La paritaria con los auxiliares de la Educación tuvo una definición inédita en la delegación de Trelew del Ministerio de Trabajo. Allí se congregaron las seis seccionales de ATE, UPCN y SOYEAP. Por el lado del Ejecutivo participó el ministro Coordinador, Marcial Paz, y la subsecretaria de Educación, Liliana Díaz.
Tras más de cuatro horas de deliberaciones y negociaciones, el Gobierno cerró la reunión con una propuesta salarial inamovible para llevar el básico de un ingresante desde los $ 13.600 a $ 21.000 de forma escalonada para junio. Además de una claúsula gatillo de acuerdo al IPC Patagonia para el tercer trimestre, que incluye la variación de precios durante julio, agosto y septiembre.
Cinco de los seccionales de ATE aceptaron la propuesta, pero en una interna con tintes electorales, la regional de Comodoro, con su representante Verónica Rosales (candidata a diputada en la lista de Carlos Linares) decidió no aceptar y realizar medidas de fuerza. Desde el Gobierno hablaron de “extorsión”. Auqnue tampoco UPCN y Soyeap terminaron firmando.
Ante la espera de los gremios, fue el propio Paz el que terminó dictando la letra del acta paritaria. En la que solicitó al secretario de Trabajo una homologación de lo acordado y convocó a una nueva reunión para este viernes para tratar aquellos puntos pendientes. Desde Educación dejaron en claro que no había más para ofrecer desde lo económico.
Informe: Federico Sánchez / Redacción Jornada
La paritaria con los auxiliares de la Educación tuvo una definición inédita en la delegación de Trelew del Ministerio de Trabajo. Allí se congregaron las seis seccionales de ATE, UPCN y SOYEAP. Por el lado del Ejecutivo participó el ministro Coordinador, Marcial Paz, y la subsecretaria de Educación, Liliana Díaz.
Tras más de cuatro horas de deliberaciones y negociaciones, el Gobierno cerró la reunión con una propuesta salarial inamovible para llevar el básico de un ingresante desde los $ 13.600 a $ 21.000 de forma escalonada para junio. Además de una claúsula gatillo de acuerdo al IPC Patagonia para el tercer trimestre, que incluye la variación de precios durante julio, agosto y septiembre.
Cinco de los seccionales de ATE aceptaron la propuesta, pero en una interna con tintes electorales, la regional de Comodoro, con su representante Verónica Rosales (candidata a diputada en la lista de Carlos Linares) decidió no aceptar y realizar medidas de fuerza. Desde el Gobierno hablaron de “extorsión”. Auqnue tampoco UPCN y Soyeap terminaron firmando.
Ante la espera de los gremios, fue el propio Paz el que terminó dictando la letra del acta paritaria. En la que solicitó al secretario de Trabajo una homologación de lo acordado y convocó a una nueva reunión para este viernes para tratar aquellos puntos pendientes. Desde Educación dejaron en claro que no había más para ofrecer desde lo económico.
Informe: Federico Sánchez / Redacción Jornada