Newell's aclaró que no sancionó a los chicos que se sacaron una foto con un jugador de Central

El club leproso suspendió a seis niños de 9 años y les quitó la beca tras una foto con Ignacio Malcorra, del Canalla. Hablaron de "respeto al escudo".

03 JUN 2025 - 16:57 | Actualizado 04 JUN 2025 - 0:55

Newell’s Old Boys desmintió este martesque haya sancionado a un grupo de seis niños de 9 años, que se habían sacado una foto con el mediocampista de Rosario Central Ignacio Malcorra.

El club adjudicó que la situación se había tratado internamente, junto con los padres de los jóvenes, y que la institución "no ha realizado ninguna sanción disciplinaria formal" hacia los chicos.

La historia fue contada por Carlos Panciroli, formador de la "Lepra", quien comentó que los niños habían perdido sus becas, y que se trataba de una línea de conducta de "respeto por los colores".

En las últimas horas se convirtió en noticia la historia de un grupo de seis niños de 9 años, quienes vestían la ropa de "Ñuls", club al que representan en las categorías infantiles del fútbol rosarino, y se tomaron una foto con el mediocampista del "Canalla"Ignacio Malcorra.

Sobre esta situación, y con la polémica que generaron las declaraciones del formador Carlos Panciroli, el club rosarino sacó un comunicado en sus redes sociales, respondiendo a la "repercusión pública" que obtuvo el tema mencionado.

El texto comienza informando que el hecho tuvo lugar hace más de 50 días y "fue abordado internamente con total responsabilidad", con dialogo "abierto y respetuoso" entre la comisión directiva del club y las familias involucrados, haciendo énfasis en priorizar el bienestar de los nenes.

En respuesta a la sanción mencionada, desde el club se la catalogó de una medida "para preservar su integridad emocional ante posibles situaciones de hostigamiento", decidiendo pausar temporalmente la participación de los chicos en los entrenamientos, pero aclarando que no se realizó ninguna sanción disciplinaria formal, y que los menores siguen siendo parte del club.

Además, la institución informó que se mantendrá una nueva reunión con las familias en la semana entrante, y remarcó que trabaja cada día por "un fútbol infantil sano, formativo y respetuoso", en el que "se trata de acompañar, cuidar y ayudar a crecer a las personas".

“Se les quitó la beca, pero todo fue consensuado con los padres que estuvieron de acuerdo con la medida”, aseguró Carlos Panciroli, coordinador del predio rojinegro, aunque algunos progenitores contradijeron esa versión.

Según el exarquero, el castigo fue producto de una reunión con las doce familias, en la que se acordó sentar un precedente: “Hay que respetar el escudo y la camiseta. A lo mejor nos equivocamos, pero no podemos permitir que se repitan estos errores”.

Desde Newell’s insistieron en que la responsabilidad recayó en los adultos, ya que los chicos actuaron de forma espontánea al ver a un futbolista profesional. Sin embargo, la determinación generó revuelo y diversas opiniones en la comunidad rosarina, sobre todo porque, como reconoció el propio Panciroli, “los chicos fueron los perjudicados en todo esto”.

La institución justificó la decisión en nombre de la “vida cotidiana del club” y el “respeto a los colores”, en una ciudad donde la rivalidad futbolística muchas veces excede los límites deportivos.

En diálogo con Cadena 3, Juan Álvarez, encargado de la Escuela Malvinas Argentinas, aclaró que la medida no se trató de una sanción formal, sino de una prevención por seguridad.

“Recibimos amenazas, incluso hubo una manifestación. Hubo un martes en el que los demás chicos no pudieron entrenar”, reveló.

Aunque desde el club buscan transmitir que se trató de una medida acordada, el caso reabrió una vieja discusión: ¿hasta dónde llega el fanatismo en un fútbol que se enorgullece de decir que “somos rivales, no enemigos”.

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03 JUN 2025 - 16:57

Newell’s Old Boys desmintió este martesque haya sancionado a un grupo de seis niños de 9 años, que se habían sacado una foto con el mediocampista de Rosario Central Ignacio Malcorra.

El club adjudicó que la situación se había tratado internamente, junto con los padres de los jóvenes, y que la institución "no ha realizado ninguna sanción disciplinaria formal" hacia los chicos.

La historia fue contada por Carlos Panciroli, formador de la "Lepra", quien comentó que los niños habían perdido sus becas, y que se trataba de una línea de conducta de "respeto por los colores".

En las últimas horas se convirtió en noticia la historia de un grupo de seis niños de 9 años, quienes vestían la ropa de "Ñuls", club al que representan en las categorías infantiles del fútbol rosarino, y se tomaron una foto con el mediocampista del "Canalla"Ignacio Malcorra.

Sobre esta situación, y con la polémica que generaron las declaraciones del formador Carlos Panciroli, el club rosarino sacó un comunicado en sus redes sociales, respondiendo a la "repercusión pública" que obtuvo el tema mencionado.

El texto comienza informando que el hecho tuvo lugar hace más de 50 días y "fue abordado internamente con total responsabilidad", con dialogo "abierto y respetuoso" entre la comisión directiva del club y las familias involucrados, haciendo énfasis en priorizar el bienestar de los nenes.

En respuesta a la sanción mencionada, desde el club se la catalogó de una medida "para preservar su integridad emocional ante posibles situaciones de hostigamiento", decidiendo pausar temporalmente la participación de los chicos en los entrenamientos, pero aclarando que no se realizó ninguna sanción disciplinaria formal, y que los menores siguen siendo parte del club.

Además, la institución informó que se mantendrá una nueva reunión con las familias en la semana entrante, y remarcó que trabaja cada día por "un fútbol infantil sano, formativo y respetuoso", en el que "se trata de acompañar, cuidar y ayudar a crecer a las personas".

“Se les quitó la beca, pero todo fue consensuado con los padres que estuvieron de acuerdo con la medida”, aseguró Carlos Panciroli, coordinador del predio rojinegro, aunque algunos progenitores contradijeron esa versión.

Según el exarquero, el castigo fue producto de una reunión con las doce familias, en la que se acordó sentar un precedente: “Hay que respetar el escudo y la camiseta. A lo mejor nos equivocamos, pero no podemos permitir que se repitan estos errores”.

Desde Newell’s insistieron en que la responsabilidad recayó en los adultos, ya que los chicos actuaron de forma espontánea al ver a un futbolista profesional. Sin embargo, la determinación generó revuelo y diversas opiniones en la comunidad rosarina, sobre todo porque, como reconoció el propio Panciroli, “los chicos fueron los perjudicados en todo esto”.

La institución justificó la decisión en nombre de la “vida cotidiana del club” y el “respeto a los colores”, en una ciudad donde la rivalidad futbolística muchas veces excede los límites deportivos.

En diálogo con Cadena 3, Juan Álvarez, encargado de la Escuela Malvinas Argentinas, aclaró que la medida no se trató de una sanción formal, sino de una prevención por seguridad.

“Recibimos amenazas, incluso hubo una manifestación. Hubo un martes en el que los demás chicos no pudieron entrenar”, reveló.

Aunque desde el club buscan transmitir que se trató de una medida acordada, el caso reabrió una vieja discusión: ¿hasta dónde llega el fanatismo en un fútbol que se enorgullece de decir que “somos rivales, no enemigos”.