La investigación por la muerte de Ernesto Porqueras en el Hospital Rural de Camarones transita la etapa preliminar, donde la fiscal del caso, Cecilia Codina, deberá evaluar los resultados de la autopsia del cuerpo y del peritaje del desfibrilador, para valorar la denuncia de la familia y determinar si existe la sospecha de un delito por parte del personal de la entidad hospitalaria.
“Lo que sabemos es que lo que ocurrió fue tremendo. Porqueras ingresó caminando y lo sacaron muerto y quemado. El relato de los testigos es dramático, se les incendió un hombre”, resaltó el abogado de la familia, en comunicación con Cadena Tiempo.
Determinar las causas que originaron el deceso y, además, la violencia institucional con respecto a la familia, fueron los dos puntos centrales que planteó el letrado. Tal como señaló: “La violencia que recibió la familia ha sido muy grave”.
Sobre la actuación del cuerpo médico en la muerte del hombre de 70 años que llegó al centro de salud con un fuerte dolor en el pecho, señaló: “No era necesario ser médico para darse cuenta que estaba sufriendo un preinfarto. Primero lo atendió una psicóloga. Cuando se descompensó, lo vio una enfermera y recién ahí llamaron a una médica que vive a una cuadra del hospital y tardó 20 minutos en llegar”.
La investigación por la muerte de Ernesto Porqueras en el Hospital Rural de Camarones transita la etapa preliminar, donde la fiscal del caso, Cecilia Codina, deberá evaluar los resultados de la autopsia del cuerpo y del peritaje del desfibrilador, para valorar la denuncia de la familia y determinar si existe la sospecha de un delito por parte del personal de la entidad hospitalaria.
“Lo que sabemos es que lo que ocurrió fue tremendo. Porqueras ingresó caminando y lo sacaron muerto y quemado. El relato de los testigos es dramático, se les incendió un hombre”, resaltó el abogado de la familia, en comunicación con Cadena Tiempo.
Determinar las causas que originaron el deceso y, además, la violencia institucional con respecto a la familia, fueron los dos puntos centrales que planteó el letrado. Tal como señaló: “La violencia que recibió la familia ha sido muy grave”.
Sobre la actuación del cuerpo médico en la muerte del hombre de 70 años que llegó al centro de salud con un fuerte dolor en el pecho, señaló: “No era necesario ser médico para darse cuenta que estaba sufriendo un preinfarto. Primero lo atendió una psicóloga. Cuando se descompensó, lo vio una enfermera y recién ahí llamaron a una médica que vive a una cuadra del hospital y tardó 20 minutos en llegar”.