Colapsó la Terminal de Trelew por el corte de ruta y la sobreventa de pasajes

El arribo de un número de micros no previsto por la venta de pasajes en boleterías de distintos puntos del país, que no advirtieron sobre el corte de la ruta N°3 tramo Trelew-Comodoro Rivadavia, provocó un caos en la Terminal de Ómnibus. Desde el sábado pernoctaron en los micros. La gente fue trasladada a la Base Zar para bañarse. Personas mayores y bebés presentaron deterioro en su salud y requirieron atención médica. La situación se tornó desesperante con el paso de las horas. Urgencias personales y motivos de viajes urgentes no fueron contemplados. “Las responsables, son las empresas”, dijo del director de Terminal, Alberto Eliceche.
La emergencia climática le jugó una mala pasada a Trelew. En especial al transporte. Las rutas nacionales estuvieron cortadas y lo sufrieron los pasajeros que compraron sus pasajes en el norte del país sin ser informados de la situación. Abordaron los micros en provincias como Mendoza, Jujuy y Tucumán sin tener información de lo que sucedía en Chubut. Al llegar a Trelew se desayunaron del corte de la Ruta Nacional N°3 y quedaron varados en la Terminal de Ómnibus. Sin otra respuesta de las empresas más que la asistencia mínima de las comidas, que en algunos casos resultó hasta escasa.
La calma de los cientos de pasajeros se mantuvo hasta el mediodía de ayer. Pero la salud de los adultos mayores y los niños empezó a resentirse y ya no aguantaron más. Necesitaban una respuesta urgente. Pidieron la presencia de autoridades municipales y reclamaron a las empresas una solución.
Alberto Eliceche, director de Terminal y Aeropuerto, explicó a Jornada que el caos se generó porque hubo micros que “arribaron del norte del país. Están varados. Llegaron a las 13:30 horas del sábado. Hasta anoche (por el domingo) a las 2 de la madrugada estaba todo controlado. Había 250 personas distribuidas en distintos coches. Para que estuvieran más cómodos. Como ya tenía la experiencia de situaciones anteriores, acudiendo a buscar colaboración de amigos, y con predisposición de la Base Zar, se puso a disposición para baños y duchas. Fue una contención enorme. Es de esa manera cuando tienen la posibilidad de asearse. Los acompañé a los que optaron por eso”.
Agregó al respecto que “quiero dejar claro, con respecto al servicio y respuesta, ante cualquier contingencia que la responsabilidad es de las empresas. El intendente está informado de lo que ocurre. Vuelvo a insistir con los medios que tenemos, hasta anoche estaba controlada en los parámetros normales. Desde el municipio, en la tarde del sábado se dispuso llevar mamás con chicos al gimnasio municipal”.
Se refirió al trabajo del municipio. “Somos un equipo pequeño. El gimnasio N°2 está disponible. Nadie dice que sea la mejor opción. Lo que agravó la situación es que arribó una cantidad de micros no prevista. Sabiendo que la situación era grave, que la ruta estaba cortada, agencieros con un grado de irresponsabilidad hicieron que llegaran igual”. Y apuntó: “Las empresas ofrecen el servicio, coches a disposición, calefacción y comida a bordo de los colectivos. Me comprometí lo antes posible a volver a hablar con todas las personas para decirle cuál es la situación. El municipio aporta la terminal para las boleterías  y los sanitarios”.
“Nos vendieron igual”

Vanina Carrasco viene viajando desde Choele Choel y su destino final es Comodoro Rivadavia.  Desde el día viernes está varada en Trelew. Relató su situación. “Nos vendieron igual el pasaje cuando ya sabían que había gente varada. Mañana (por hoy) tendría que estar volviendo. Nos tuvieron en el micro. Nos dejaron acá en la Terminal”.
La mujer, angustiada, indicó: “Los chicos ya se están resfriando. Estamos incómodos. No nos llevaron nada. Llamamos a Defensa Civil para ver si se podía hacer algo. Hay gente que toma medicación para el corazón. Nos tienen como si fuésemos animales. No nos devuelven ni el pasaje ni nos dan una solución. Es un problema climático. Nadie se hace cargo. Nos dieron bandejas de comida, pero fría. No nos dieron desayuno. Anoche nos dieron la mitad de todo. Y no a todo el colectivo. Algunos bajaron y se quedaron sin comer”, señaló.
“Nos tienen como animales”
Florencia es de Tucumán y también desde el viernes está varada en Trelew. Se dirige a Calafate. Mostró su indignación ante la situación que le toca vivir. “Estamos gastando mucho dinero en agua, mate y comida. ¿Quién me reconoce eso? En mi caso y en el caso de otros, no tenemos a nadie. Siguen vendiendo boletos y se sigue acumulando gente. Nos tienen como animales. Estamos reaccionando pacíficamente para lo que debería ser. No hay comunicación oficial por parte de la empresa”. Dijo además la mujer que “los inspectores que revisan los colectivos no suben. Hay gente enferma. Deberían poner una ambulancia para nebulizar a las criaturas. Una señora se descompuso. Alguien que al menos tome la presióNo estamos viajando gratis. Estamos pagando”.
“Me voy sin ver mis hijos”

Una de las peores situaciones es la de Vilma Calapeña. Ella es una joven mujer que vive en Jujuy. Con mucho esfuerzo, siendo empleada doméstica, cubrió el monto del pasaje para ir a ver a sus hijos que están en Comodoro Rivadavia, pero su regreso es para hoy. Y deberá retornar sin verlos. Llorando, relató su situación: “Me tendré que volver sin verlos. Yo quería estar el domingo y lunes con ellos. Ahora me tengo que volver. De Jujuy salí el viernes. Llegué el domingo a las 6 de la mañana. No me avisaron en la boletería que pasaba esto, si no, no viajaba”.
Resaltó la mujer que “tenía el regreso para el martes a la tarde. No los vi y tengo que regresar. Es una pena. No tengo más días, dejé hijos pequeños en Jujuy. Hice mucho esfuerzo económico. Es muy caro. Soy empleada doméstica. No pude hablar con nadie. Espero una pronta solución. El regreso ya lo tengo y tengo que hacerlo. No nos dijeron nada. Nadie nos dice nada”.#