Andrés Calamaro cautivó en un show de “clásicos” y mensaje petrolero incluido

En el predio ferial de Comodoro Rivadavia.

28 SEP 2013 - 22:46 | Actualizado

Varios años después de su último viaje, como parte de Los Abuelos de la Nada pero ahora en su mejor versión, la de solista y dueño absoluto del show, Andrés Calamaro volvió a pisar un escenario en Comodoro Rivadavia. Una multitud lo aguardó con ansiedad en el gigantesco Predio Ferial donde el músico regaló durante dos horas y con extrema puntualidad, lo más variado de su repertorio, sintetizando su paso por distintas formaciones y en resumen, casi todos sus estados musicales en un show de alto vuelo. Comodoro fue la única ciudad chubutense que tocó el Salmón” que presenta su último disco como en San Carlos de Bariloche; Neuquén, Comodoro Rivadavia y Río Gallegos. El “Bohemio 2013” ya pasó por México, Santiago de Chile, Mendoza y Rosario siguiendo por Córdoba, Mar del Plata, San Juan, Perú, Uruguay y Bolivia, cerrando el 7 de diciembre en el hipódromo de Buenos Aires.

No le faltó nada al ex líder de Los Rodríguez y ex integrante de Los Abuelos de la Nada quien presentó un concierto nada adaptado a los viajes y a los kilómetros. Para ello un staff de más de cincuenta personas, cuidaron cada detalle estético para que asomara el “duende” como refiere Calamaro al vínculo que se produce entre quienes interpretan y transmiten y el público receptor. Como prometió, Diego Armando Maradona y las corridas de toros fueron el leiv motiv de las gigantescas pantallas led que sirvieron de apoyatura a cada tema; las luces y el sonido le dieron al entorno, una profundidad mayor a la que provocaba el espacio. A la altura de las grandes bandas extranjeras, incluyendo entre otras a Pink Floyd. El repertorio incluyó casi 30 canciones incluyendo un trabajado “revival” en el que afloró la nostalgia de un rock nacional en su máxima expresión. Pasaron “Mi enfermedad”, “Crímenes perfectos”, “Las Tres Marías”, “Tuyo Siempre”, “Loco”, “Estadio Azteca” y “Me arde”. También sorprendió el impacto de escuchar temas de reciente edición, que salieron a la calle éste mes y forman parte del trabajo “Bohemio” producido por Cachorro López y que incluye “Cuando no estás”. Fue inevitable la comparación entre el esfuerzo de los toreros con el del rigor que impone trabajar en el petróleo e hizo hincapié en las atenciones recibidas durante su estadía, con un beso simbólico al suelo de la Patagonia. Desde su teclado encendido, Calamaro pareció multiplicarse: Citó a Jagger y resaltó la renovación de su banda compuesta por el guitarrista Baltasar Comotto (Spinetta e Indio Solari), el baterista Sergio Verdinelli (Spinetta, Fito Páez e Illya Kuryaki), Julián Kanevsky (colaboró con la banda española Fito & Los Fitipaldis), Mariano Domínguez (exbajista de IKV) y el tecladista Germán Wiedemer (ex-Memphis la Blusera). “Los chicos” fue el cierre en el que el artista tocó la fibra con una galería de los que ya no están. Sandro, Pappo, Miguel Abuelo, Federico Moura, Luca Prodan, Rodrigo y Luis Alberto Spinetta, artistas únicos que anticiparon la partida fueron así por algunos segundos, parte sustancial del show en su tramo de despedida.

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28 SEP 2013 - 22:46

Varios años después de su último viaje, como parte de Los Abuelos de la Nada pero ahora en su mejor versión, la de solista y dueño absoluto del show, Andrés Calamaro volvió a pisar un escenario en Comodoro Rivadavia. Una multitud lo aguardó con ansiedad en el gigantesco Predio Ferial donde el músico regaló durante dos horas y con extrema puntualidad, lo más variado de su repertorio, sintetizando su paso por distintas formaciones y en resumen, casi todos sus estados musicales en un show de alto vuelo. Comodoro fue la única ciudad chubutense que tocó el Salmón” que presenta su último disco como en San Carlos de Bariloche; Neuquén, Comodoro Rivadavia y Río Gallegos. El “Bohemio 2013” ya pasó por México, Santiago de Chile, Mendoza y Rosario siguiendo por Córdoba, Mar del Plata, San Juan, Perú, Uruguay y Bolivia, cerrando el 7 de diciembre en el hipódromo de Buenos Aires.

No le faltó nada al ex líder de Los Rodríguez y ex integrante de Los Abuelos de la Nada quien presentó un concierto nada adaptado a los viajes y a los kilómetros. Para ello un staff de más de cincuenta personas, cuidaron cada detalle estético para que asomara el “duende” como refiere Calamaro al vínculo que se produce entre quienes interpretan y transmiten y el público receptor. Como prometió, Diego Armando Maradona y las corridas de toros fueron el leiv motiv de las gigantescas pantallas led que sirvieron de apoyatura a cada tema; las luces y el sonido le dieron al entorno, una profundidad mayor a la que provocaba el espacio. A la altura de las grandes bandas extranjeras, incluyendo entre otras a Pink Floyd. El repertorio incluyó casi 30 canciones incluyendo un trabajado “revival” en el que afloró la nostalgia de un rock nacional en su máxima expresión. Pasaron “Mi enfermedad”, “Crímenes perfectos”, “Las Tres Marías”, “Tuyo Siempre”, “Loco”, “Estadio Azteca” y “Me arde”. También sorprendió el impacto de escuchar temas de reciente edición, que salieron a la calle éste mes y forman parte del trabajo “Bohemio” producido por Cachorro López y que incluye “Cuando no estás”. Fue inevitable la comparación entre el esfuerzo de los toreros con el del rigor que impone trabajar en el petróleo e hizo hincapié en las atenciones recibidas durante su estadía, con un beso simbólico al suelo de la Patagonia. Desde su teclado encendido, Calamaro pareció multiplicarse: Citó a Jagger y resaltó la renovación de su banda compuesta por el guitarrista Baltasar Comotto (Spinetta e Indio Solari), el baterista Sergio Verdinelli (Spinetta, Fito Páez e Illya Kuryaki), Julián Kanevsky (colaboró con la banda española Fito & Los Fitipaldis), Mariano Domínguez (exbajista de IKV) y el tecladista Germán Wiedemer (ex-Memphis la Blusera). “Los chicos” fue el cierre en el que el artista tocó la fibra con una galería de los que ya no están. Sandro, Pappo, Miguel Abuelo, Federico Moura, Luca Prodan, Rodrigo y Luis Alberto Spinetta, artistas únicos que anticiparon la partida fueron así por algunos segundos, parte sustancial del show en su tramo de despedida.


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