May, ministra del Interior, logró 199 apoyos de los 329 parlamentarios conservadores que participaron en esta, la segunda ronda del proceso para elegir a su nuevo líder, mientras Leadsom, secretaria de Estado de Energía, recibió 84 votos y el ministro de Justicia, Michael Gove, 46, lo que le dejó fuera del proceso de selección.
Ambas candidatas se deberán someter ahora a una elección entre los 150.000 afiliados al partido, cuyo resultado se conocerá el próximo 9 de septiembre.
Cualquiera que sea la ganadora, el Reino Unido contará con una primera ministra por segunda vez en su historia, después de la también conservadora Thatcher, que lideró el Ejecutivo de 1979 a 1990 y es recordada por la guerra de las Malvinas, su política neoliberal y su embestida contra los sindicatos.
La ministra del Interior, que defendió la permanencia del país en la Unión Europea (UE) en la campaña previa al referéndum del 23 de junio, parte como favorita como heredera de la jefatura del gobierno, después de que Cameron anunciara su dimisión poco después de conocerse la victoria del Brexit en el plebiscito.
"Este voto demuestra que el Partido Conservador puede estar unido. Bajo mi liderazgo lo estará", dijo May a las puertas del Parlamento de Westminster tras conocer el resultado de una votación que, según agregó, mostró que cuenta con el apoyo de todos los sectores de la agrupación gobernante.
La dirigente, de 59 años, prometió un "liderazgo fuerte y probado" para negociar con la UE la salida del Reino Unido y para "hacer de Gran Bretaña un país que trabaja no para unos pocos privilegiados sino para todos nosotros", informó la cadena BBC.
May señaló en los últimos días que la voluntad del 51,9 % de los votantes en la consulta, que optaron por romper los lazos con Bruselas, "debe ser respetada" y descartó cualquier intento para que el Reino Unido continúe formando parte de la UE.
La política conservadora también adelantó que, de resultar finalmente investida como primera ministra, no activará al menos hasta fines de este año el artículo 50 del Tratado de Lisboa, que inicia la cuenta atrás de dos años para salir de la Unión.
Leadsom, ex directiva bancaria de 53 años, ha dicho esta semana que comunicará oficialmente a Bruselas la intención de Londres de abandonar el bloque comunitario tan pronto como sea posible si lidera el Ejecutivo.
La diputada conservadora, que accedió a la Cámara de los Comunes en 2010, hizo campaña a favor del Brexit y subrayó que uno de sus principales objetivos sería lograr un descenso en el número de inmigrantes que llegan cada año al Reino Unido.
Su jefe de campaña, el diputado conservador Tim Loughton, dijo que Leadsom llevará su "enorme capacidad" a la jefatura de gobierno si es electa.
El legislador minimizó su falta de experiencia en un gabinete y señaló que no tendrá "ningún problema" para desempeñarse en el cargo pese a no contar con una larga trayectoria en política.
Gove, por su parte, dijo que estaba "naturalmente decepcionado" por no haber llegado a la final, aunque describió a las competidoras que quedaron como "políticas formidables".
También se mostró contento de que el Reino Unido vaya a tener a su segundo primera ministra -tras Thatcher- y pidió un "debate civilizado, inclusivo, positivo y optimista".
La eliminación de Gove en la segunda votación llegó después de haber presentado por sorpresa su candidatura, cuando se esperaba que acompañara como "número dos" al ex alcalde de Londres Boris Johnson, que finalmente renunció a participar en el proceso para liderar el partido.
Crecen las versiones que sugieren que Gove, que traicionó en el último momento a Johnson, estuvo detrás de la difusión de varios emails que ponen en entredicho el curriculum oficial de Leadsom y revelan posibles falsedades y ocultamientos sobre sus trabajos en la City, antes de dar el salto a la política.
Estas supuestas omisiones en su currículum han puesto en duda la credibilidad de Leadsom, que tres años antes de hacer campaña por la salida de la UE llegó a decir que el Brexit "sería un desastre".
Gove fue uno de los tres candidatos que quedaron afuera de la interna final, del total de cinco que se presentaron.
Esta semana, en la primera votación de la bancada conservadora, el ex ministro de Defensa Liam Fox quedó eliminado al ser el menos votado, mientras que el secretario de Estado de Pensiones, Stephen Crabb, retiró su postulación al haber quedado en cuarto lugar.
