También los aborígenes de Brasil protestan contra Temer
Decenas de indígenas tocados con plumas y algunos armados con arcos y flechas bloquearon hoy la entrada al Planalto, sede del Poder Ejecutivo en Brasilia, en protesta por lo que califican de "agresiones" del gobierno del presidente Michel Temer a sus "derechos", entre ellos el ajuste fiscal y la demora en demarcar sus tierras, que sufren conflictos de propiedad.
El documento que pretenden entregar al gobierno fue distribuido entre los periodistas y dice, entre otras cosas, que rechazan el ajuste fiscal propuesto por el gobierno de Temer y también exigen presupuestos mayores para la atención de sus reservas.
Los manifestantes protestaron contra el proyecto de enmienda constitucional redactado por Temer que congela los gastos estatales durante 20 años.
Ese proyecto ya obtuvo media sanción en la Cámara de Diputados y comenzó a ser debatido en el Senado.
Asimismo, demandan una mayor celeridad en el proceso de demarcación de sus tierras y protestan por la inseguridad en sus reservas, que son objeto de numerosos conflictos de propiedad.
El documento también reitera el rechazo de los aborígenes a un proyecto de ley que pretende alterar las normas para la demarcación de tierras indígenas.
El proyecto propone que esa responsabilidad, que hasta ahora es de la estatal Fundación Nacional del Indio (Funai), sea transferida al Congreso, en el que existen grupos parlamentarios que representan los intereses de los empresarios del campo.
Esa propuesta tramita en el Congreso desde hace años y cuenta con el respaldo de la base parlamentaria de Temer, que pretende impulsar las discusiones sobre el asunto con el objeto de que sea aprobada el año próximo.
Sin resistencia por parte de la seguridad de la Presidencia brasileña, los indios se apostaron frente a la entrada principal del palacio de Gobierno y exigieron ser recibidos por "autoridades" a fin de entregar el documento con sus reivindicaciones, que finalmente fue entregado a la prensa.
El documento que pretenden entregar al gobierno fue distribuido entre los periodistas y dice, entre otras cosas, que rechazan el ajuste fiscal propuesto por el gobierno de Temer y también exigen presupuestos mayores para la atención de sus reservas.
Los manifestantes protestaron contra el proyecto de enmienda constitucional redactado por Temer que congela los gastos estatales durante 20 años.
Ese proyecto ya obtuvo media sanción en la Cámara de Diputados y comenzó a ser debatido en el Senado.
Asimismo, demandan una mayor celeridad en el proceso de demarcación de sus tierras y protestan por la inseguridad en sus reservas, que son objeto de numerosos conflictos de propiedad.
El documento también reitera el rechazo de los aborígenes a un proyecto de ley que pretende alterar las normas para la demarcación de tierras indígenas.
El proyecto propone que esa responsabilidad, que hasta ahora es de la estatal Fundación Nacional del Indio (Funai), sea transferida al Congreso, en el que existen grupos parlamentarios que representan los intereses de los empresarios del campo.
Esa propuesta tramita en el Congreso desde hace años y cuenta con el respaldo de la base parlamentaria de Temer, que pretende impulsar las discusiones sobre el asunto con el objeto de que sea aprobada el año próximo.
Sin resistencia por parte de la seguridad de la Presidencia brasileña, los indios se apostaron frente a la entrada principal del palacio de Gobierno y exigieron ser recibidos por "autoridades" a fin de entregar el documento con sus reivindicaciones, que finalmente fue entregado a la prensa.