Lo mantuvieron secuestrado siete días en un ropero
Un hombre denunció que fue secuestrado en la ciudad bonaerense de Florencio Varela por una banda que lo tuvo cautivo siete días en una casa detrás de un ropero y con un pie encadenado, hasta que fue liberado luego de que su ex mujer vendiera una camioneta y pagara 230.000 pesos como rescate, informaron hoy fuentes policiales y judiciales.
Si bien se conoció hoy, el caso se inició el 10 de este mes y duró una semana hasta el sábado último, cuando la víctima apareció en Longchamps, partido de Almirante Brown.
Los investigadores creen que no se trató de un secuestro extorsivo común, no sólo por lo prolongado del cautiverio, sino también por otras cuestiones, por lo que se investigaban varias hipótesis.
Todo comenzó el 10 de este mes por la noche cuando la víctima, identificada como Alfredo José Miranda, de nacionalidad boliviana y quien se dedica a la construcción y a los fletes, circulaba con su camioneta rumbo a una fiesta en el denominado barrio Kilómetro 26, frente a la estación Dante Ardigó del ex ferrocarril Roca, en el partido de Florencio Varela.
Según le contó luego a los detectives de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) Quilmes que trabajan en su caso, Miranda fue bajado de su camioneta, traspasado a un auto que podría ser un Renault Laguna y llevado vendado a un sitio de cautiverio.
“Miranda contó que lo tuvieron los siete días que duró el secuestro tirado en el piso, detrás de un ropero y con un pie encadenado”, dijo a Télam uno de los investigadores.
Los captores se comunicaron la familia de la víctima y exigieron un rescate de 500.000 pesos por su liberación.
Miranda les explicó a los secuestradores que era imposible para su entorno reunir ese dinero y entonces a los delincuentes se les ocurrió devolverle a la familia la camioneta de la propia víctima para que la vendieran y así obtener el dinero de la venta.
Según las fuentes, los secuestradores dejaron abandonada la camioneta en el Parque Pereyra Iraola de Berazategui y llamaron para reportar su ubicación.
Como el vehículo estaba a nombre de la ex mujer del fletero, fue ella quien concretó la venta del automotor y esos 230.000 pesos se utilizaron para pagar el rescate.
El sábado por la noche, Miranda fue subido a un auto y liberado en la localidad bonaerense de Longchamps, donde caminó hasta una remisería para regresar a su casa.
Fuentes de la investigación señalaron a Télam que Miranda fue revisado por médicos y psicólogos, quienes reportaron que a pesar de los siete días de cautiverio estaba en muy buen estado emocional y de salud y que presentaba buenas condiciones de alimentación y de aseo.
“Estamos investigando todas las hipótesis. Nos centramos en las actividades y relaciones de la propia víctima para ver si tiene deudas, enemigos o algún problema que haya motivado este secuestro”, dijo a Télam otro de los pesquisas.
A nivel judicial, el caso es investigado por la Fiscalía Federal de Quilmes, que está siendo subrogada por su secretario, Adrián Rigonatto.
Si bien se conoció hoy, el caso se inició el 10 de este mes y duró una semana hasta el sábado último, cuando la víctima apareció en Longchamps, partido de Almirante Brown.
Los investigadores creen que no se trató de un secuestro extorsivo común, no sólo por lo prolongado del cautiverio, sino también por otras cuestiones, por lo que se investigaban varias hipótesis.
Todo comenzó el 10 de este mes por la noche cuando la víctima, identificada como Alfredo José Miranda, de nacionalidad boliviana y quien se dedica a la construcción y a los fletes, circulaba con su camioneta rumbo a una fiesta en el denominado barrio Kilómetro 26, frente a la estación Dante Ardigó del ex ferrocarril Roca, en el partido de Florencio Varela.
Según le contó luego a los detectives de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) Quilmes que trabajan en su caso, Miranda fue bajado de su camioneta, traspasado a un auto que podría ser un Renault Laguna y llevado vendado a un sitio de cautiverio.
“Miranda contó que lo tuvieron los siete días que duró el secuestro tirado en el piso, detrás de un ropero y con un pie encadenado”, dijo a Télam uno de los investigadores.
Los captores se comunicaron la familia de la víctima y exigieron un rescate de 500.000 pesos por su liberación.
Miranda les explicó a los secuestradores que era imposible para su entorno reunir ese dinero y entonces a los delincuentes se les ocurrió devolverle a la familia la camioneta de la propia víctima para que la vendieran y así obtener el dinero de la venta.
Según las fuentes, los secuestradores dejaron abandonada la camioneta en el Parque Pereyra Iraola de Berazategui y llamaron para reportar su ubicación.
Como el vehículo estaba a nombre de la ex mujer del fletero, fue ella quien concretó la venta del automotor y esos 230.000 pesos se utilizaron para pagar el rescate.
El sábado por la noche, Miranda fue subido a un auto y liberado en la localidad bonaerense de Longchamps, donde caminó hasta una remisería para regresar a su casa.
Fuentes de la investigación señalaron a Télam que Miranda fue revisado por médicos y psicólogos, quienes reportaron que a pesar de los siete días de cautiverio estaba en muy buen estado emocional y de salud y que presentaba buenas condiciones de alimentación y de aseo.
“Estamos investigando todas las hipótesis. Nos centramos en las actividades y relaciones de la propia víctima para ver si tiene deudas, enemigos o algún problema que haya motivado este secuestro”, dijo a Télam otro de los pesquisas.
A nivel judicial, el caso es investigado por la Fiscalía Federal de Quilmes, que está siendo subrogada por su secretario, Adrián Rigonatto.