Sólo hay un 3% de menores incursos en delitos graves

Una ONG de Rawson que trabaja con niñez y adolescencia advirtió que los menores que delinquen son muy pocos. Y que el proyecto de Nación no ayudará a la inseguridad.

12 JUL 2017 - 22:10 | Actualizado

La organización no gubernamental de Rawson “Amuyen - Marchar con otros” realiza varias actividades para debatir y explicar su oposición al proyecto de bajar la edad de punibilidad.  
El Gobierno nacional impulsa la modificación del Código Penal y plantea revisar el régimen penal juvenil con la baja de la edad de imputabilidad de 16 a 14 años.
Oscar Casanova, miembro de Amuyen, explicó los argumentos que sostienen junto a la red #ARGENTINANOBAJA, para oponerse. Dijo que el proyecto de Nación aparece “como solución a la inseguridad, y ante eso debemos decir a la comunidad que en general, la baja de punibilidad implicaría más pena y más castigo pero en realidad, la cantidad de niños y adolescentes menores a 16 años que incursionan en hechos delictivos graves como homicidios, abusos sexuales y demás, constituyen el 3 o 4% de la estadística nacional y no es muy diferente en Patagonia”.
No sirve

Para la ONG este debate no le sirve al problema de la inseguridad. “El tema impacta fuerte y a veces de manera desinformada y ante un hecho puntual, rápidamente se acepta esta cuestión sin tener en cuenta muchas veces que, algunos de quienes luego serían víctimas de esta cuestión punitiva, son nada menos que sus hijos”.
En cuanto al problema de los niños y jóvenes en estado de carencia, Amuyen plantea la necesidad de trabajar el “estado social” antes que el “estado penal”. Aseguran que “el niño no nace con 14 años ni nace de un repollo. Nace en familia, se desarrolla en una comunidad, debe crecer en un espacio educativo, recreativo y cultural que debe dar el Estado y la propia comunidad”.
“Cuando a un adolescente lo encuentra el sistema penal  a través de un sistema policial, en realidad hay una corresponsabilidad social de qué pasó con su proyecto de vida. Es un desafío que también planteamos redoblar los esfuerzos para que los circuitos de atención y acompañamiento a nuestros niños y adolescentes sean ágiles y eficientes”.
Como los menores son inimputables hasta los 15 años, no quedan registros de sus incursiones en comisarías ni datos sobre su accionar. Casanova reconoce esta situación pero aclara que “es difícil lograr datos específicos pero la práctica cotidiana nos dice que son escasas las situaciones en las cuales se interviene y los porcentajes son muy mínimos. Inclusive en ciudades como en Neuquén, en los últimos tiempos y a partir de eficientes intervenciones del sistema de protección integral, bajó la casuística”.
Riesgos

La ONG Amuyen es consciente de que “estamos en presencia de dos riesgos, la droga y la posibilidad de usarlos como arma de delincuencia. Un niño llega a ese espacio cuando lo hemos condenado desde el otro espacio de protección integral a las soledades. Quienes tenemos experiencia en trabajo en niñez, hemos descubierto que a veces la única identidad que le hemos dejado al pibe para usufructuar fue la del delito”.
“Siempre decimos ‘te acompañamos’ y damos la imagen de estar en la mitad del puente de dos proyectos, delito y cárcel, y de familia, comunidad, escuela. Cuando le ofrecemos las alternativas tiene decisiones. A veces sólo le vamos dejando una y por eso hablamos de corresponsabilidades. Cuando la dificultad del adolescente en conflicto con la ley es grave, debemos pensar como sociedad qué hicimos con nuestros pibes”.
Otro punto que atacan con el proyecto del no a la baja, es que el encierro y la institucionalización no están preparados.
Sostienen que un adolescente privado de la libertad “es sumamente caro para el Estado. Lo que habría que redefinir es si no es mejor ese presupuesto ponerlos en el circuito preventivo y de acompañamiento. Y entonces seguramente estas estadísticas, que ya son muy bajas, serían menores aún”.
La ONG confecciona un Mapa Provincial de la Niñez que se presentaría en noviembre, con acciones en Rawson, Trelew y Puerto Madryn. Sacarán conclusiones que trasladarán a los funcionarios responsables de Provincia. En el relevamiento se analizan los circuitos de atención: “Cómo está la niñez en salud y educación, cuáles son las dificultades, el trabajo adolescente y la cuestión presupuestaria”.#

