Este mediodía, eran al menos 31 los vuelos cuyas partidas se encontraban demoradas. "La medida no ha tenido ninguna justificación y hasta el día de ayer había una mesa de diálogo permanente abierta con el sindicato que encabeza Ricardo Cirielli", dijo la empresa a través de un comunicado de prensa, en el que subrayó que "está trabajando para intentar normalizar sus servicios y poder reubicar a todos sus pasajeros en vuelos del día de la fecha".
Ante este conflicto, el Ministerio de Trabajo dictó la conciliación obligatoria a partir de las 10 de hoy y por el plazo de 15 días.
"Intímase a la entidad sindical antes mencionada y, por su intermedio, a los trabajadores involucrados a dejar sin efecto, durante el período indicado, toda medida de acción directa", indica el texto de la conciliación obligatoria, al que accedió Télam.
Cirielli enumeró los reclamos de su gremio. Ante la consulta de esta agencia, señaló que Aerolíneas Argentinas "está programando más horas de trabajo a los despachantes operativos del interior", porque "la jornada laboral es de siete horas y media y programan nueve horas".
Otros puntos de reclaman a la empresa, según consignó el líder de APTA, son los "desdoblamientos de horarios de personal por falta de despachantes; infraestructura y equipos tecnológicos para los despachantes del interior en condiciones deplorables, y la violación de convenios colectivos de trabajo en Austral y Aerolíneas".
Cirielli aseveró que los hangares y las oficinas de Austral están "en condiciones deplorables e inseguras para el personal", y que en el mismo estado se encuentran baños y vestuarios de Aerolíneas en el Aeroparque.
Según informó la línea de bandera, los trabajadores que realizaban hoy la asamblea correspondían al área de Despacho, es decir al sector encargado de supervisar los programas de vuelos y la carga de cada avión.
"Por regulaciones, en la Argentina el despacho de los vuelos se hace en el lugar de despegue, cuando en otros países se puede hacer en forma remota.
Por esa razón, es que apenas una decena de personas puede trabar el trabajo de 12.500 empleados de Aerolíneas y provocar demoras a miles de pasajeros", advirtió la compañía.
"La empresa no ha recibido ninguna justificación ni explicación de la medida de fuerza", aseveró Aerolíneas Argentinas en su comunicado.
En ese marco, consignó que, "ayer, otro gremio aeronáutico, APA, había recurrido a la misma metodología de convocar asambleas para generar demoras en los vuelos, situación que pudo ser resuelta por la compañía" y recordó que "hace dos semanas habían hecho lo mismo los pilotos agremiados en APLA".
Este mediodía, eran al menos 31 los vuelos cuyas partidas se encontraban demoradas. "La medida no ha tenido ninguna justificación y hasta el día de ayer había una mesa de diálogo permanente abierta con el sindicato que encabeza Ricardo Cirielli", dijo la empresa a través de un comunicado de prensa, en el que subrayó que "está trabajando para intentar normalizar sus servicios y poder reubicar a todos sus pasajeros en vuelos del día de la fecha".
Ante este conflicto, el Ministerio de Trabajo dictó la conciliación obligatoria a partir de las 10 de hoy y por el plazo de 15 días.
"Intímase a la entidad sindical antes mencionada y, por su intermedio, a los trabajadores involucrados a dejar sin efecto, durante el período indicado, toda medida de acción directa", indica el texto de la conciliación obligatoria, al que accedió Télam.
Cirielli enumeró los reclamos de su gremio. Ante la consulta de esta agencia, señaló que Aerolíneas Argentinas "está programando más horas de trabajo a los despachantes operativos del interior", porque "la jornada laboral es de siete horas y media y programan nueve horas".
Otros puntos de reclaman a la empresa, según consignó el líder de APTA, son los "desdoblamientos de horarios de personal por falta de despachantes; infraestructura y equipos tecnológicos para los despachantes del interior en condiciones deplorables, y la violación de convenios colectivos de trabajo en Austral y Aerolíneas".
Cirielli aseveró que los hangares y las oficinas de Austral están "en condiciones deplorables e inseguras para el personal", y que en el mismo estado se encuentran baños y vestuarios de Aerolíneas en el Aeroparque.
Según informó la línea de bandera, los trabajadores que realizaban hoy la asamblea correspondían al área de Despacho, es decir al sector encargado de supervisar los programas de vuelos y la carga de cada avión.
"Por regulaciones, en la Argentina el despacho de los vuelos se hace en el lugar de despegue, cuando en otros países se puede hacer en forma remota.
Por esa razón, es que apenas una decena de personas puede trabar el trabajo de 12.500 empleados de Aerolíneas y provocar demoras a miles de pasajeros", advirtió la compañía.
"La empresa no ha recibido ninguna justificación ni explicación de la medida de fuerza", aseveró Aerolíneas Argentinas en su comunicado.
En ese marco, consignó que, "ayer, otro gremio aeronáutico, APA, había recurrido a la misma metodología de convocar asambleas para generar demoras en los vuelos, situación que pudo ser resuelta por la compañía" y recordó que "hace dos semanas habían hecho lo mismo los pilotos agremiados en APLA".