“Veníamos pescando muy bien de orilla en la zona del paraje Zaina Yegua hacia el lago Alicurá. Con buenos piques sucesivos de truchas de buen porte. En un momento me separé unos metros del grupo y elegí una puntilla del veril marcado con piedras. Supuse que era una buena posición. Y al primer tiro, de unos 15 metros, picó. Apenas tomó, encaró para el medio del lago y me sacó casi 60 metros de reserva del reel”, relató el afortunado pescador al diario Río Negro.
Por otra parte, aprovechó para recordar que se deben respetar tanto el Reglamento de Pesca vigente, como así también todos los controles que están llevando a cabo, de manera conjunta, los guardafaunas de Neuquén y Río Negro y personal de Gendarmería Nacional.
“Veníamos pescando muy bien de orilla en la zona del paraje Zaina Yegua hacia el lago Alicurá. Con buenos piques sucesivos de truchas de buen porte. En un momento me separé unos metros del grupo y elegí una puntilla del veril marcado con piedras. Supuse que era una buena posición. Y al primer tiro, de unos 15 metros, picó. Apenas tomó, encaró para el medio del lago y me sacó casi 60 metros de reserva del reel”, relató el afortunado pescador al diario Río Negro.
Por otra parte, aprovechó para recordar que se deben respetar tanto el Reglamento de Pesca vigente, como así también todos los controles que están llevando a cabo, de manera conjunta, los guardafaunas de Neuquén y Río Negro y personal de Gendarmería Nacional.