May, ministra del Interior, logró 199 apoyos de los 329 parlamentarios conservadores que participaron en esta, la segunda ronda del proceso para elegir a su nuevo líder, mientras Leadsom, secretaria de Estado de Energía, recibió 84 votos y el ministro de Justicia, Michael Gove, 46, lo que le dejó fuera del proceso de selección.
Ambas candidatas se deberán someter ahora a una elección entre los 150.000 afiliados al partido, cuyo resultado se conocerá el próximo 9 de septiembre.
Cualquiera que sea la ganadora, el Reino Unido contará con una primera ministra por segunda vez en su historia, después de la también conservadora Thatcher, que lideró el Ejecutivo de 1979 a 1990 y es recordada por la guerra de las Malvinas, su política neoliberal y su embestida contra los sindicatos.
La ministra del Interior, que defendió la permanencia del país en la Unión Europea (UE) en la campaña previa al referéndum del 23 de junio, parte como favorita como heredera de la jefatura del gobierno, después de que Cameron anunciara su dimisión poco después de conocerse la victoria del Brexit en el plebiscito.
"Este voto demuestra que el Partido Conservador puede estar unido. Bajo mi liderazgo lo estará", dijo May a las puertas del Parlamento de Westminster tras conocer el resultado de una votación que, según agregó, mostró que cuenta con el apoyo de todos los sectores de la agrupación gobernante.
La dirigente, de 59 años, prometió un "liderazgo fuerte y probado" para negociar con la UE la salida del Reino Unido y para "hacer de Gran Bretaña un país que trabaja no para unos pocos privilegiados sino para todos nosotros", informó la cadena BBC.
May señaló en los últimos días que la voluntad del 51,9 % de los votantes en la consulta, que optaron por romper los lazos con Bruselas, "debe ser respetada" y descartó cualquier intento para que el Reino Unido continúe formando parte de la UE.
La política conservadora también adelantó que, de resultar finalmente investida como primera ministra, no activará al menos hasta fines de este año el artículo 50 del Tratado de Lisboa, que inicia la cuenta atrás de dos años para salir de la Unión.
Leadsom, ex directiva bancaria de 53 años, ha dicho esta semana que comunicará oficialmente a Bruselas la intención de Londres de abandonar el bloque comunitario tan pronto como sea posible si lidera el Ejecutivo.
La diputada conservadora, que accedió a la Cámara de los Comunes en 2010, hizo campaña a favor del Brexit y subrayó que uno de sus principales objetivos sería lograr un descenso en el número de inmigrantes que llegan cada año al Reino Unido.
Su jefe de campaña, el diputado conservador Tim Loughton, dijo que Leadsom llevará su "enorme capacidad" a la jefatura de gobierno si es electa.
El legislador minimizó su falta de experiencia en un gabinete y señaló que no tendrá "ningún problema" para desempeñarse en el cargo pese a no contar con una larga trayectoria en política.
Gove, por su parte, dijo que estaba "naturalmente decepcionado" por no haber llegado a la final, aunque describió a las competidoras que quedaron como "políticas formidables".
También se mostró contento de que el Reino Unido vaya a tener a su segundo primera ministra -tras Thatcher- y pidió un "debate civilizado, inclusivo, positivo y optimista".
La eliminación de Gove en la segunda votación llegó después de haber presentado por sorpresa su candidatura, cuando se esperaba que acompañara como "número dos" al ex alcalde de Londres Boris Johnson, que finalmente renunció a participar en el proceso para liderar el partido.
Crecen las versiones que sugieren que Gove, que traicionó en el último momento a Johnson, estuvo detrás de la difusión de varios emails que ponen en entredicho el curriculum oficial de Leadsom y revelan posibles falsedades y ocultamientos sobre sus trabajos en la City, antes de dar el salto a la política.
Estas supuestas omisiones en su currículum han puesto en duda la credibilidad de Leadsom, que tres años antes de hacer campaña por la salida de la UE llegó a decir que el Brexit "sería un desastre".
Gove fue uno de los tres candidatos que quedaron afuera de la interna final, del total de cinco que se presentaron.
Esta semana, en la primera votación de la bancada conservadora, el ex ministro de Defensa Liam Fox quedó eliminado al ser el menos votado, mientras que el secretario de Estado de Pensiones, Stephen Crabb, retiró su postulación al haber quedado en cuarto lugar.