El titular de Vialidad dice que el gremio lo ataca porque le desbarató varios "negocios"

-¿A qué atribuye las acusaciones del SITRAVICh?

-Son operaciones políticas e intereses de un grupo que aprovecha momentos de crisis para realizar estas malas prácticas, que deben quedar en la historia.

-Fue muy crítico de algunos manejos, ¿afectó intereses internos?

-Fui crítico en manejos que había en Vialidad, porque iban todos en detrimento del Estado. Los ejemplos más claros que me encontré fueron por ejemplo, contratación de equipamientos a través de alquileres por más de 1300 millones de pesos; un caudal de horas extras que se pasaban grupos muy reducidos de personas que no alcanzaba las horas físicas del día para hacerlas; personal que no iba a trabajar durante meses y presentaba licencias psicológicas y en paralelo trabajaba en empresas o negocios particulares. Inspectores que certificaban obras que no se ejecutaban, pero si se pagaban, dejando pueblos con las obras inconclusas. Algunas de esas personas se fueron exoneradas del Estado. Me encontré con un cogobierno en la administración de Vialidad donde un grupo reducido manejaban intereses particulares, eso también se empezó a ordenar.

-¿Cuál es el impacto de las medidas de fuerza?

-Los casi 30 días de paro del mes pasado tuvieron un impacto directo en el estado de los caminos ya que no se pudieron repasar ni atender. La parte que sufrirá el impacto más grave en Vialidad será en las áreas administrativas, ya que tantos días de paro paralizaron muchísimos procesos y cayeron muchísimas compras y licitaciones, ahora hay que empezar todo de vuelta y llevará al menos dos o tres meses. La problemática grave que ya se siente y con impacto directo en la operación es la falta de combustible en las zonas donde están trabajando, la falta de cemento para la planta de adoquines y algunos insumos básicos que impiden el normal funcionamiento.

-¿Qué trabajos se afectaron?

-Prácticamente todo, además del mantenimiento de los caminos; las obras de los Lagos de la Ruta 71, la obra de la ruta 259 en Trevelin, el puente del Arroyo La Mata y el puente de Caleta Córdova, ambos en Comodoro. La falta de cemento para la planta de adoquines hace que esta semana o la que viene se pare la producción.

-¿Cómo se afronta el día a día?

-Exceptuando estos momentos de crisis que son difíciles, el día a día de convivencia es normal. Hace algo más de un año hubo otra crisis similar y fue superada. Es cuestión de superar ésta también y volver en armonía a hacer lo que el 95% de los empleados quiere: trabajar y tener los beneficios que les corresponde, que siempre se les mantuvieron en su totalidad y así seguirán.

-¿Cómo analiza el conflicto con los gremios?

-Tuvo sus altibajos pero siempre se sale de los conflictos con propuestas, diálogo y consenso. Confío en que se va a solucionar. Se sale pensando y trabajando. No hay otra salida.