"Lo que sucede muchas veces debido a los incendios es la formación de lluvia ácida. Esta lluvia ácida es causada por dos compuestos químicos que reaccionan en la atmósfera para formar ácido nítrico y ácido sulfúrico. Estos ácidos terminan reduciendo drásticamente el pH del agua", explicó la química Ana Paula Bohm, que hizo el estudio para el canal de televisión local "NSC".
Florianópolis, capital del estado de Santa Catarina y polo del turismo de verano del Mercado Común del Sur (Mercosur), registró durante la madrugada una cantidad de dióxido de carbono cinco veces superior al promedio brasileño, según el análisis de la experta.
La lluvia negra había comenzado a caer en el estado de Rio Grande do Sul (sur) desde el miércoles, pero el viernes por la noche llegó a su capital, Porto Alegre.
"La lluvia caída desde el jueves traía agua de pésima calidad para el consumo humano", señaló un informe del Instituto de Investigaciones Hídricas de la Universidad Federal de Rio Grande do Sul.
Ante esto, la Defensa Civil lanzó una serie de recomendaciones a la población que sufre problemas respiratorios.
En San Pablo, la mayor urbe sudamericana, la calidad del aire fue la peor del mundo durante algunos días, según mediciones internacionales, a raíz de las consecuencias de los incendios forestales y en campos.
"Lo que sucede muchas veces debido a los incendios es la formación de lluvia ácida. Esta lluvia ácida es causada por dos compuestos químicos que reaccionan en la atmósfera para formar ácido nítrico y ácido sulfúrico. Estos ácidos terminan reduciendo drásticamente el pH del agua", explicó la química Ana Paula Bohm, que hizo el estudio para el canal de televisión local "NSC".
Florianópolis, capital del estado de Santa Catarina y polo del turismo de verano del Mercado Común del Sur (Mercosur), registró durante la madrugada una cantidad de dióxido de carbono cinco veces superior al promedio brasileño, según el análisis de la experta.
La lluvia negra había comenzado a caer en el estado de Rio Grande do Sul (sur) desde el miércoles, pero el viernes por la noche llegó a su capital, Porto Alegre.
"La lluvia caída desde el jueves traía agua de pésima calidad para el consumo humano", señaló un informe del Instituto de Investigaciones Hídricas de la Universidad Federal de Rio Grande do Sul.
Ante esto, la Defensa Civil lanzó una serie de recomendaciones a la población que sufre problemas respiratorios.
En San Pablo, la mayor urbe sudamericana, la calidad del aire fue la peor del mundo durante algunos días, según mediciones internacionales, a raíz de las consecuencias de los incendios forestales y en campos.