El fiscal Juan Carlos Caperochipi reconoce la gravedad del caso de robo agravado por ser cometido en poblado y en banda ocurrido en Rada Tilly con la fuga y posterior persecución. Y tras una audiencia de revisión de la prisión preventiva a pedido de la defensa de uno de los acusados, consideró que, debido a las situaciones derivadas del hecho, debe extenderse la privación de libertad de los imputados. “Ya estaban detenidas por los hechos relativos a la huída de Comodoro y esa persecución que realizó la Policía de la Provincia del Chubut”, dijo Caperochipi a Jornada. Y diferenció la imputación de los cargos por el saqueo a una vivienda en Rada Tilly que derivó en la detención de las seis personas involucradas.
“Se hizo una audiencia de revisión de la prisión preventiva de uno de ellos en donde los jueces interpretaron que se debía mantener la prisión preventiva, porque efectivamente visualizan como ya lo hizo el doctor Caviglia que se cometió un hecho de gravedad”.
Y remarcó que, en términos jurídicos y técnicos, se trató de un robo a una vivienda, pero traducido en el impacto que produce en una familia y en una comunidad, que un grupo de seis personas foráneas, por lo menos cinco de ellas; lleguen a bordo de dos vehículos, saqueen la vivienda. Producen toda una serie de deterioros y desórdenes en esa finca; se llevan muchísimos elementos, entre ellos un vehículo de alta gama que todavía no fue encontrado”, describió el fiscal.
“Posteriormente huyen a la ciudad de Trelew, donde tienen su asiento y su vida, y provocan una persecución realmente cinematográfica, donde estoy totalmente de acuerdo con lo que han manifestado las autoridades que intervinieron, pusieron en riesgo la vida de terceros y además obligaron a la Policía a hacer esfuerzos riesgosos para poder detenerlos”
Caperochipi plantea que el hecho ha tenido gravedad en toda su extensión, incluída la última parte, que es la detención y que ésta circunstancia “no puede ser discutida”. Indicó que la prisión preventiva se extenderá por el lapso de dos meses y al término de este lapso, se deberá evaluar la calidad de la misma. “Considero que van a tener que continuar presos. El hecho es grave porque también ocurre en una ciudad que por sus características es tranquila; la gente no está acostumbrada a estos hechos, aunque ya hubo algunos episodios en Rada Tilly. Digamos que los vecinos viven en determinada armonía y por eso, un hecho de estos es conmocionante”.
Expresó que por seis meses se intentará expandir la investigación, recuperar elementos que aún están pendientes y sumar testimonios en función de que los hechos se suceden en tres ciudades. “Coincido con lo que decía uno de los jueces de la revisión, el doctor Novarino, en cuanto a que a la prueba debemos buscarlas en una amplia extensión del territorio por el transitar del vehículo por tres ciudades”.
El experimentado fiscal comodorense planteó el objetivo de determinar la autoría y la materialidad. “Es decir buscar quiénes fueron y lo que hicieron. Sabemos que robaron, están identificados. Habrá que perfeccionar un poco el tema de los roles que cumplieron uno y otro, en persona. Y a esta altura no nos cabe duda de que ha habido un accionar donde hubo una inteligencia previa, una organización y una distribución de roles. No fue un delito al azar”, precisó.
Caperochipi consideró como un agravante, la huída posterior y todas las situaciones que derivaron de la misma incluyendo la afectación a terceros. “Esto tiene dos formas de ser vistos penalmente. Una, por los delitos nuevos que cometieron en esa huída, que tienen que ver con la resistencia a la autoridad y las lesiones sufridas por una persona menor de edad en el transitar de los vehículos a más de 200 kilómetros. O sea, se generaron delitos nuevos a partir de esa persecución, que son los que se están investigando”. Y admitió que los hechos derivados de la huída fundamentan la continuidad de la prisión preventiva “porque evidentemente no tienen ninguna intención estas personas de someterse al procedimiento penal. Por lo que costó detenerlos, si quedaran en libertad, directamente entenderíamos que no los vamos a poder tener voluntariamente sometidos al proceso”, fundamentó.
En cuanto al pedido de revisión de la Preventiva formulado por uno de los defensores de las partes, se argumentó la falta de antecedentes de uno de los seis imputados. “El pedido se basó en la ausencia de antecedentes penales y atacó obviamente la sentencia del doctor Caviglia. También, aunque no estaba suficientemente fundada, se planteó que no se había analizado por separado la cuestión de éste imputado sin antecedentes en relación a los demás imputados ya que varios de ellos sí tenían antecedentes penales por hechos similares”.
“En definitiva –agregó- el Tribunal que revisó esta prisión preventiva en el día de hoy entendió que existía suficiente fundamentación en los dos peligros procesales que se exigen para que exista una prisión preventiva. El peligro de fuga y el peligro de entorpecimiento y sobre todo poniendo énfasis en que a pesar de que estamos en el inicio de la investigación, todo indica que el imputado no puede deslindarse de lo ocurrido porque era una de las personas que manejaba uno de los vehículos que huyeron”.
