Este fin de semana, vecinos autoconvocados de Comodoro Rivadavia realizaron un trekking en la zona del Faro San Jorge en defensa de las playas públicas.
En este marco, los asistentes denunciaron que la seguridad del loteo privado que se encuentra en el lugar les solicitaron identificarse y no los dejaron salir por el lugar por el que ingresaron.
Al respecto, Karina, una de las organizadoras del evento, conversó con Cadena Tiempo, y aseguró que se sintieron completamente acosados por el personal, que los persiguió por todo el sendero.
“La actividad la hicimos de manera normal, pero cuando llegamos encontramos personas de seguridad y camionetas, que nos desafiaron. Somos personas comunes y corrientes, vecinos del barrio, que queríamos hacer el trayecto que siempre hicimos”, aseguró.
En total, eran entre 35 y 40 personas que se encontraban realizando la actividad, entre los que había gente mayor y niños.
“Que hoy un señor adinerado venga y diga ‘esto es mío’, es una mentira. Según las leyes, la playa es pública. En estos senderos uno puede caminar, respirar y sentirse un rato en paz”, sentenció.
Este fin de semana, vecinos autoconvocados de Comodoro Rivadavia realizaron un trekking en la zona del Faro San Jorge en defensa de las playas públicas.
En este marco, los asistentes denunciaron que la seguridad del loteo privado que se encuentra en el lugar les solicitaron identificarse y no los dejaron salir por el lugar por el que ingresaron.
Al respecto, Karina, una de las organizadoras del evento, conversó con Cadena Tiempo, y aseguró que se sintieron completamente acosados por el personal, que los persiguió por todo el sendero.
“La actividad la hicimos de manera normal, pero cuando llegamos encontramos personas de seguridad y camionetas, que nos desafiaron. Somos personas comunes y corrientes, vecinos del barrio, que queríamos hacer el trayecto que siempre hicimos”, aseguró.
En total, eran entre 35 y 40 personas que se encontraban realizando la actividad, entre los que había gente mayor y niños.
“Que hoy un señor adinerado venga y diga ‘esto es mío’, es una mentira. Según las leyes, la playa es pública. En estos senderos uno puede caminar, respirar y sentirse un rato en paz”, sentenció.