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12 JUL 2017 - 22:10

La organización no gubernamental de Rawson “Amuyen - Marchar con otros” realiza varias actividades para debatir y explicar su oposición al proyecto de bajar la edad de punibilidad.  
El Gobierno nacional impulsa la modificación del Código Penal y plantea revisar el régimen penal juvenil con la baja de la edad de imputabilidad de 16 a 14 años.
Oscar Casanova, miembro de Amuyen, explicó los argumentos que sostienen junto a la red #ARGENTINANOBAJA, para oponerse. Dijo que el proyecto de Nación aparece “como solución a la inseguridad, y ante eso debemos decir a la comunidad que en general, la baja de punibilidad implicaría más pena y más castigo pero en realidad, la cantidad de niños y adolescentes menores a 16 años que incursionan en hechos delictivos graves como homicidios, abusos sexuales y demás, constituyen el 3 o 4% de la estadística nacional y no es muy diferente en Patagonia”.
No sirve

Para la ONG este debate no le sirve al problema de la inseguridad. “El tema impacta fuerte y a veces de manera desinformada y ante un hecho puntual, rápidamente se acepta esta cuestión sin tener en cuenta muchas veces que, algunos de quienes luego serían víctimas de esta cuestión punitiva, son nada menos que sus hijos”.
En cuanto al problema de los niños y jóvenes en estado de carencia, Amuyen plantea la necesidad de trabajar el “estado social” antes que el “estado penal”. Aseguran que “el niño no nace con 14 años ni nace de un repollo. Nace en familia, se desarrolla en una comunidad, debe crecer en un espacio educativo, recreativo y cultural que debe dar el Estado y la propia comunidad”.
“Cuando a un adolescente lo encuentra el sistema penal  a través de un sistema policial, en realidad hay una corresponsabilidad social de qué pasó con su proyecto de vida. Es un desafío que también planteamos redoblar los esfuerzos para que los circuitos de atención y acompañamiento a nuestros niños y adolescentes sean ágiles y eficientes”.
Como los menores son inimputables hasta los 15 años, no quedan registros de sus incursiones en comisarías ni datos sobre su accionar. Casanova reconoce esta situación pero aclara que “es difícil lograr datos específicos pero la práctica cotidiana nos dice que son escasas las situaciones en las cuales se interviene y los porcentajes son muy mínimos. Inclusive en ciudades como en Neuquén, en los últimos tiempos y a partir de eficientes intervenciones del sistema de protección integral, bajó la casuística”.
Riesgos

La ONG Amuyen es consciente de que “estamos en presencia de dos riesgos, la droga y la posibilidad de usarlos como arma de delincuencia. Un niño llega a ese espacio cuando lo hemos condenado desde el otro espacio de protección integral a las soledades. Quienes tenemos experiencia en trabajo en niñez, hemos descubierto que a veces la única identidad que le hemos dejado al pibe para usufructuar fue la del delito”.
“Siempre decimos ‘te acompañamos’ y damos la imagen de estar en la mitad del puente de dos proyectos, delito y cárcel, y de familia, comunidad, escuela. Cuando le ofrecemos las alternativas tiene decisiones. A veces sólo le vamos dejando una y por eso hablamos de corresponsabilidades. Cuando la dificultad del adolescente en conflicto con la ley es grave, debemos pensar como sociedad qué hicimos con nuestros pibes”.
Otro punto que atacan con el proyecto del no a la baja, es que el encierro y la institucionalización no están preparados.
Sostienen que un adolescente privado de la libertad “es sumamente caro para el Estado. Lo que habría que redefinir es si no es mejor ese presupuesto ponerlos en el circuito preventivo y de acompañamiento. Y entonces seguramente estas estadísticas, que ya son muy bajas, serían menores aún”.
La ONG confecciona un Mapa Provincial de la Niñez que se presentaría en noviembre, con acciones en Rawson, Trelew y Puerto Madryn. Sacarán conclusiones que trasladarán a los funcionarios responsables de Provincia. En el relevamiento se analizan los circuitos de atención: “Cómo está la niñez en salud y educación, cuáles son las dificultades, el trabajo adolescente y la cuestión presupuestaria”.#


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