Ayer por la tarde tres jueces, además de fiscales y defensores recorrieron calles del barrio Los Aromos de Trelew, con vistas a reconstruir las dos hipótesis que existen en torno al asesinato de Cristian Bravo. La víctima fue baleada por la espalda con una pistola calibre 9 milímetros el 22 de noviembre de 2014. Bravo el día anterior había atropellado a una menor de edad.
La medida fue ordenada por la jueza Ivana González, a pedido del defensor Abdo Manyauik. La jueza indicó que fue una medida muy productiva, ya que permitió visualizar dos hipótesis distintas en cuanto a la mecánica del hecho.
Es que Manyauik puso en crisis la teoría de la Fiscalía. Planteó que no está claro el sitio desde donde fue disparada el arma mortal. Sustentó sus dichos sobre pericias planimétricas que no coinciden con el relato. No pueden definir el sitio de donde fue disparada el arma, el lugar donde el proyectil impactó a la víctima y el trayecto que éste hizo hasta que cayó. Manyauik precisó que pidió la reconstrucción del hecho porque no está clara la ubicación del tirador. Con la reconstrucción efectuada ayer, busca echar luz ante los ojos de los jueces, quienes tuvieron la posibilidad de escuchar los argumentos del defensor y la fiscal Tolomei.
Estuvieron el juez José García y su par Mirta Moreno. También los fiscales Arnaldo Maza y María Tolomei. El 25 de noviembre de 2014, cuando el juez Fabio Monti ratificó la prisión preventiva de los tres imputados, el fiscal Osbaldo Heiber había dicho que los Pablo Ezequiel Ferreyra, Bruno Ezequiel Lucero y Braian Juliano Ferreyra, mediante la utilización de armas de fuego, efectuaron varios disparos hacia las personas de Cristian Aldemar Bravo y una hermana, con clara intención de darles muerte en circunstancias que las víctimas pasaban frente a ese lugar a bordo de una motocicleta, conducida por la mujer.
En aquella audiencia, Manyauik ya había pedido la reconstrucción del hecho que finalmente se dio más de un año después por determinación de la jueza González.
Ayer por la tarde tres jueces, además de fiscales y defensores recorrieron calles del barrio Los Aromos de Trelew, con vistas a reconstruir las dos hipótesis que existen en torno al asesinato de Cristian Bravo. La víctima fue baleada por la espalda con una pistola calibre 9 milímetros el 22 de noviembre de 2014. Bravo el día anterior había atropellado a una menor de edad.
La medida fue ordenada por la jueza Ivana González, a pedido del defensor Abdo Manyauik. La jueza indicó que fue una medida muy productiva, ya que permitió visualizar dos hipótesis distintas en cuanto a la mecánica del hecho.
Es que Manyauik puso en crisis la teoría de la Fiscalía. Planteó que no está claro el sitio desde donde fue disparada el arma mortal. Sustentó sus dichos sobre pericias planimétricas que no coinciden con el relato. No pueden definir el sitio de donde fue disparada el arma, el lugar donde el proyectil impactó a la víctima y el trayecto que éste hizo hasta que cayó. Manyauik precisó que pidió la reconstrucción del hecho porque no está clara la ubicación del tirador. Con la reconstrucción efectuada ayer, busca echar luz ante los ojos de los jueces, quienes tuvieron la posibilidad de escuchar los argumentos del defensor y la fiscal Tolomei.
Estuvieron el juez José García y su par Mirta Moreno. También los fiscales Arnaldo Maza y María Tolomei. El 25 de noviembre de 2014, cuando el juez Fabio Monti ratificó la prisión preventiva de los tres imputados, el fiscal Osbaldo Heiber había dicho que los Pablo Ezequiel Ferreyra, Bruno Ezequiel Lucero y Braian Juliano Ferreyra, mediante la utilización de armas de fuego, efectuaron varios disparos hacia las personas de Cristian Aldemar Bravo y una hermana, con clara intención de darles muerte en circunstancias que las víctimas pasaban frente a ese lugar a bordo de una motocicleta, conducida por la mujer.
En aquella audiencia, Manyauik ya había pedido la reconstrucción del hecho que finalmente se dio más de un año después por determinación de la jueza González.