El fútbol puede convertirse en determinadas ocasiones en una pesadilla.
Eso es lo que sintieron a flor de piel las jugadoras de Germinal Verde y Blanco el pasado domingo al recibir de sus rivales un gol cada 4 minutos y medio.
Por la segunda fecha del Apertura femenino de la Liga del Valle, Alumni, vigente campeón, le propinó a la filial del “Verde”, incorporada este torneo, un hiriente resultado que trasciende cualquier tipo de palabra.
Resultado humillante
El “Carbonero”, bicampeón vigente del torneo, se impuso 21-0 a un equipo juvenil, en un resultado histórico para el balompié del noreste chubutense. Nunca antes se había registrado un marcador semejante en un partido liguista en Primera División.
Yuliana Enrique convirtió ocho goles, mientras que Magalí Aguirre y Mariela Gallardo, conquistaron un triplete.
Por su parte, Celeste Piris concretó un par de tantos. En tanto, marcaron un gol Shaira Painemil, Ana Laura Ocaranza, Mariana Guzmán, Laura Pardini y Brenda Mena.
La consecuencia en el vestuario visitante fue predecible. Tras el partido, algunas futbolistas visitantes rompieron en llanto. “Fue durísimo para ellas. Muchas terminaron llorando, con el ánimo por el piso. Son muy chicas”, expresó un integrante del cuerpo técnico del “Verde”.
“Son nenas”
Hubo repercusiones tras el abultado resultado, válido por la Zona A del certamen de la Liga del Valle.
Roberto Monserrat, referente del fútbol femenino de Alumni, expresó su sentir. “Nuestro equipo hizo lo que tenía que hacer. Pero no nos llena de orgullo para nada.
Las nenas de Germinal jugaron hasta el último minuto con mucha entrega”, graficó Monserrat, técnico que obtuvo seis títulos liguistas de forma consecutiva. Obtuvo dos con Alumni y cuatro con Barraca Central.
Monserrat se refirió a las jugadoras germinalistas como “nenas”. No está errado. En su mayoría, son jugadoras cuyas edades oscilan entre los 16 y los 12 años de edad.
“Creo que a las nenas hay que cuidarlas, llevarlas de a poco.
Mecharlas con las más grandes, y que sumen minutos.
Ya te digo. Esto no me llena de orgullo
para nada”, graficó Monserrat.
No es el primer resultado abultado que sufre la fililal del elenco germinalista en el torneo. En el estreno del campeonato, perdieron 8-0 ante Alianza Fontana Oeste, club que no integra el pelotón principal en la Liga.
Una señal
El 21-0 es un síntoma de que hubo un error, del cual las jóvenes no son responsables. No es normal y no es natural perder por ese marcador en un torneo oficial.
Las noveles futbolistas de Germinal Verde y Blanco son víctimas de una mala decisión. Pero quienes sufren en la cancha en vez de disfrutar, son ellas.#
El fútbol puede convertirse en determinadas ocasiones en una pesadilla.
Eso es lo que sintieron a flor de piel las jugadoras de Germinal Verde y Blanco el pasado domingo al recibir de sus rivales un gol cada 4 minutos y medio.
Por la segunda fecha del Apertura femenino de la Liga del Valle, Alumni, vigente campeón, le propinó a la filial del “Verde”, incorporada este torneo, un hiriente resultado que trasciende cualquier tipo de palabra.
Resultado humillante
El “Carbonero”, bicampeón vigente del torneo, se impuso 21-0 a un equipo juvenil, en un resultado histórico para el balompié del noreste chubutense. Nunca antes se había registrado un marcador semejante en un partido liguista en Primera División.
Yuliana Enrique convirtió ocho goles, mientras que Magalí Aguirre y Mariela Gallardo, conquistaron un triplete.
Por su parte, Celeste Piris concretó un par de tantos. En tanto, marcaron un gol Shaira Painemil, Ana Laura Ocaranza, Mariana Guzmán, Laura Pardini y Brenda Mena.
La consecuencia en el vestuario visitante fue predecible. Tras el partido, algunas futbolistas visitantes rompieron en llanto. “Fue durísimo para ellas. Muchas terminaron llorando, con el ánimo por el piso. Son muy chicas”, expresó un integrante del cuerpo técnico del “Verde”.
“Son nenas”
Hubo repercusiones tras el abultado resultado, válido por la Zona A del certamen de la Liga del Valle.
Roberto Monserrat, referente del fútbol femenino de Alumni, expresó su sentir. “Nuestro equipo hizo lo que tenía que hacer. Pero no nos llena de orgullo para nada.
Las nenas de Germinal jugaron hasta el último minuto con mucha entrega”, graficó Monserrat, técnico que obtuvo seis títulos liguistas de forma consecutiva. Obtuvo dos con Alumni y cuatro con Barraca Central.
Monserrat se refirió a las jugadoras germinalistas como “nenas”. No está errado. En su mayoría, son jugadoras cuyas edades oscilan entre los 16 y los 12 años de edad.
“Creo que a las nenas hay que cuidarlas, llevarlas de a poco.
Mecharlas con las más grandes, y que sumen minutos.
Ya te digo. Esto no me llena de orgullo
para nada”, graficó Monserrat.
No es el primer resultado abultado que sufre la fililal del elenco germinalista en el torneo. En el estreno del campeonato, perdieron 8-0 ante Alianza Fontana Oeste, club que no integra el pelotón principal en la Liga.
Una señal
El 21-0 es un síntoma de que hubo un error, del cual las jóvenes no son responsables. No es normal y no es natural perder por ese marcador en un torneo oficial.
Las noveles futbolistas de Germinal Verde y Blanco son víctimas de una mala decisión. Pero quienes sufren en la cancha en vez de disfrutar, son ellas.#