El fiscal Juan Carlos Caperochipi reconoce la gravedad del caso de robo agravado por ser cometido en poblado y en banda ocurrido en Rada Tilly con la fuga y posterior persecución. Y tras una audiencia de revisión de la prisión preventiva a pedido de la defensa de uno de los acusados, consideró que, debido a las situaciones derivadas del hecho, debe extenderse la privación de libertad de los imputados. “Ya estaban detenidas por los hechos relativos a la huída de Comodoro y esa persecución que realizó la Policía de la Provincia del Chubut”, dijo Caperochipi a Jornada. Y diferenció la imputación de los cargos por el saqueo a una vivienda en Rada Tilly que derivó en la detención de las seis personas involucradas.
“Se hizo una audiencia de revisión de la prisión preventiva de uno de ellos en donde los jueces interpretaron que se debía mantener la prisión preventiva, porque efectivamente visualizan como ya lo hizo el doctor Caviglia que se cometió un hecho de gravedad”.
Y remarcó que, en términos jurídicos y técnicos, se trató de un robo a una vivienda, pero traducido en el impacto que produce en una familia y en una comunidad, que un grupo de seis personas foráneas, por lo menos cinco de ellas; lleguen a bordo de dos vehículos, saqueen la vivienda. Producen toda una serie de deterioros y desórdenes en esa finca; se llevan muchísimos elementos, entre ellos un vehículo de alta gama que todavía no fue encontrado”, describió el fiscal.
“Posteriormente huyen a la ciudad de Trelew, donde tienen su asiento y su vida, y provocan una persecución realmente cinematográfica, donde estoy totalmente de acuerdo con lo que han manifestado las autoridades que intervinieron, pusieron en riesgo la vida de terceros y además obligaron a la Policía a hacer esfuerzos riesgosos para poder detenerlos”
Caperochipi plantea que el hecho ha tenido gravedad en toda su extensión, incluída la última parte, que es la detención y que ésta circunstancia “no puede ser discutida”. Indicó que la prisión preventiva se extenderá por el lapso de dos meses y al término de este lapso, se deberá evaluar la calidad de la misma. “Considero que van a tener que continuar presos. El hecho es grave porque también ocurre en una ciudad que por sus características es tranquila; la gente no está acostumbrada a estos hechos, aunque ya hubo algunos episodios en Rada Tilly. Digamos que los vecinos viven en determinada armonía y por eso, un hecho de estos es conmocionante”.
Expresó que por seis meses se intentará expandir la investigación, recuperar elementos que aún están pendientes y sumar testimonios en función de que los hechos se suceden en tres ciudades. “Coincido con lo que decía uno de los jueces de la revisión, el doctor Novarino, en cuanto a que a la prueba debemos buscarlas en una amplia extensión del territorio por el transitar del vehículo por tres ciudades”.
El experimentado fiscal comodorense planteó el objetivo de determinar la autoría y la materialidad. “Es decir buscar quiénes fueron y lo que hicieron. Sabemos que robaron, están identificados. Habrá que perfeccionar un poco el tema de los roles que cumplieron uno y otro, en persona. Y a esta altura no nos cabe duda de que ha habido un accionar donde hubo una inteligencia previa, una organización y una distribución de roles. No fue un delito al azar”, precisó.
Caperochipi consideró como un agravante, la huída posterior y todas las situaciones que derivaron de la misma incluyendo la afectación a terceros. “Esto tiene dos formas de ser vistos penalmente. Una, por los delitos nuevos que cometieron en esa huída, que tienen que ver con la resistencia a la autoridad y las lesiones sufridas por una persona menor de edad en el transitar de los vehículos a más de 200 kilómetros. O sea, se generaron delitos nuevos a partir de esa persecución, que son los que se están investigando”. Y admitió que los hechos derivados de la huída fundamentan la continuidad de la prisión preventiva “porque evidentemente no tienen ninguna intención estas personas de someterse al procedimiento penal. Por lo que costó detenerlos, si quedaran en libertad, directamente entenderíamos que no los vamos a poder tener voluntariamente sometidos al proceso”, fundamentó.
En cuanto al pedido de revisión de la Preventiva formulado por uno de los defensores de las partes, se argumentó la falta de antecedentes de uno de los seis imputados. “El pedido se basó en la ausencia de antecedentes penales y atacó obviamente la sentencia del doctor Caviglia. También, aunque no estaba suficientemente fundada, se planteó que no se había analizado por separado la cuestión de éste imputado sin antecedentes en relación a los demás imputados ya que varios de ellos sí tenían antecedentes penales por hechos similares”.
“En definitiva –agregó- el Tribunal que revisó esta prisión preventiva en el día de hoy entendió que existía suficiente fundamentación en los dos peligros procesales que se exigen para que exista una prisión preventiva. El peligro de fuga y el peligro de entorpecimiento y sobre todo poniendo énfasis en que a pesar de que estamos en el inicio de la investigación, todo indica que el imputado no puede deslindarse de lo ocurrido porque era una de las personas que manejaba uno de los vehículos que huyeron”.