El conflicto en la pesca sigue vigente y sin poder encontrar alguna vía de diálogo o gestión que termine acercando las posturas de trabajadores y empresarios. El estado nacional sigue ausente bajo la premisa que se trata de un conflicto de privados que va afectando a los diferentes estamentos de la sociedad y la economía de Puerto Madryn.
El intendente Gustavo Sastre habló sobre la continuidad del conflicto y reiteró que “hay posturas inflexibles” precisando que las mismas están “más que nada desde el sector empresarial”.
El mandatario municipal pidió al empresariado que produzca un cambio en su posición actual porque “va a tener que hacer una revisión y tratar de aceptar algunas propuestas que se han hecho en su momento en la Secretaría de Trabajo” añadiendo que tendrán que “poner buena voluntad y ver, más allá de los números que puedan y quieran explicar, la buena predisposición de los trabajadores”.
El intendente madrynense recordó a la comunidad y los empresarios que “los trabajadores no están pidiendo una recomposición salarial ni sentarse a discutir paritaria, están simplemente pidiendo que se la respete el sueldo por el cual venían trabajando toda la temporada anterior”.
Una semana atrás, Sastre declaró que veía posibilidades que el conflicto se pudiera destrabar y que la actividad comenzase a realizarse en forma habitual. Ingresado en el mes de julio la situación sigue igual aunque el mandatario municipal explicó que “a diferencia de días anteriores hay algunos gremios que han avanzado en firmar acuerdos con el sector empresarial. Eso, por un lado, es positivo”.
En contraposición, reconoció que “falta la masa más grande de trabajadores que son los marineros que están pidiendo que se les respete sus salarios y el convenio colectivo que tienen vigente”.
El jefe comunal pidió a los miembros de la Secretaría de Trabajo y al gobierno nacional que tengan una actitud más activa en el conflicto porque “tiene que tomar el toro por las astas y poner punto final y marcar cuál es el camino para destrabar este conflicto, porque si no hay acuerdo entre las partes, alguien tiene que intervenir sino queda absolutamente paralizado”.
El conflicto en la pesca sigue vigente y sin poder encontrar alguna vía de diálogo o gestión que termine acercando las posturas de trabajadores y empresarios. El estado nacional sigue ausente bajo la premisa que se trata de un conflicto de privados que va afectando a los diferentes estamentos de la sociedad y la economía de Puerto Madryn.
El intendente Gustavo Sastre habló sobre la continuidad del conflicto y reiteró que “hay posturas inflexibles” precisando que las mismas están “más que nada desde el sector empresarial”.
El mandatario municipal pidió al empresariado que produzca un cambio en su posición actual porque “va a tener que hacer una revisión y tratar de aceptar algunas propuestas que se han hecho en su momento en la Secretaría de Trabajo” añadiendo que tendrán que “poner buena voluntad y ver, más allá de los números que puedan y quieran explicar, la buena predisposición de los trabajadores”.
El intendente madrynense recordó a la comunidad y los empresarios que “los trabajadores no están pidiendo una recomposición salarial ni sentarse a discutir paritaria, están simplemente pidiendo que se la respete el sueldo por el cual venían trabajando toda la temporada anterior”.
Una semana atrás, Sastre declaró que veía posibilidades que el conflicto se pudiera destrabar y que la actividad comenzase a realizarse en forma habitual. Ingresado en el mes de julio la situación sigue igual aunque el mandatario municipal explicó que “a diferencia de días anteriores hay algunos gremios que han avanzado en firmar acuerdos con el sector empresarial. Eso, por un lado, es positivo”.
En contraposición, reconoció que “falta la masa más grande de trabajadores que son los marineros que están pidiendo que se les respete sus salarios y el convenio colectivo que tienen vigente”.
El jefe comunal pidió a los miembros de la Secretaría de Trabajo y al gobierno nacional que tengan una actitud más activa en el conflicto porque “tiene que tomar el toro por las astas y poner punto final y marcar cuál es el camino para destrabar este conflicto, porque si no hay acuerdo entre las partes, alguien tiene que intervenir sino queda absolutamente paralizado”.