Se exhibirá el documental “La mirada justa” del realizador Fernando Torres

Se proyectarán “Río Seco” de Abelardo Cabrera y “Copa Hombre Nuevo” una película de fútbol, de Esteban Giachero. Las funciones serán el viernes a las 21.30 y el domingo a las 20.30.

23 JUL 2013 - 22:56 | Actualizado

La sala de Cine Espacio INCAA KM. 1460 ofrecerá el fin de semana una programación destinada a los seguidores del cine documental. Las películas que se proyectarán son Río Seco de Abelardo Cabrera y Copa Hombre Nuevo (Una película de Fútbol), de Esteban Giachero.

Las funciones por única vez serán solamente el viernes a las 21.30 y el domingo a las 20.30. En ambas funciones, previamente se exhibirá el documental “La mirada justa” del realizador local Fernando Torres.

Acerca de “Río seco”, se puede decir que se trata de una historia que transcurre en Mendoza, como en muchas otras partes del mundo, el agua es un bien en disputa. Este documental es la crónica de un conflicto en torno a la apropiación de los bienes naturales y muestra las causas de una profunda crisis que hunde sus raíces en la historia.

Hacia fines de enero de 2012 con los equipos de Argentina, Brasil, Chile, Bolivia, Inglaterra, Bélgica y Lituania, se desarrolló en la localidad cordobesa de Colonia Caroya, la Copa América Alternativa `Hombre Nuevo`. Este documental cuenta cómo fue la apuesta de llevar adelante un torneo de fútbol alternativo dentro y fuera de la cancha.

El género y la creación

Fernando Torres es profesor de Artes Plásticas, egresado de la Escuela Nacional de Bellas Artes “Prilidiano Pueyrredón”. Entre la década del 70 y 80, empezó a incursionar en el mundo del cine desde el Museo Municipal del Cine “Pablo C. Ducros Hicken”, del Teatro San Martín en Buenos Aires. Allí participó de cursos dictados por directores como Lucas Demare, Ricardo Wullicher y Oscar Barney Finn. Como así también, formó parte de la Comisión Directiva del Cine Club del Museo, lugar que le permitió acceder a mucho material documental desconocido y prohibido en aquellos años.

-¿Por qué la elección de este género?

Responder de por qué elegí el documental como forma de expresión visual, lo voy a hacer a través de las palabras del maestro Jorge Prelorán: “...Dar voz a los que no tienen voz...”. Particularmente creo que en el marco de un resurgir del documental y del cine político en general, a la par de una época signada por “guerras y revoluciones”, los realizadores tenemos un arma muy poderosa, nuestra cámara, con la cual tenemos la obligación de contar, registrar los conflictos sociales, como en Argentina en el 2001 cuando el pueblo se levantó y cuestionó a la dirigencia política, con el “que se vayan todos”, ocupando el espacio en las calles, recuperando empresas y tierras, defendiendo el medio ambiente, la educación de sus hijos y levantándose contra la depredación de nuestros recursos naturales y en contra de políticas neoliberales que nos sumen en la pobreza. O difundir las luchas de los trabajadores ocupados y desocupados de la ciudad y del campo, indígenas, negros, mujeres, estudiantes y todas las formas de opresión que reviste el sistema capitalista. En cualquier lugar del Continente, en cualquier lugar del Planeta…Filmamos desde un lado de la trinchera…

-¿Cómo fue el proceso creativo de tu obra La mirada justa?

La elección del tema y el proceso personal fue difícil, porque me unía una amistad. Pero era consciente de la importancia del registro audiovisual y creo firmemente que él también lo creyó así. Sabía que su luz se estaba apagando muy lentamente. Era principios del 2008 y lamentablemente se nos estaba yendo uno de nuestros grandes exponentes e investigador de la fotografía patagónica. Era un ejemplo de lucha contra una enfermedad difícil que a la larga lo consumiría, pero nunca permitió que influyera en su trabajo. Era un creador exquisito y un investigador tenaz.

Y este es uno de los pocos vídeos que he realizado, que tiene que ver fuertemente con un homenaje y no tanto con una intención de denuncia evidente, pero si se diría que velada... “contra el olvido”. Particularmente he visto cómo a través del tiempo nuestros artistas locales de larga trayectoria o con un importante legado, como es el caso de Lanoel, Esteban Ferreyra, Horacio Mayo, Horacio Marras y muchos otros ya desaparecidos, que muy pocas veces o nunca se los recuerda, sobre todo desde el Estado. Siendo justamente una de sus obligaciones: velar y mantener viva la llama del Patrimonio y el Legado Cultural que dejan nuestros artistas, creadores o actores culturales.

