Es de Comodoro, lo buscaron durante 28 años y apareció en Río Negro
La última vez que lo vieron fue en 1995. Desde ese año su familia inició una búsqueda que parecía conducir a ninguna parte. Un giro del destino este miércoles hizo que las cosas cambien
Un hombre se fue de su casa en Comodoro Rivadavia en 1995 y su familia nunca supo más nada de él hasta este miércoles, cuando descubrieron que estaba viviendo en General Conesa, Río Negro.
La búsqueda fue reportada hace 28 años, en Comodoro Rivadavia, y la Policía del Chubut finalmente logró localizarlo cuando parecía que era un caso perdido.
Como se puede ver en las imágenes -que fueron preservadas- el hombre se encuentra bien en Río Negro, a 775 kilómetros de donde lo habían visto por última vez.
Este señor, de buen semblante, no tuvo reservas en contarle a la Policía chubutense por qué se había ausentado todos estos años como si fuera un fantasma.
Por razones obvias, de la vida privada de esta persona, las fuentes no reprodujeron los motivos que lo llevaron a alejarse y preservaron su identidad.
En la búsqueda colaboraron los efectivos de General Conesa, quienes elaboraron de las fichas dactiloscópicas, las actas formales y con los requerimientos previstos.
El caso estaba judicializado y permanecía abierto desde hacía décadas. Las autoridades dieron a conocer las novedades a la Fiscalía en el sur de Chubut.
Ahora, quizá, pudieron cerrar una parte de la historia.
Un hombre se fue de su casa en Comodoro Rivadavia en 1995 y su familia nunca supo más nada de él hasta este miércoles, cuando descubrieron que estaba viviendo en General Conesa, Río Negro.
La búsqueda fue reportada hace 28 años, en Comodoro Rivadavia, y la Policía del Chubut finalmente logró localizarlo cuando parecía que era un caso perdido.
Como se puede ver en las imágenes -que fueron preservadas- el hombre se encuentra bien en Río Negro, a 775 kilómetros de donde lo habían visto por última vez.
Este señor, de buen semblante, no tuvo reservas en contarle a la Policía chubutense por qué se había ausentado todos estos años como si fuera un fantasma.
Por razones obvias, de la vida privada de esta persona, las fuentes no reprodujeron los motivos que lo llevaron a alejarse y preservaron su identidad.
En la búsqueda colaboraron los efectivos de General Conesa, quienes elaboraron de las fichas dactiloscópicas, las actas formales y con los requerimientos previstos.
El caso estaba judicializado y permanecía abierto desde hacía décadas. Las autoridades dieron a conocer las novedades a la Fiscalía en el sur de Chubut.
Ahora, quizá, pudieron cerrar una parte de la historia.