Corcovado, zona Trevelin hay lluvias lo mismo que la zona comarcal, nevó un poco en El Maitén, Lago Puelo, El Hoyo, Epuyén, Las Golondrinas”.
“Armamos tres equipos: uno monitorea la zona comarcal desde el Paralelo de Golondrinas hasta Leleque; la delegación de Esquel se hace cargo de Esquel, Trevelin, Corcovado, Carrenleufú y la Ruta 40 con empalme a la ruta 259. En José de San Martín monitoreamos la ruta desde Tecka hasta Sarmiento, empalme con la ruta 26”, señaló.
Flores manifestó que “nos preocupa Camarones, que serían 38 mm de lluvia y estamos trabajando. Estamos cubriendo toda la zona, ciudades y rutas que están con alerta tanto por agua o por nevadas”. Hay permanente contacto con Vialidad Provincial y Nacional.
“Recomendamos a los conductores que se comuniquen antes de emprender un viaje al 0800- 666- 2447 para saber la situación del momento”, concluyó.
A pesar del cese del alerta meteorológico la Municipalidad de Trelew continuará este fin de semana con tareas de prevención ante el pronóstico de lluvias aisladas hoy. Se trabaja preventivamente en la limpieza de sumideros y alcantarillas, así como también repaso de calles. Hasta ayer no había personas evacuadas pero continuará el operativo del Comité de Emergencia con guardias las 24 horas para atender casos urgentes. Se trabaja en contacto con los Centros de Promoción Social y bomberos, por cualquier eventualidad. Los vecinos pueden llamar a Defensa Civil 154220633, o la Agencia de Seguridad y Prevención 4432892 o 154220557.
Comodoro
Las lluvias, persistentes y sostenidas con intensidad en las últimas horas, expusieron una vez más la difícil situación de distintos barrios de Comodoro Rivadavia como Divina Providencia; Juan XXIII, Pueyrredón, Avenidas Roca y Chile, donde el clima impacta con mayor rigor. Los mismos lugares que en 2017 fueron devastados por el temporal. Ante cualquier pronóstico adverso, los vecinos se preparan para lo peor.
La lluvia superó la media y generó rápidas consecuencias en estos sectores críticos. Aunque se desagotaron los pluviales, nuevamente la capacidad natural se desbordó: las avenidas se anegaron y en sectores cercanos a la Avenida Kennedy nuevamente la acumulación de agua alcanzó niveles peligrosos. En este sector es una constante, la demanda de los vecinos quienes recuerdan las visitas de funcionarios nacionales que prometieron “sanear” el lugar. No sólo no se realizaron obras estructurales que minimizen el riesgo sino que lo hecho generó un perjuicio mayor. “Se taparon las cloacas enseguida y el asfalto que hicieron en los alrededores, obstruyó cañerías e hizo que ahora nos inundáramos más”, describió una de las vecinas del Juan XXIII que lamentó las “miserias” políticas con acusaciones mutuas entre municipio y Nación y casi nada de acción concreta.
En el complejo sector de Kennedy, donde aún permanecen vivas las postales de 2017, rápido se interrumpió el tránsito ya que la calle se inundó en cuestión de horas. Una situación similar se vivió en la Avenida Roca con desbordes, autos auxiliados y accesos a viviendas bloqueados. También la zona cercana del barrio Treinta de Octubre, lindante a Chile, sufrió las consecuencias de la lluvia en cuanto a la accesibilidad. En Defensa Civil se respondió a múltiples pedidos de nylon para resguardar viviendas aunque no hubo evacuados.
En la zona norte, los sectores más afectados se repitieron. Rápidamente, apenas desatada la lluvia se dificultó la circulación por la avenida Fray Luis Beltrán, que vincula a Kilómetro Tres con los barrios Divina Providencia, Saavedra y camino Roque González. En este sector cuya traza se modificó por efectos del último temporal, el agua provocó incidentes, roturas y grietas que derivaron en accidentes con vehículos dañados. El clima mejoraría este fin de semana.