23 JUL 2013 - 22:56

La sala de Cine Espacio INCAA KM. 1460 ofrecerá el fin de semana una programación destinada a los seguidores del cine documental. Las películas que se proyectarán son Río Seco de Abelardo Cabrera y Copa Hombre Nuevo (Una película de Fútbol), de Esteban Giachero.

Las funciones por única vez serán solamente el viernes a las 21.30 y el domingo a las 20.30. En ambas funciones, previamente se exhibirá el documental “La mirada justa” del realizador local Fernando Torres.

Acerca de “Río seco”, se puede decir que se trata de una historia que transcurre en Mendoza, como en muchas otras partes del mundo, el agua es un bien en disputa. Este documental es la crónica de un conflicto en torno a la apropiación de los bienes naturales y muestra las causas de una profunda crisis que hunde sus raíces en la historia.

Hacia fines de enero de 2012 con los equipos de Argentina, Brasil, Chile, Bolivia, Inglaterra, Bélgica y Lituania, se desarrolló en la localidad cordobesa de Colonia Caroya, la Copa América Alternativa `Hombre Nuevo`. Este documental cuenta cómo fue la apuesta de llevar adelante un torneo de fútbol alternativo dentro y fuera de la cancha.

El género y la creación

Fernando Torres es profesor de Artes Plásticas, egresado de la Escuela Nacional de Bellas Artes “Prilidiano Pueyrredón”. Entre la década del 70 y 80, empezó a incursionar en el mundo del cine desde el Museo Municipal del Cine “Pablo C. Ducros Hicken”, del Teatro San Martín en Buenos Aires. Allí participó de cursos dictados por directores como Lucas Demare, Ricardo Wullicher y Oscar Barney Finn. Como así también, formó parte de la Comisión Directiva del Cine Club del Museo, lugar que le permitió acceder a mucho material documental desconocido y prohibido en aquellos años.

-¿Por qué la elección de este género?

Responder de por qué elegí el documental como forma de expresión visual, lo voy a hacer a través de las palabras del maestro Jorge Prelorán: “...Dar voz a los que no tienen voz...”. Particularmente creo que en el marco de un resurgir del documental y del cine político en general, a la par de una época signada por “guerras y revoluciones”, los realizadores tenemos un arma muy poderosa, nuestra cámara, con la cual tenemos la obligación de contar, registrar los conflictos sociales, como en Argentina en el 2001 cuando el pueblo se levantó y cuestionó a la dirigencia política, con el “que se vayan todos”, ocupando el espacio en las calles, recuperando empresas y tierras, defendiendo el medio ambiente, la educación de sus hijos y levantándose contra la depredación de nuestros recursos naturales y en contra de políticas neoliberales que nos sumen en la pobreza. O difundir las luchas de los trabajadores ocupados y desocupados de la ciudad y del campo, indígenas, negros, mujeres, estudiantes y todas las formas de opresión que reviste el sistema capitalista. En cualquier lugar del Continente, en cualquier lugar del Planeta…Filmamos desde un lado de la trinchera…

-¿Cómo fue el proceso creativo de tu obra La mirada justa?

La elección del tema y el proceso personal fue difícil, porque me unía una amistad. Pero era consciente de la importancia del registro audiovisual y creo firmemente que él también lo creyó así. Sabía que su luz se estaba apagando muy lentamente. Era principios del 2008 y lamentablemente se nos estaba yendo uno de nuestros grandes exponentes e investigador de la fotografía patagónica. Era un ejemplo de lucha contra una enfermedad difícil que a la larga lo consumiría, pero nunca permitió que influyera en su trabajo. Era un creador exquisito y un investigador tenaz.

Y este es uno de los pocos vídeos que he realizado, que tiene que ver fuertemente con un homenaje y no tanto con una intención de denuncia evidente, pero si se diría que velada... “contra el olvido”. Particularmente he visto cómo a través del tiempo nuestros artistas locales de larga trayectoria o con un importante legado, como es el caso de Lanoel, Esteban Ferreyra, Horacio Mayo, Horacio Marras y muchos otros ya desaparecidos, que muy pocas veces o nunca se los recuerda, sobre todo desde el Estado. Siendo justamente una de sus obligaciones: velar y mantener viva la llama del Patrimonio y el Legado Cultural que dejan nuestros artistas, creadores o actores culturales.