Un cardiólogo que opera en Trelew, a la cabeza de un transplante pionero

Marcelo Nahín dirigió el primer transplante de corazón en un hospital público de la provincia de Buenos Aires.

03 AGO 2012 - 21:58 | Actualizado

Hace apenas un mes, el 3 de julio, se realizó en el Hospital de Alta Complejidad en Red El Cruce, de Florencio Varela, el primer trasplante de corazón en la provincia de Buenos Aires. El equipo quirúrgico que intervino en el implante del órgano fue dirigido por el doctor Marcelo Nahín, jefe del Servicio de Cirugía Cardiovascular del Instituto de Cardiología “Pueblo de Luis”, de Trelew. El coordinador del trasplante fue el doctor Sergio Perrone, de renombre nacional y encargado del operativo del realizado a Roberto Sánchez, “Sandro”. La exitosa operación duró cuatro horas y el receptor fue un joven de 38 años afectado de una miocardiopatía chagásica terminal, el cual al segundo día ya pudo deambular.
Por tratarse de un hospital público, el hecho tuvo gran repercusión a nivel gubernamental y medios nacionales. El paciente y los profesionales intervinientes fueron visitados y felicitados personalmente por los ministros de Acción Social y de Salud de la Nación, Alicia Kirchner y Juan Manzur, respectivamente.
El doctor Nahín viene desde hace casi 5 años realizando cirugías cardiovasculares, algunas de ellas muy complejas, en el Instituto “Pueblo de Luis” con excelentes resultados.
“Desde hacía 15 dias el paciente, de 38 años, con una miocardiopatía chagásica terminal, estaba internado en el hospital en emergencia nacional de transplante. Eso significa que si aparecía un donante compatible, la prioridad en la lista de espera la tenía este paciente, frente a todos los pacientes en espera del país”, explicó Nahín.
“El día lunes 2 de julio a las 22 desde el INCUCAI se comunican con nuestra cardióloga coordinadora de trasplante, la doctora Vanesa Gregorieti, avisándole que había un posible donante de órganos en el Hospital Churruca de la ciudad de Buenos Aires. La doctora evalúa al donante, acepta el órgano y comienza el operativo de trasplante: se arman dos equipos quirúrgicos completos y se programa la ablación para las 3 de la madrugada”, agregó el profesional.
“La ablación comenzó a las 5 AM y, en ese momento , pasamos a quirófano al paciente receptor. Cuando llega al quirófano,  aproximadamente a las 7, el equipo de ablación con el corazón donado, entregan el mismo al equipo de implante que realiza lo que se llama cirugía de banco. O sea revisan el corazón donado, recortan excedentes de tejido y preparan las aurículas para ser suturadas al corazón receptor”, detalló.
Más allá de la frialdad de la ciencia, Nahín sostuvo: “Es un momento muy emocionante y a la vez increíble, que este corazón que hace apenas 60 minutos latía en otro ser humano, con muerte clínica por daño neurológico irreversible, ahora comienza a latir y dar vida a otro ser humano, que tiene el cerebro intacto y que tenía su corazón muy enfermo”.
La cirugía término a las 11, explicó Nahín. “Ambos equipos llevábamos casi 30 horas sin dormir pero en ese momento no sentís ningún tipo de cansancio, solo una alegría enorme por la tarea realizada”.
Luego de la operación, el paciente fue trasladado a la sala de recuperación cardiovascular, “donde evolucionó muy bien. Hacia la tarde se lo extubó y ya pudo conversar con sus familiares. Al segundo día se lo pasó a una habitación intermedia y comenzó a deambular”, concluyó el médico. #

03 AGO 2012 - 21:58

Hace apenas un mes, el 3 de julio, se realizó en el Hospital de Alta Complejidad en Red El Cruce, de Florencio Varela, el primer trasplante de corazón en la provincia de Buenos Aires. El equipo quirúrgico que intervino en el implante del órgano fue dirigido por el doctor Marcelo Nahín, jefe del Servicio de Cirugía Cardiovascular del Instituto de Cardiología “Pueblo de Luis”, de Trelew. El coordinador del trasplante fue el doctor Sergio Perrone, de renombre nacional y encargado del operativo del realizado a Roberto Sánchez, “Sandro”. La exitosa operación duró cuatro horas y el receptor fue un joven de 38 años afectado de una miocardiopatía chagásica terminal, el cual al segundo día ya pudo deambular.
Por tratarse de un hospital público, el hecho tuvo gran repercusión a nivel gubernamental y medios nacionales. El paciente y los profesionales intervinientes fueron visitados y felicitados personalmente por los ministros de Acción Social y de Salud de la Nación, Alicia Kirchner y Juan Manzur, respectivamente.
El doctor Nahín viene desde hace casi 5 años realizando cirugías cardiovasculares, algunas de ellas muy complejas, en el Instituto “Pueblo de Luis” con excelentes resultados.
“Desde hacía 15 dias el paciente, de 38 años, con una miocardiopatía chagásica terminal, estaba internado en el hospital en emergencia nacional de transplante. Eso significa que si aparecía un donante compatible, la prioridad en la lista de espera la tenía este paciente, frente a todos los pacientes en espera del país”, explicó Nahín.
“El día lunes 2 de julio a las 22 desde el INCUCAI se comunican con nuestra cardióloga coordinadora de trasplante, la doctora Vanesa Gregorieti, avisándole que había un posible donante de órganos en el Hospital Churruca de la ciudad de Buenos Aires. La doctora evalúa al donante, acepta el órgano y comienza el operativo de trasplante: se arman dos equipos quirúrgicos completos y se programa la ablación para las 3 de la madrugada”, agregó el profesional.
“La ablación comenzó a las 5 AM y, en ese momento , pasamos a quirófano al paciente receptor. Cuando llega al quirófano,  aproximadamente a las 7, el equipo de ablación con el corazón donado, entregan el mismo al equipo de implante que realiza lo que se llama cirugía de banco. O sea revisan el corazón donado, recortan excedentes de tejido y preparan las aurículas para ser suturadas al corazón receptor”, detalló.
Más allá de la frialdad de la ciencia, Nahín sostuvo: “Es un momento muy emocionante y a la vez increíble, que este corazón que hace apenas 60 minutos latía en otro ser humano, con muerte clínica por daño neurológico irreversible, ahora comienza a latir y dar vida a otro ser humano, que tiene el cerebro intacto y que tenía su corazón muy enfermo”.
La cirugía término a las 11, explicó Nahín. “Ambos equipos llevábamos casi 30 horas sin dormir pero en ese momento no sentís ningún tipo de cansancio, solo una alegría enorme por la tarea realizada”.
Luego de la operación, el paciente fue trasladado a la sala de recuperación cardiovascular, “donde evolucionó muy bien. Hacia la tarde se lo extubó y ya pudo conversar con sus familiares. Al segundo día se lo pasó a una habitación intermedia y comenzó a deambular”, concluyó el médico. #