“Armamos tres equipos: uno monitorea la zona comarcal desde el Paralelo de Golondrinas hasta Leleque; la delegación de Esquel se hace cargo de Esquel, Trevelin, Corcovado, Carrenleufú y la Ruta 40 con empalme a la ruta 259. En José de San Martín monitoreamos la ruta desde Tecka hasta Sarmiento, empalme con la ruta 26”, señaló.
Flores manifestó que “nos preocupa Camarones, que serían 38 mm de lluvia y estamos trabajando. Estamos cubriendo toda la zona, ciudades y rutas que están con alerta tanto por agua o por nevadas”. Hay permanente contacto con Vialidad Provincial y Nacional.
“Recomendamos a los conductores que se comuniquen antes de emprender un viaje al 0800- 666- 2447 para saber la situación del momento”, concluyó.
A pesar del cese del alerta meteorológico la Municipalidad de Trelew continuará este fin de semana con tareas de prevención ante el pronóstico de lluvias aisladas hoy. Se trabaja preventivamente en la limpieza de sumideros y alcantarillas, así como también repaso de calles. Hasta ayer no había personas evacuadas pero continuará el operativo del Comité de Emergencia con guardias las 24 horas para atender casos urgentes. Se trabaja en contacto con los Centros de Promoción Social y bomberos, por cualquier eventualidad. Los vecinos pueden llamar a Defensa Civil 154220633, o la Agencia de Seguridad y Prevención 4432892 o 154220557.
Comodoro
Las lluvias, persistentes y sostenidas con intensidad en las últimas horas, expusieron una vez más la difícil situación de distintos barrios de Comodoro Rivadavia como Divina Providencia; Juan XXIII, Pueyrredón, Avenidas Roca y Chile, donde el clima impacta con mayor rigor. Los mismos lugares que en 2017 fueron devastados por el temporal. Ante cualquier pronóstico adverso, los vecinos se preparan para lo peor.
La lluvia superó la media y generó rápidas consecuencias en estos sectores críticos. Aunque se desagotaron los pluviales, nuevamente la capacidad natural se desbordó: las avenidas se anegaron y en sectores cercanos a la Avenida Kennedy nuevamente la acumulación de agua alcanzó niveles peligrosos. En este sector es una constante, la demanda de los vecinos quienes recuerdan las visitas de funcionarios nacionales que prometieron “sanear” el lugar. No sólo no se realizaron obras estructurales que minimizen el riesgo sino que lo hecho generó un perjuicio mayor. “Se taparon las cloacas enseguida y el asfalto que hicieron en los alrededores, obstruyó cañerías e hizo que ahora nos inundáramos más”, describió una de las vecinas del Juan XXIII que lamentó las “miserias” políticas con acusaciones mutuas entre municipio y Nación y casi nada de acción concreta.
En el complejo sector de Kennedy, donde aún permanecen vivas las postales de 2017, rápido se interrumpió el tránsito ya que la calle se inundó en cuestión de horas. Una situación similar se vivió en la Avenida Roca con desbordes, autos auxiliados y accesos a viviendas bloqueados. También la zona cercana del barrio Treinta de Octubre, lindante a Chile, sufrió las consecuencias de la lluvia en cuanto a la accesibilidad. En Defensa Civil se respondió a múltiples pedidos de nylon para resguardar viviendas aunque no hubo evacuados.
En la zona norte, los sectores más afectados se repitieron. Rápidamente, apenas desatada la lluvia se dificultó la circulación por la avenida Fray Luis Beltrán, que vincula a Kilómetro Tres con los barrios Divina Providencia, Saavedra y camino Roque González. En este sector cuya traza se modificó por efectos del último temporal, el agua provocó incidentes, roturas y grietas que derivaron en accidentes con vehículos dañados. El clima mejoraría este fin de semana.