Sin embargo advirtió que “no me enriquecí” con ese dinero que embolsó por fuera de su sueldo como funcionario público. “A esta altura no veo razonable excusarme si eran o no gastos reservados del gobernador. Yo sabía cuánto eran esos gastos y los pagaba porque estaban en el presupuesto. Pero no voy a ensayar la teoría de que no sabía”.
En su declaración ante el tribunal del Caso Revelación ayer en la Oficina Judicial de Rawson, Oca aseguró que hasta le propuso a Das Neves iniciar una discusión pública sobre el bajo sueldo de la planta política. “En aquel momento el sueldo del presidente del Banco Chubut era 5 veces el del ministro de Economía. Desde ya que eso no justifica los sobresueldos pero planteé poner blanco sobre negro”. Ese debate no ocurrió. “Yo tenía dos caminos: renunciar o denunciar. No tomé ninguno de los dos”.
En otro orden, el exfuncionario también admitió que es responsable de los pagos a las empresas de obra pública que le achaca el fiscal Marcos Nápoli. “Yo le daba la orden a Tesorería General y decidía qué debía pagarse y qué no, en eso acepto mi responsabilidad”. Pero deslizó que los trámites en Economía que comandó fueron legales, sin retornos de por medio. Y aclaró que no fue el responsable de pagos de otros organismos. Y Sin embargo, el imputado aseguró que nunca organizó una asociación ilícita. “Nunca voy a entender esa imputación”.
Según Oca, el problema de aquel Gobierno era pagar los sueldos en tiempo y forma y no los certificados de la obra pública. “No tengo problemas con él pero los mensajes de Diego Lüters ni los respondía porque no me desvelaban $ 7 mil de comida en Don León o los gastos de la Residencia Oficial; lo que nos generaba problemas no eran esos números”, explicó. Sí admitió que se ponía atención en evitar conflictos sociales con la Unión Obrera de la Construcción: “Eran 5 mil empleados de la UOCRA en Chubut, casi como un organismo más”.
“Mientras fui ministro la Provincia erogó $ 80 mil millones. Por obra pública se pagaron 1.400 millones, que para cualquiera es una fortuna incalculable pero hay que ponerla en contexto”, comparó.
Sin embargo advirtió que “no me enriquecí” con ese dinero que embolsó por fuera de su sueldo como funcionario público. “A esta altura no veo razonable excusarme si eran o no gastos reservados del gobernador. Yo sabía cuánto eran esos gastos y los pagaba porque estaban en el presupuesto. Pero no voy a ensayar la teoría de que no sabía”.
En su declaración ante el tribunal del Caso Revelación ayer en la Oficina Judicial de Rawson, Oca aseguró que hasta le propuso a Das Neves iniciar una discusión pública sobre el bajo sueldo de la planta política. “En aquel momento el sueldo del presidente del Banco Chubut era 5 veces el del ministro de Economía. Desde ya que eso no justifica los sobresueldos pero planteé poner blanco sobre negro”. Ese debate no ocurrió. “Yo tenía dos caminos: renunciar o denunciar. No tomé ninguno de los dos”.
En otro orden, el exfuncionario también admitió que es responsable de los pagos a las empresas de obra pública que le achaca el fiscal Marcos Nápoli. “Yo le daba la orden a Tesorería General y decidía qué debía pagarse y qué no, en eso acepto mi responsabilidad”. Pero deslizó que los trámites en Economía que comandó fueron legales, sin retornos de por medio. Y aclaró que no fue el responsable de pagos de otros organismos. Y Sin embargo, el imputado aseguró que nunca organizó una asociación ilícita. “Nunca voy a entender esa imputación”.
Según Oca, el problema de aquel Gobierno era pagar los sueldos en tiempo y forma y no los certificados de la obra pública. “No tengo problemas con él pero los mensajes de Diego Lüters ni los respondía porque no me desvelaban $ 7 mil de comida en Don León o los gastos de la Residencia Oficial; lo que nos generaba problemas no eran esos números”, explicó. Sí admitió que se ponía atención en evitar conflictos sociales con la Unión Obrera de la Construcción: “Eran 5 mil empleados de la UOCRA en Chubut, casi como un organismo más”.
“Mientras fui ministro la Provincia erogó $ 80 mil millones. Por obra pública se pagaron 1.400 millones, que para cualquiera es una fortuna incalculable pero hay que ponerla en contexto”, comparó.