Por Lisandro Aguirregabiría/Redacción Jornada
Esteban Bravo, baquiano del Parque Nacional Los Alerces, residente de Villa Futalaufquen, fue uno de los primeros en combatir el fuego cuando se desató el jueves 25 de enero en la zona del río Centinela.
Hace poco filmó un video con sus caballos en el que relata el drama que está viviendo mientras el fuego avanza. “Me salió del alma, miraba la montaña, veía lo que se había quemado y me quebré. Este año lo tengo perdido y me voy a Trevelin donde un señor me prestó un lugar para llevar mis caballos”, contó a Jornada Web.
Bravo recorre a caballo los senderos del Parque adonde solo unos pocos saben llegar. Hace tres años que hace cabalgatas para los turistas en las cabañas "Rincón del Sol", cerca de la cascada Irigoyen, en la ladera del lago.
EL INICIO DEL FUEGO
Bravo y los demás regresaron a sus cabañas sin llegar a imaginar con lo que se encontrarían después. “El bosque es muy cerrado, la rosa mosqueta hace que a la noche y el día sea difícil encontrar una senda y regresar. Cada uno regresó a su casa y al otro día se había descontrolado. Hubo viento muy fuerte que iba avanzando”.
No hay muchas formas de llegar al lugar donde comenzó todo. Es difícil que alguien se arriesgue a transitar los senderos a la vista de todo el mundo. Para entrar y salir sin ser descubierto hay que conocer bien el lugar.
En todo este tiempo que lleva haciendo cabalgatas, el hombre jamás vio a nadie sospechoso. “Sería el primero en denunciar si veo en el bosque a alguien sospechoso; ando mañana y tarde con turistas en senadas de cabalgatas y no he encontrado gente de afuera. Si se meten significa que son duchos en la montaña. Nunca vi nada”.
Cruz Cárdenas, quien ocupa tierras en el Parque, es el principal apuntado por el gobernador de Chubut, Ignacio Torres, como el hombre que estaría detrás de los incendios.
“Yo descarto que sea Cruz Cárdenas. Cuando inició el fuego hacia el norte el papá, que tiene animales, estaba ahí en ese instante. No creo que el pibe sea tan desubicado de hacer un fuego sabiendo que su papá y los animales están en la montaña”, sostuvo.
El baquiano reconoció que “no lo conozco a Cruz Cárdenas”, pero no cree que la gente que está con él pudiera haber iniciado el fuego. Más bien se inclina a pensar que podría haber sido “gente de afuera”, conjeturó.
Mientras prepara las cosas para irse rumbo a Trevelin, donde un conocido le ofreció un lugar para seguir con sus cabalgatas, el hombre no deja de reconocer la "heroica" labor de los brigadistas que luchan contra el fuego y de toda la gente que se acercó a ayudarlo.
Bravo, con sus caballos, tampoco pierde la esperanza de que la Justicia Federal esta vez encuentre a los responsables.
“La Justicia Federal ya vino, eso es perfecto que actué en tiempo y forma. El año pasado llegaron un mes y medio después, pero era muy tarde; los vi con perros preparados y era muy tarde, ¿qué van a encontrar? Este año se están moviendo un poquito más, esperemos que lleguen a algo positivo”, concluyó.
Por Lisandro Aguirregabiría/Redacción Jornada
Esteban Bravo, baquiano del Parque Nacional Los Alerces, residente de Villa Futalaufquen, fue uno de los primeros en combatir el fuego cuando se desató el jueves 25 de enero en la zona del río Centinela.
Hace poco filmó un video con sus caballos en el que relata el drama que está viviendo mientras el fuego avanza. “Me salió del alma, miraba la montaña, veía lo que se había quemado y me quebré. Este año lo tengo perdido y me voy a Trevelin donde un señor me prestó un lugar para llevar mis caballos”, contó a Jornada Web.
Bravo recorre a caballo los senderos del Parque adonde solo unos pocos saben llegar. Hace tres años que hace cabalgatas para los turistas en las cabañas "Rincón del Sol", cerca de la cascada Irigoyen, en la ladera del lago.
EL INICIO DEL FUEGO
Bravo y los demás regresaron a sus cabañas sin llegar a imaginar con lo que se encontrarían después. “El bosque es muy cerrado, la rosa mosqueta hace que a la noche y el día sea difícil encontrar una senda y regresar. Cada uno regresó a su casa y al otro día se había descontrolado. Hubo viento muy fuerte que iba avanzando”.
No hay muchas formas de llegar al lugar donde comenzó todo. Es difícil que alguien se arriesgue a transitar los senderos a la vista de todo el mundo. Para entrar y salir sin ser descubierto hay que conocer bien el lugar.
En todo este tiempo que lleva haciendo cabalgatas, el hombre jamás vio a nadie sospechoso. “Sería el primero en denunciar si veo en el bosque a alguien sospechoso; ando mañana y tarde con turistas en senadas de cabalgatas y no he encontrado gente de afuera. Si se meten significa que son duchos en la montaña. Nunca vi nada”.
Cruz Cárdenas, quien ocupa tierras en el Parque, es el principal apuntado por el gobernador de Chubut, Ignacio Torres, como el hombre que estaría detrás de los incendios.
“Yo descarto que sea Cruz Cárdenas. Cuando inició el fuego hacia el norte el papá, que tiene animales, estaba ahí en ese instante. No creo que el pibe sea tan desubicado de hacer un fuego sabiendo que su papá y los animales están en la montaña”, sostuvo.
El baquiano reconoció que “no lo conozco a Cruz Cárdenas”, pero no cree que la gente que está con él pudiera haber iniciado el fuego. Más bien se inclina a pensar que podría haber sido “gente de afuera”, conjeturó.
Mientras prepara las cosas para irse rumbo a Trevelin, donde un conocido le ofreció un lugar para seguir con sus cabalgatas, el hombre no deja de reconocer la "heroica" labor de los brigadistas que luchan contra el fuego y de toda la gente que se acercó a ayudarlo.
Bravo, con sus caballos, tampoco pierde la esperanza de que la Justicia Federal esta vez encuentre a los responsables.
“La Justicia Federal ya vino, eso es perfecto que actué en tiempo y forma. El año pasado llegaron un mes y medio después, pero era muy tarde; los vi con perros preparados y era muy tarde, ¿qué van a encontrar? Este año se están moviendo un poquito más, esperemos que lleguen a algo positivo”, concluyó.