Aseguran que el propio océano devolverá la arena en Playa Unión
Con la marejada de semanas atrás, se perdió gran cantidad de material fino de la costa en la zona sur de Playa Unión y quedaron distribuidas grandes cantidades de piedras que el mismo movimiento del agua sacó de la escollera.
Según explicaron desde la dirección de infraestructura portuaria, estiman que ahora comenzará un proceso inverso por el cual el mismo mar repondrá el material faltante.
Igualmente se debe trabajar con una máquina en el lugar para quitar de la arena las piedras que se deben restituir a la escollera ubicada frente al complejo Torre Molinos. Además se está analizando la posibilidad económica existente para extender mar adentro la escollera bajando su altura.
Esta obra como paliativo, hasta llegar a una solución definitiva al avance del mar, con la construcción de varias escolleras más a lo largo de Playa Unión.
El Ing. José Luis Quiñones, integrante de la Dirección de Infraestructura Portuaria, comentó que se está reflotando “un viejo proyecto de cinco espigones a lo largo de la costa, similar al que hay, y un espigón más, off shore, sin contacto con la tierra y paralelo a la costa, que serviría para protección de la misma”.
El proyecto “fue un estudio que se hizo hace cinco años, sobre cuáles serían las soluciones y surgió esto”, comentó Quiñones, quien reconoció que el proyecto completo hoy económicamente no es factible realizar pero “lo que estamos viendo es arrancar con algo, y en los sucesivos presupuestos ir completando la obra”.
Sin arena en la costa
“Creo que el mar va a devolver el material que se llevó, sobre todo el material fino. El mar tiene un proceso continuo que lleva y trae, un movimiento normal. En general desde agosto a octubre se lleva material y el resto del año lo aporta de vuelta. Estamos terminando esa época de retiro de material”, explicó el Ingeniero.
En cuanto a las piedras movidas de la escollera y que están distribuidas sobre la costa, Quiñones comentó que como “son piedras de pequeño tamaño, debería el Municipio, si es posible, con alguna máquina chica recolectarlas y llevarlas. Son piedras que están en alrededor de los 300 kilos, que el mar las va moviendo, sino el mismo movimiento del mar las va a degradar. Con la máquina habría que arrimarlas al lugar de la escollera”, afirmó.
Según explicaron desde la dirección de infraestructura portuaria, estiman que ahora comenzará un proceso inverso por el cual el mismo mar repondrá el material faltante.
Igualmente se debe trabajar con una máquina en el lugar para quitar de la arena las piedras que se deben restituir a la escollera ubicada frente al complejo Torre Molinos. Además se está analizando la posibilidad económica existente para extender mar adentro la escollera bajando su altura.
Esta obra como paliativo, hasta llegar a una solución definitiva al avance del mar, con la construcción de varias escolleras más a lo largo de Playa Unión.
El Ing. José Luis Quiñones, integrante de la Dirección de Infraestructura Portuaria, comentó que se está reflotando “un viejo proyecto de cinco espigones a lo largo de la costa, similar al que hay, y un espigón más, off shore, sin contacto con la tierra y paralelo a la costa, que serviría para protección de la misma”.
El proyecto “fue un estudio que se hizo hace cinco años, sobre cuáles serían las soluciones y surgió esto”, comentó Quiñones, quien reconoció que el proyecto completo hoy económicamente no es factible realizar pero “lo que estamos viendo es arrancar con algo, y en los sucesivos presupuestos ir completando la obra”.
Sin arena en la costa
“Creo que el mar va a devolver el material que se llevó, sobre todo el material fino. El mar tiene un proceso continuo que lleva y trae, un movimiento normal. En general desde agosto a octubre se lleva material y el resto del año lo aporta de vuelta. Estamos terminando esa época de retiro de material”, explicó el Ingeniero.
En cuanto a las piedras movidas de la escollera y que están distribuidas sobre la costa, Quiñones comentó que como “son piedras de pequeño tamaño, debería el Municipio, si es posible, con alguna máquina chica recolectarlas y llevarlas. Son piedras que están en alrededor de los 300 kilos, que el mar las va moviendo, sino el mismo movimiento del mar las va a degradar. Con la máquina habría que arrimarlas al lugar de la escollera”, afirmó.