El Hyundai Genesis Coupe, de 2 millones de pesos, se encontraba estacionado en las afueras de un reconocido hotel de la capital santacruceña y sería de su ex, por lo que actuó por venganza. El vehículo rojo, que se encontraba estacionado, sufrió roturas en los vidrios y daños en distintas partes. Los daños superarían los 300.000 pesos.