La Comisión Directiva de la Asociación Corredores Turismo Carretera y toda la familia teceísta rinde tributo y un sentido homenaje a quien fuera un grande de verdad, a un piloto ganador y campeón, dentro y fuera de las pistas, a un dirigente cabal y a un ser humano excepcional.
El 22 de Noviembre de 1992, en el semipermanente de Lobos, entró en la inmortalidad junto a su fiel acompañante Amadeo “Huevo” González.
Amado y respetado por todos, dueño de una personalidad firme, simple y reservada, su humildad marco cada uno de los actos de su vida pero dejó su impronta bien estampada.
Gracias “Toro” de Carlos Casares, muchas gracias Roberto Mouras, amigo, colega, persona, nos apena tu ausencia y nos llena de orgullo tu legado.
(Fuente: Prensa ACTC)
La Comisión Directiva de la Asociación Corredores Turismo Carretera y toda la familia teceísta rinde tributo y un sentido homenaje a quien fuera un grande de verdad, a un piloto ganador y campeón, dentro y fuera de las pistas, a un dirigente cabal y a un ser humano excepcional.
El 22 de Noviembre de 1992, en el semipermanente de Lobos, entró en la inmortalidad junto a su fiel acompañante Amadeo “Huevo” González.
Amado y respetado por todos, dueño de una personalidad firme, simple y reservada, su humildad marco cada uno de los actos de su vida pero dejó su impronta bien estampada.
Gracias “Toro” de Carlos Casares, muchas gracias Roberto Mouras, amigo, colega, persona, nos apena tu ausencia y nos llena de orgullo tu legado.
(Fuente: Prensa ACTC)