Por Rolando Tobarez/Redacción Jornada
La Corte Suprema de Justicia de la Nación declaró inadmisible un recurso extraordinario de la defensa y confirmó la condena contra Bárbara María de Cristófano, que cumple una sentencia a 16 años de prisión por el abuso agravado de su hijo menor, en un resonante caso ocurrido en Puerto Pirámides.
La mujer fue hallada culpable por abuso sexual con acceso carnal gravemente ultrajante agravado por el vínculo y la situación de convivencia, en carácter de autora y partícipe primario. La víctima sufrió el delito entre sus 5 y sus 9 años de edad.
El otro condenado del mismo expediente fue el exconcejal Julián Morón, a 14 años, su pareja de entonces. La causa tenía sentencia confirmada por la Cámara Penal de Puerto Madryn en octubre de 2019.
El episodio se había hecho público cuando el padre de la víctima, en noviembre de 2016, denunció que su hijo había sido abusado por su madre y su concubinoa. En su momento, el Ministerio Público Fiscal de Puerto Madryn había pedido sobreseer a los imputados. Por eso, al juicio oral llegaron en soledad los querellantesAlfredo Pérez Galimberti y Federico Ruffa, abogados de Trelew.
Los defensores fueron Beatriz Patricia Anzoategui y Gustavo Topic. Al fallo lo firmaron los ministros de la Corte Horacio Rosatti, Ricardo Lorenzetti y Carlos Rosenkrantz.
Por Rolando Tobarez/Redacción Jornada
La Corte Suprema de Justicia de la Nación declaró inadmisible un recurso extraordinario de la defensa y confirmó la condena contra Bárbara María de Cristófano, que cumple una sentencia a 16 años de prisión por el abuso agravado de su hijo menor, en un resonante caso ocurrido en Puerto Pirámides.
La mujer fue hallada culpable por abuso sexual con acceso carnal gravemente ultrajante agravado por el vínculo y la situación de convivencia, en carácter de autora y partícipe primario. La víctima sufrió el delito entre sus 5 y sus 9 años de edad.
El otro condenado del mismo expediente fue el exconcejal Julián Morón, a 14 años, su pareja de entonces. La causa tenía sentencia confirmada por la Cámara Penal de Puerto Madryn en octubre de 2019.
El episodio se había hecho público cuando el padre de la víctima, en noviembre de 2016, denunció que su hijo había sido abusado por su madre y su concubinoa. En su momento, el Ministerio Público Fiscal de Puerto Madryn había pedido sobreseer a los imputados. Por eso, al juicio oral llegaron en soledad los querellantesAlfredo Pérez Galimberti y Federico Ruffa, abogados de Trelew.
Los defensores fueron Beatriz Patricia Anzoategui y Gustavo Topic. Al fallo lo firmaron los ministros de la Corte Horacio Rosatti, Ricardo Lorenzetti y Carlos Rosenkrantz.